Forgotten |Bucky Zombies|

7

-El football es una tontería- se quejó Eliza mientras caminábamos por el pasillo.

-Ah, gracias por darme ánimos- soltó Zedd con sarcasmo.

-Zabalagunzca- se burló Bonzo inclinándose hacia mí, logrando sacarme una risilla que trate de esconder para que Zedd no se enfadara conmigo.

Aunque creo que esto no funcionó ya que mi hermano comenzó a reírse de manera notablemente molesta, para después darnos una mirada que hacía notar su estado de ánimo- Muy graciosos.

-¿Yo que hice?- le pregunte bajo a Bonzo.
Pero no alcanzó a contestarme, pues el zombie comenzó a hablar nuevamente.

-Creo que a esa animadora le gusto.

-¿La que te golpeó? ¿En la cara?- recalcó  Eliza con sarcasmo.

-Si, si, si, creo que ahí hay algo.

-Oye, los humanos son malos y los animadores monstruos- le riñó Eliza mientras señalaba un cartel pintarrajeado con la leyenda "NO ZOMBIES"- Sin ofender Zara, pero esto tiene que cambiar- finalizó antes de marcharse.

Pude ver como Bonzo modificaba el mensaje en la pared. El giro que le dio a la frase plasmada me recordó que en toda prueba que esta vida presente se puede encontrar una solución, si se es lo suficientemente creativo.

"CONOZCAN ZOMBIES" fue lo último que leí antes de dar vuelta en el pasillo.

-Dime que por lo menos tú estás de mi lado Zara- había suplica en su mirada mientras me abría la puerta.

-Esto no se trata de eso Zedd. Ella tiene razón, y lo sabes- salimos del establecimiento de camino a casa.

-Entonces, ¿estás diciéndome que debería rendirme? - la discusión que estábamos teniendo lo tenia afectado y se notó cuando se quedó de pie a medio patio.

-Eso ni siquiera se acerca a lo que quiero decir- caminé hasta quedar a su lado.

-¿Podrías explicarte? No estoy entendiendo nada hermanita- lo último lo dijo con sarcasmo mientras me despeinaba.

-¡Basta!- me quejé mientas reía. Para evitar que siguiera molestándome lo empujé lejos.

Ambos estábamos riendo de nuestra tontería, pues cuando estás con Zedd nunca necesitas una verdadera razón para reír. Hasta que noté como al otro lado de la reja había dos chicos viéndonos con repulsión- A esto me refiero- mencioné haciéndoles mala cara al par de humanos- Ellos no tienen ningún derecho a vernos de esta manera, Eliza tiene razón, las cosas deben cambiar.

-¿Eso es lo que te preocupa? Pensé que era algo más grave- lo interrogue con la mirada, pues no entendí lo que quería darme a entender- Creí que odiabas a los humanos al igual que Eliza, y para eso no estoy preparado.

-No los odio- conteste de inmediato, pues era verdad. Por mucho que no compartiera sus ideas nunca llegaría a odiarlos.

-¡Perfecto!- se encogió de hombros y siguió caminado.

- Te admiro.

-¿Por qué?

-¿Cómo puedes seguir tan optimista después de todo lo qué pasó hoy?

-Porque sé que vamos a cambiar las cosas Zara, y también sé que tú y yo seremos los que empiecen esto.

-¿La revolución?- extendí mi puño para que él lo chocara con el suyo.

-La revolución- dijo con una sonrisa.

Chocamos los puños e hicimos un sonido de explosión mientras lo representábamos con las manos.