Perdón

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     Calle vacía, luces parpadeando, solo yo y la obscuridad, logro ver a alguien a lo lejos, lentamente camino hacia él, agacho la mirada y paso por su lado sin importancia, se percata de mi presencia y me empieza a seguir, me detengo repentinamente, giro la mirada y lo observo bien, soy yo, antes de que él hable empiezo a correr, tengo miedo, los árboles no dejan de crecer a mi alrededor, los evito y siento mi respiración agitarse cada vez más, no quiero morir, pero ya estoy perdido.

     Camino por algunos minutos, no sé dónde estoy, la oscuridad me consume, el frío me atrapa, solo puedo recostarme en uno de los árboles, no puedo creer que exista alguien idéntico a mí, los escalofríos recorren mi cuerpo, como pequeñas agujas, que me hacen temblar, intento ver a mi alrededor, creí que lo había perdido, pero puedo verlo a lo lejos, él me está buscando.

     Pasan las horas y el frío empieza a congelar mis movimientos, escucho el sonido de los insectos por la noche, me tranquilizo pero un ruido intenso suena a mis espaldas, intento moverme pero él ya está frente a mí, las lágrimas caen, quiero gritar, pero es imposible, el frio ahoga mis gritos, estoy muriendo, lentamente se acerca a mí, cierro los ojos y esperando lo peor, él se lanza a mí y me abraza, el miedo y el frio desaparecen, la tristeza, las lágrimas, el odio, las penas, las despedidas, los falsos amigos, los sueños rotos, los días duros y las noches frías solo se desvanecen, me ama, lo amo, me amo.

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