Difícil de esconder {Sterek}

Destino

Stiles lo supo en cuanto entró al establecimiento, supo que en ese lugar se encontraba su persona destinada en cuanto sintió la corriente eléctrica recorrer su espina dorsal y darle energía extra.

Entró como si no hubiera sentido nada y siguió con sus planes de ese día, no había averiguado quien realmente era su pareja hasta que la chica rubia que lo atendió señaló con especial intención a un hombre grande y oscuro a un lado del mostrador.

-Su nombre es Derek, y creo que tiene los ojos puestos en ti-

La chica había dicho, y Stiles inmediatamente jadeó cuando miró al hombre, era bello, de una forma algo tosca, pero increíblemente sexy, una mandíbula perfectamente perfilada y con la sombra de una tupida barba, gruesas cejas que casi de unen cuando frunce el ceño y sus ojos, hermosos ojos, Stiles no puede verlos de cerca, pero jura que son lo mas hermoso que ha visto. Hay un eco en su mente, algo parecido a un recuerdo, pero que él sabe no ha pasado, una vista de esos ojos al despertar en la mañana en su cama.

Él sabe lo que es, lo que esa sensación significa, está viendo directamente a su pareja destinada, y su pareja tiene una mirada hambrienta en sus ojos que le dice a Stiles que no es el único con el deseo de acercarse.

Pasa un rato, con Stiles entrando en pánico internamente, cuando de repente él tiene al hombre justo frente a él, y realmente no sabe qué decir, pero no es necesario, Derek está balbuceando cosas en clara señal de lo nervioso que está, ellos estrechan las manos y Stiles puede sentir la chispa volar entre ellos, algo que fácilmente se confundiría con una carga estática, pero él sabe que solo es su magia rebosante y a flor de piel, ansiosa por salir y causando una sensación de cosquilleo bajo su piel, sin duda este hombre es para él.

Ellos hablan, al principio es algo tenso y forzado pero rápidamente pasa a algo sencillo, algo que fluye y se siente natural, y Stiles se da cuenta mientras están hablando, puede verlo en su aura cuando fija su mirada en él, esa clase de presencia animal a su alrededor, no hay duda que su pareja es algo, algo como él, que la gente ingenua piensa que no es real, él probablemente sea un cambiaformas.

Su teoría se vuelve más concisa cuando puede ver un destello rojo en los ojos del hombre y su nariz aletea un par de veces en medio de la conversación, él se pregunta si puede oler su chispa, y si es así él no lo menciona.

El día pasa realmente rápido y cuando se da cuenta él está corriendo para no llegar tarde con Lydia y que esta no lo mate. Él se da cuanta cuando está por llegar a su apartamento, y no ha dejado de pensar en el hombre melancólico, ellos no intercambiaron contactos, Stiles estrella su frente contra el volante y espera que tenga otra oportunidad.

Resulta que él realmente es un chico con suerte, o tal ves es cierto que él y su pareja destinada están unidos, pero él vuelve a encontrar al hombre rudo, esta vez en la biblioteca. Él está buscando un par de libros antiguos cuando lo siente, de nuevo es esa sensación gratificante de energía extra atravesando su espina dorsal.

Él se siente más ansioso de lo habitual, y cuando toma el libro que buscaba puede verlo al otro lado del estante, su pareja destinada, Derek está distraído leyendo el título de algún libro y no ha notado la mirada de Stiles. El pálido se ríe de lo romántico que pudo ser eso.

Al parecer su risa llama la atención del otro hombre y este lo mira, una sonrisa instantánea mostrando sus adorables dientes de conejo, Stiles se vuele a reír, esta vez de lo irónico que es comparar un hombre lobo con un adorable conejo.

Ambos intercambian un par de sonrisa más antes de encontrarse en el borde de la estantería, ellos se saludan y pueden sentir la chispa de nuevo.

-Bueno señor depredador- Stiles le guiña un ojo al decir el apodo y puede escuchar un gruñido de fastidio -es bueno haberte encontrado de nuevo-