Poison Kiss | Na Jaemin

v e i n t e

"Dream."

— Señorita. — Kang sintió un movimiento en su hombro, lo cual hizo que se despertara. — Hemos llegado a Seúl.

Todo había sido un sueño. Pero ¿los sueños se cumplían verdad?

Ni siquiera había puesto un pie en tierra y ya tenía esperanzas en que Jaemin estuviese esperándola con los brazos abiertos; pero no fue así.

El encuentro con su padre fue idéntico al de su sueño, pero su Nana no había aparecido, no había ido a su encuentro.

— ¿Qué ocurre bebé? Deberías estar sonriéndo, por fin te haz sanado.

Algo en ella no podía evitar sentirse triste, quizás se había creado muchas expectativas, había armado una película en su cabeza que no se hará realidad nunca.

— Sólo estoy algo cansada... Necesito mi cama.

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— ¡Sorpresa!

Una cantidad de no más de veinte personas saltaron detrás de los sillones, estaban sus amigos, los amigos de su padre, algunos vecinos y compañeros del instituto... Estaba feliz por el detalle, pero él no estaba ahí.

Se sentía mal por estar siendo mal agradecida, de seguro les ha llevado horas preparar la fiesta, pero prescisamente no era esto lo que ella quería; sólo quería abrazar a Nana.

Horas transcurrieron, se limitó a quedarse sentada junto a un par de personas que, de vez en cuando, le preguntaban sobre su estadía en "la casa de su abuela"; claro que le había pedido a su padre que tuviera discreción, sólo quería una vida normal desde ahora.

Cuando dieron las ocho de la noche, la mayoría de sus invitados se habían marchado, sólo quedaban los más cercanos y ese ambiente era el que ella prefería. No es que le desagradara la gente, al contrario, era alguien muy extrovertida, pero sí le molestaban los ruidos muy fuertes y sus vecinas solían gritar mucho.

— No has comido nada desde que llegaste Soonnie ¿qué pasa?

— Nada Rennie, estoy cansada solamente, por favor no piensen que estoy siendo mal agradecida, el gesto ha sido muy lindo. — Mostró una sonrisa que fue poco convincente para sus amigos.

— Sé sincera con nosotros, no te juzgaremos.

— Lo sé, pero no quiero que se vuelva incómoda la sala... Estoy bien si estoy con ustedes, son una de las cosas que más extrañé.

— Y a Jaemin ¿no? — Claro, su padre no era tonto, siempre supo lo que sucedía con ella, era más que obvio para él. — Lo hemos invitado, él no ha querido venir.

Como padre-madre, sus intenciones eran ser completamente transparente con ella y no crearle falsas ilusiones y Soonnie lo tenía más que claro, su padre no le diría eso para dañarla, él quería protegerla.

Algo dentro de Kang se destrozó, pensaba que ya era imposible que su corazón se rompiera aún más, pero estaba pasando. De todos modos era culpa de su imaginación pensar que Jaemin estaría esperándola, qué ingenua.

De seguro tiene sus razones.

Nadie quiere ver a la persona por la cuál se ha sentido traicionado más de tres veces, pero Nana es distinto; no tiene rencor, sólo tiene miedo.