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-Aquí.- Dijo, casi en un susurro, dirigiéndose todos a ese lugar, tapándose con las ropas sucias y colocando objetos delante o arriba de otros para esconderse mejor. Quedando todos juntos para poder tranquilizarse y no ser vistos.

Cerrando los ojos ante todo lo que ocurriera afuera de su pequeña "fortaleza", cubriendo sus bocas con sus manos sucias, sin escuchar más que sus propias respiraciones y las de los dos chicos a su lado. Todos abrazándose intentando tranquilizar sus nervios.

-Seiya, ¿donde estas pequeño? Es hora de tu comida.- Escucharon la voz de una mujer, mirando todo el lugar a oscuras, acercándose al interruptor para que ilumine el ático.- Bebé, si sales y comes tu comida. Prometo no hacerles nada a las otras dos basuras, ¿no querrás que mamí se enoje, o si?.- No hubo ninguna respuesta, así que supuso que no había nadie. Salio inmediatamente cerrando la puerta con llave. Tranquilizandose los niños, respirando hondo, tranquilizando cualquier nervio y sus temblores.

-De nuevo nos encerró.

-¿Cuando nos vamos a poder ir?

-Tranquilos, encontraré la forma de que salgamos. Incluso tú, Seiya.

-Empezara a buscarme cuando se de cuenta de que desaparecimos. Más si yo voy con ustedes.

-Ninguno aquí es feliz, necesitamos poder escapar y buscar a nuestros padres.

-Ni siquiera sabes quienes son, podría ser cualquiera, además, ni siquiera sabemos si los están buscando.

-Estamos dentro desde que tenemos memoria, y estoy seguro de que los encontraremos.

-Onii-chan. ¿Y si ni siquiera se acuerdan de nosotros?

-Lo harán, unos padres no pueden olvidar fácilmente a dos hijos perdidos, y estoy seguro de que los encontraremos.

-Pero no tenemos ni idea de donde estarán, ni siquiera sabemos en donde estamos.

-Los encontraremos. Estoy seguro de eso.- Finalizó, dejando sin cualquier oposición al chico castaño enfrente de el.

-Bien, tu ganas. Iré.- Dijo, haciendo sonreír al par de hermanos.

-De seguro te querrán. Y nos tratarán mejor que esa rubia.

-Se que mi madre es mala no del todo, pero aun así ¿que tal si ella logra separarnos? Si es capaz de golpearme por defenderlos no sabré que hacer.

-No creo que le interese buscarnos, y si lo hace tendremos cuidado.

-¿Y que haremos?

-Esperaremos hasta la noche, ya tenemos lista la cuerda. Al menos sabemos que los tres podemos pasar por esa ventana. Pero tendremos que tener cuidado, si causamos mucho ruido todo se arruinará. Y no creo que los gritos que suelte en la noche la hagan darse cuenta.

-Esta bien. ¿Y ahora que hacemos?

-Canta una canción. Solo tu te acuerdas de algunas oraciones que nos cantaban nuestros padres.

-Aun así, no se que dicen en realidad.

-Es por la variedad de significados que tienen las palabras. Ni siquiera yo logro entenderlo. Aun si voy a la escuela.

-Al menos seras el cerebro del grupo.- Comento, sonriéndose entre si antes de ver a su hermano.- En realidad solo recuerdo un cachito. Solo no te emociones o nos descubrirán. Solo escuchame. Si levantamos la voz nos escuchara.- Este asintió, sonriéndole mientras se acercan para escuchar la corta melodía.- ♪Omoidaseruka Deatta hi no koro. Hora ima tobitatou. Meguri yuku kitsesu no hashi de. Koro. Oboete irukai dotone yuku noka. Hora ima tobitatou. Meguri yuku kitsesu no hashi de♪.- Canto. Quedándose los tres más tranquilos, observando nada más que oscuridad y las pequeñas facciones de sus amigos/hermanos. Esperando a que sea de noche y puedan salir de esa casa.

(3ra Temporada) Omegaverse Asakar (AU) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora