Artistas

mundo adulto

Siente que el sueño se le perturba y con una mareada desgana se incorpora en la cama, tiene la vista borrosa y su cabeza da la bienvenida a un dolor punzante que le hace cerrar los ojos fuertemente, la habitación le da vueltas de campana. Se siente mareado y enfermo.

Una náusea repentina le golpea, sale de la cama con un movimiento débil en el cual casi cae al suelo por la sensación de vértigo que le cosquillea por el cuerpo; se apoya en la silla de su cuarto avanzando hasta el perchero donde finalmente de un torpe impulso llega hasta la puerta abriéndola. Sigue con su pobre técnica hasta llegar a duras penas al baño donde prácticamente se lanza de rodillas al inodoro donde empieza a devolver toda la Sonrisa del Emperador que había tomado la noche anterior.

El ruido nauseabundo atrae a Jiang Cheng al baño donde se queda contemplando la escena con cierto retintín.

— ¿No decías que no ibas a beber? — dice su compañero con malicia.

Wei WuXian levanta su cabeza de la taza con sus ojos llorosos sintiéndose como si le hubiesen atinado una paliza, su estómago se revuelve frenético gruñendo con furia.

— Eres un hermano...—controla la náusea que vuelve de nuevo— horri...ble— hunde la cabeza por segunda vez en la taza y el otro se acerca sujetándole los cabellos para que no le estorbasen.

— Me quedaré contigo hasta que se te pase y después te preparé una infusión para que te sientas mejor con la resaca— comenta, aunque no sabría afirmar si el azabache le está escuchando

La espalda se convulsiona hacia abajo con cada arcada mientras que Jiang WanYin le da palmaditas de comprensión con su mano libre.

Una vez que se siente mejor el mayor humedece un trapo en agua tibia y le limpia al otro la comisura de los labios después lo ayuda a levantarse y a caminar hasta la sala donde lo sienta con cuidado en el sofá. Va hacia la cocina y prepara una infusión perfecta para apaciguar la resaca no sin antes dejar que beba agua hasta saciarse.

— Bien— empieza Cheng— ahora jura de nuevo que no vas a volver a beber— dice apartando los vasos vacíos a la mesa.

— No te rías de mi—lloriquea dramáticamente el menor recostándose en el sofá— me gusta beber y no lo voy a dejar... pero la resaca— con puro teatro se lleva las manos a la cabeza masajeando sus sienes— es una tortura.

— Aprende a controlarte de una vez, Wei Ying— le regaña el mayor llevándose los vasos a la cocina donde comienza a lavarlos.

— por cierto ¿y la chica?— pregunta alcanzando su móvil mirando los mensajes.

— La lleve a su casa en coche— vuelve a la sala tomando su anterior sitio.

— ¡Oh!—exclama con sorpresa— pensaba que como era un polvo seguro te la ibas a traer aquí.

Jiang Cheng frunce el gesto aparatando la mirada algo molesto por el comentario.

— Era una niña aún, no estaría bien— dice refunfuñando—; Yo soy un adulto.

Wei WuXian lleva su mirada hacia arriba frotando su mano con la barbilla fingiendo pensar algo en voz alta.

— ¿Cuánto tiempo hace qué no follas?— cuestiona al aire—,seguro que más tiempo del que yo llevo sin escribir— mira divertido la expresión de su hermano.

Jiang Cheng le clava la mirada como un puñal a Wei Ying quien se encuentra complacido, la cara del mayor está levemente sonrojada por aquella afirmación, explota en una cólera momentánea.

— ¡Wei WuXian eso no te importa!— grita haciendo que el menor cierre los ojos por el dolor de cabeza.

— Eres tan gruñón— comenta frotando sus sienes de nuevo.