El amor todo lo puede.

Capitulo 3

Todo estaba en completo silencio.

La oscuridad del cuarto dejaba ver a dos figuras pegadas la una a la otra, escuchándose el sonido de sus lenguas al chocar, lamiéndose cada parte de su boca ¿Cuánto llevaban así? Da igual, no importaba. Naomi solo se dejó llevar por los besos húmedos de Nicolás, la atrapaban por completo, la hacían perder el control. Ambas manos alrededor de su cuello completamente pegado a él.

Percibió como el chico la levanto momentáneamente del suelo, desplomándola después sobre la cama, con el encima de ella.

El chico no se inmuto cuando noto las manos de la chica empujándolo levemente, seguía con lo suyo, besándola. Entonces una molesta vibración apareció en su pantalón, en la bolsa de su pantalón. Quiso ignorarlo. No, más bien lo hizo. Siguió besándola intensamente, salvajemente.

Un pinchazo de dolor le invadió el labio, ¡Lo mordió! Se apartó bruscamente de ella mirándola con cara de "¿Qué crees que haces, perra?"

"Contesta por favor" fue lo que su rostro reflejo al verla. Al parecer ella también sintió la vibración de su celular.

Se puso de rodillas en la cama ¡Ah no! ¡No la dejaría moverse! ¡No después de morderle el labio! Con ambas rodillas puestas a lado de la cadera de la muchacha, se dispuso a sacar el celular de la bolsa de su pantalón.

Leyó el nombre de la llamada ¡Genial! >sarcasmo< era su padre.

-¿Qué quieres?- fue lo primero que dijo al contestar -"No seas así, Nick, cariño"- su rostro se ensombreció al escuchar la voz de una mujer. Solo existía una persona en el mundo que lo llamaba así.

-"¿sabes? Estoy afuera de tu departamento, ¡Sé que estas adentro y no quieres abrir!"- aun a través del aparato pudo percibir el tono de molestia de la mujer.

- Lo siento. Abriré enseguida - el tono de su voz cambio, era suave y calmado. ¿Se había disculpado? ¿En serio? ¿Nicolás se disculpó? Pero sobre todo ¿Que era aquella llamada? ¿Una llamada de la mujer que estaba fuera del departamento? No lo quería creer, pero termino aceptándolo. De nada le servía a Naomi hacerse la tonta.

Sus orbes azules se clavaron en la mirada miel de la chica. Sin nada más que decir, se inclinó hacia ella atrapando sus labios con los suyos. Un beso corto, justo después sintió como el chico le mordió el labio inferior. Su venganza. Se apartó bruscamente de la chica. Caminando lentamente a la entrada del departamento.

Ella podía estar segura de algo... Nicolás era una persona difícil de comprender.

No quiso seguirlo, quería quedarse en la habitación para así no tener que ver a la mujer que le llamo hace unos momentos. Bueno, eso era lo más probable.
Pero no pudo evitarlo. Sus pies caminaron por si solos hasta quedar a poca distancia de Nicolás. Este la miro con el rabillo del ojo, no se inmuto y se dedicó a abrir la puerta.

-¡Oh Nick cariño! ¿Porque no contestas mis llamadas? te he llamado desde hace más de 5 semanas- se quejó – ¿cómo puedes ser tan malo conmigo? ¡Yo te amo y tú simplemente me rechazas! – sintió que quería vomitar. Llevo ambas manos a su boca. Para reprimir el sollozo que quería escapar de su garganta. Aunque no todo estaba perdido, él la ignoraba, no recibía sus llamadas >aunque era lo mismo con ella< tal vez a él no le importaba esa mujer.

-Lo siento- hizo una pausa –Siempre que me llamas hablamos por mucho tiempo y yo no tengo precisamente demasiado tiempo libre- sintió su corazón quebrarse ¿Cuántas veces en este día habían sentido ese dolor en su pecho? Cuando esa mujer lo llamaba a su celular hablaban por bastante tiempo, eso es lo que Nicolás dio a entender ¿Significaba que ellos tenían una relación especial...? Ciertamente Naomi no quería saberlo y no se quedaría ahí para averiguarlo.