Cuando ella llega 《JULRIGHT》

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Narra Julia

Estos días en Cádiz se me han pasado muy rápido, y quién me diría que volvería a Barcelona en el mismo coche con Carlos.

Me da mucha pena dejar atrás mi ciudad pero esta semana ha sido increíble, he podido pasar tiempo con mi hermana y mi madre...y también con Carlos.

—Locuela, ¿en que piensas?—dice Carlos apoyándome la mano en la pierna sin dejar de mirar a la carretera.

—Nada, simplemente recordaba lo guay que ha sido esta semana.

Carlos empieza a reírse sin motivo y yo no lo entiendo.

—¿Que tiene de gracioso?—digo haciéndome la ofendida.

—Nada, que se me ha venido a la cabeza el momento en la fiesta, cuando te besé delante de tus 'amigas'.

—¡CARLOS!— sabe que muero de la vergüenza solo de recordarlo pero a el le encanta restregármelo por la cara.

—Vale,vale...lo siento...pero admite que fue un buen beso—dice levantando una ceja.

—Fue un beso genial.

El viaje de Cádiz-Barcelona es bastante largo, Carlos insiste en que el conduce y yo me quedo dormida un par de horas.

Después de parar a comer en un pequeño restaurante de carretera tardamos unas dos horas en llegar a nuestro destino.

Los padres de Carlos no están en la ciudad por lo que tendrá que dormir solo en casa.

—Julia, porfi,ven a dormir conmigo—dice Carlos poniendo un puchero mientras que baja mis maletas de su coche.

—Hoy no Carlos, todavía tengo que terminar unos papeles para mañana y hacer mil cosas en casa.

—Esta bien...—dice nada convencido.

Me acercó a el y le paso los brazos por el cuello dándole un beso en los labios, Carlos esconde su cabeza en el hueco de mi cuello y me susurra 'te echare de menos locuela'.

No se porque ahora me llama así, pero me encanta.

Cuándo subo a mi apartamento lo primero que hago es llamar a mi madre para decirle que ya hemos llegado y que no se preocupe, decido poner música y darme una ducha antes de empezar con la colada...los informes para mañana...me espera una tarde entretenida.

Narra Carlos

Llego a casa bastante cansado, ha sido un viaje bastante largo pero ha merecido la pena, voy a tumbarme en la cama cuándo recibo un mensaje de Dave.

Dave
Carlucos! ¿Que tal te va la vida? Que desde que tienes novia ya no me cuentas nada...

Me siento súper mal, Dave es mi mejor amigo y hace mucho que no hablo con el, ni le conté mi viaje express a Cádiz.
Aunque estoy bastante cansado decido invitarle a cenar unas pizzas en mi casa para ponernos al día.

........

—¡Madre mia! Como te lo montas!—exclama Dave desde el sofá.

—No es para tanto—le respondo mientras acabo de cortar las pizzas.

—Claro que si, quien lo iba ha decir, Carlos en una relación estable.

Eso es verdad, yo siempre solía tener un lío por noche, pero desde Julia todo es diferente, con ella todo es mejor y yo también me siento mucho más feliz conmigo mismo.

Dave se queja del mal tiempo que hizo en Barcelona esta semana, y yo desconecto un poco y pienso en Julia, solo hace tres horas que no la veo pero necesito estar con ella.

—¡Carlos! ¿Me estas escuchando?—dice Dave moviendo una mano enfrenten de mi cara.

—Si,si—digo algo rojo.

—Ya,ya. Pues esta noche hay tormenta y con lo que ha ti te gusta....

—¿¡¡¡Que?!!!—digo visiblemente asustado, odio las tormentas y el lo sabe.

—No seas exagerao, que ya tienes una edad.

Dave tiene razón, este miedo tiene que acabar.

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Dave hace rato que se ha ido por lo que estoy solo en mi enrome casa, la lluvia no hace mas que aumentar y me estoy empezando a poner nervioso.

El primer trueno me pillo de sorpresa por lo que decidí recoger las sobras de pizza e irme a mi habitación pero mientras subía por las escaleras la luz se fue y me quedé allí en medio, simplemente iluminado por la luz de la luna que reflejaba la cristalera.

Vale, ahora si que tengo miedo, saqué mi móvil y puse la linterna mientras intentaba calmarme y buscar una solución.

Pensé en llamar a Dave, pero el vive bastante lejos de mí, no era una opción además, tampoco quería que se riera en mi cara.
La única persona con la que podría pasar la noche era Julia, pero era bastante tarde, mañana trabajaba y me sentía mal por despertarla, pero en cuanto otro trueno calló no me lo pensé dos veces.

—¿si?— contestó rápido, al segundo pitido de la línea.

—Julia, se ha ido la luz...—creo que pudo notar el nerviosismo de mi voz por que rápidamente me dijo...

—Buah, es verdad tu miedo a las tormentas, anda vente para mi apartamento, que aunque yo tampoco tengo luz tengo una manta calentita.

Esta chica era lo mejor de verdad, cogí las llaves del coche y sin chaqueta salí de casa.
No tardé mucho en llegar a casa de Julia, apenas había nadie en la carretera, subí las escaleras lo más rápido que pude y llamé a la puerta.

Julia no tardo en abrirme con un pijama rosa y una coleta alta, yo me lancé a abrazarla.

—Que ganas tenias de verme ehh—dijo revolviéndome un poco el pelo.

—Anda vamos para mi habitación que estoy muerta de sueño.

Su habitación olía a vainilla y estaba perfectamente ordenada, por lo que podía percibir.

—Venga, metete en la cama, yo voy un momento al baño.

Estaba muerto de sueño, no me lo pensé dos veces, me metí en la calentita cama de Julia y respirando su olor me quede dormido.

Narra Julia

Apenas tardé diez minutos en el baño, pero cuándo entre a la habitación Carlos estaba dormido boca arriba, con la manta a la altura de la cadera, lo cual deja al descubierto su impresionante torso.

Me quito la sudadera que llevo encima del pijama, me meto en la cama y me acurruco a contra él.

Es tan adorable que, incluso estando dormido, me aprieta contra él y yo le doy un beso en los labios.

Momentos como este son los que me aseguran que todo irá bien.

🔺Hola!!!! Espero que os guste el capítulo. No os olvidéis de dejarme una estrellita ⭐️ y un comentario 💬, que me hace mucha ilusión.

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