Artistas

música y alcohol

La partitura es dejada con cuidado sobre el caballete del piano de nuevo, la mirada apagada le echa un último vistazo antes de que las manos del muchacho se muevan firmen casi sin pensar sobre las teclas.
La primera es presionada delicadamente emitiendo un sonido agridulce, de manera rápida sus dedos se mueven sobre el teclado, su mano izquierda no tarda en llegar acompasando la melodía principal.

Lan Zhan cierra los ojos escuchando lo que crea, sus manos se mueven por el teclado con una maestranza impecable que consiguió con puro esfuerzo acompañadas de un sentimiento casi inhumano de frustración cuando se equivocaba en alguna nota. Sin hablar de los dolorosos calambres que sufre en las manos después de horas tocando el instrumento sin parar.
No se arrepentía para nada de todo lo que sufría porque él no se conformaba con ser bueno con el piano él quiere ser el mejor.

Sus composiciones son el espejo del alma y su última creación tenía un cierto gusto melancólico, casi triste. Lan Zhan no se encontraba bien.
Con cierta pena toca las últimas amargas notas y descansa sus dedos sobre el teclado.

Con aire cansado dirige su mirada al móvil vibrante a su lado, al visualizar el nombre se plantea si contestar la llamada o no. Hoy no estaba teniendo uno de sus mejores días y no quería tener otro disgusto así que aunque le pesa decide ignorar la llamada entrante.

Se centra de nuevo en la partitura cambiándola a la siguiente.
Toma el mezclado de miel y leche caliente y aclara su voz; sus dedos vuelan hacia las teclas.

Comienzan los primeros acordes y enseguida se hace presente su cálida voz resonando en la sala.

—I'll keep on trying might as well If you decide  — cierra sus ojos en un gesto de tranquilidad, le gusta lo que hace, ama lo que crea—All is well I'll keep on trying might as well If you decide all is well— sus dedos finos se deslizan por las teclas mientras su voz baila por el aire libre.

Va a comenzar una nueva estrofa cuando es interrumpido por un fuerte golpe en la puerta. Sus ojos cristalinos miran con cierto temor de soslayo ¿Qué debe hacer? Simplemente quiere seguir ignorando todo a su alrededor.

De nuevo la música se hace presente, Lan Zhan suspira pesado frunciendo el ceño levemente, está intranquilo.

De nuevo un golpe suena tras la puerta.

— Lan Wangji abre— una voz muy conocida se hace presente, suena como un eco—, soy yo.

El pianista duda durante un segundo para finalmente abrir dejando pasar una elegante figura hacia el interior de su apartamento.

— Te he llamado como diez veces al teléfono ¿Acaso lo volviste a guardar?— cuestiona mientras coloca dos bolsas verdes sobre la mesa del comedor.

— No— sentencia—, estuve practicando.

El recién llegado le mira con cierto disgusto.

— ¿Entonces me estabas ignorando?— no le mira directamente pues está colocando la comida sobre la mesa—.Compré comida italiana, algo de pasta nunca viene mal ¿No crees?

—mmh— Lan Zhan se sienta frente al invitado y se sirve los raviolis en el planto que le alcanza el otro— no te ignoraba— dice— ,eres mi hermano y respeto tu opinión.

Su hermano le sonríe a la vez que eleva su vista mientras mira cada uno de sus movimientos, quiere mucho a Lan Zhan y sabe lo afectado que está por todo lo ocurrido unos días atrás.

Lan Xichen está de pie, arrastra la silla para que su hermano menor tome asiento, el mayor anda de un lado para otro colocando cubiertos, servilletas y vasos en la mesa. Ve al otro jade poniendo una pequeña cantidad de pasta en el plato de porcelana.