Poison Kiss | Na Jaemin

s e i s

"Confesiones."

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Jaemin pov.

Si me pagaran por cada vez que decía algo sin pensarlo dos veces, sería millonario.

- Na, ¿qué quieres decir con eso?

- Digo la verdad Soonnie; eres una gran chica, cualquiera puede darse cuenta de eso, eres linda, agradable, simpática... Simplemente eres tú y eso es perfecto.

Eso sí lo dije con intención, podría pasar mi vida diciéndole a Soonnie que es lo más increíble de este mundo.

- Basta Jaemin, dejemos ese tema de lado ¿sí?

Por primera vez no supe desifrar sus pensamientos y sentimientos... Se veía enojada, pero también estaba avergonzada por lo que le había dicho; sin embargo habían rastros de tristeza en sus ojos.

Tomé la opción de no hablar en lo que quedaba de noche, no quería hacerla sentir incómoda, entendía que estaba triste, quizás necesite espacio.

Terminamos de comer, llevé la vajilla hacia la cocina para luego ir a dormir, claro que en mi habitación, Soonnie necesitaba estar tranquila y yo necesitaba pensar.

¿Por qué? ¿Qué es lo que tiene Jeno que no tengo yo? Quizás él es más interesante, tal vez la atrajo al ignorarla. Simplemente no puedo competir con él.

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Soo Yoon pov.

Jaemin y yo hemos sido amigos hace varios años, se supone que debería estar acostumbrada a que me diga cosas como esas... Pero hoy me he sentido distinta, mis hormonas han reaccionado de una forma extraña.

Sabía que si lo pensaba demasiado terminaría dándome cuenta de cosas que no quería.

Quizás Jaemin me gusta.

Ojalá las cosas fueran más sencillas; admitir que me gusta, decirle, ser correspondida y salir como cualquier pareja normal... Pero eso no funcionaba conmigo, no todo es tan fácil.

¿Y si le decía toda la verdad?

"¿Sabes Na? Creo que me gustas, pero no puedo estar contigo... Bueno, sí puedo, pero no puedo besarte."

¿Podría funcionar una relación sin besos?

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Estaba decidida.

Pasé toda la noche haciéndome preguntas, la mayoría sin respuestas; sin embargo llegué a la conclusión de arriesgarme.

Muy probablemente quedaría en la friend zone y Jaemin no creería lo que realmente me sucede, pero al menos estaría siendo sincera con él.

Me levanté más temprano de lo usual, pues no había logrado conciliar el sueño en toda la noche. Pensaba en hacerle un rico desayuno a Nana, así que de inmediato me puse manos a la obra.

7:00 de la mañana en punto y Jaemin caminaba por el pasillo en dirección a la cocina; a juzgar por su cara, no había sido la única con insomnio.

— Buenos días Nana. — Me acerqué a él con una sonrisa, la cual, por primera vez, no me fue devuelta. — ¿Has dormido bien?

— Sí. — Pasó por completo de mí, se sentó en una de las sillas del comedor y comenzó a desayunar.

Al menos agradéceme, grandísimo idiota.