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Kim: *Tratando de contener sus lágrimas* Perdón - dijo sarcástica - Vine a llevar mis maletas.
Luisa: *Entró detrás de ella y empezó a sacar las maletas*
Juan: Kim
Kim: *lo ignoró* Ana - dijo gritando -
Ana: *Bajó con su maleta* Nos vemos señor y gracias por todo.
Kim: Ana se va conmigo - dijo sonriendo -
Juan: Porque te llevas a Ana?
Kim: Ella quiere venir conmigo - dijo acercándose a la puerta- Ah *Sacó su billetera* Ten las tarjetas, no quiero nada que venga de ti. Si es por Alice y Luciana, lo depositas a la cuenta de mi mamá. También deje las fotos de su salida en la cama. Ponlas en un cuadro o lo que quieras. *miró a Sofia* Te dejo en tu nueva casa. *volvió a utilizar su sarcasmo* Adiós. *salió de la casa y Juan fue detrás de ella*
Juan: Kim, espera.
Kim: Y así querias otra oportunidad - dijo con la voz quebrada - Eres un idiota Juan de Dios *le tiró una cachetada*
Juan: No te vayas por favor, ella no..
Kim: No me importa lo que digas, adiós. *subió al auto y Luisa empezó a manejar*

Juan: *Entró a la casa* Sofía creo que es mejor que te vayas.
Sofía: Pero..
Juan: Me confundes más, lo siento.
Sofía: *Tomó su bolso y salió de la casa*

Kim todo el camino estuvo llorando. Llegaron y Luisa le preparó una manzanilla.

Ana: Señora Kim ya no llore, piense en su bebé. Tiene que estar tranquila. Quiere que le prepare algo?
Kim: No Anita, no tengo hambre.

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Juan llamo a Leo para que vaya a su casa. Le contó todo lo que había pasado en esa última hora y él solo le dijo "Eres un idiota". Era lo mínimo que podía decirle después de todo lo que había echo. Aún así Leo se iba a quedar con él esa noche.

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Después de un rato Kim se quedó dormida. Luisa estuvo con ella en todo momento y aunque Lu solo era un año mayor, sentía que Kim era como una muñequita, tan dócil. Le dolía en el alma que este mal. Y trataba de estar bien por ella, para darle fuerza y por su embarazo también. Era la mejor amiga que cualquiera persona quisiera tener, por eso Kim la amaba tanto y para todo contaba con ella. Luisa dejó en el cuarto a Kim y fue dónde las niñas.

Luisa: Necesito que apoyen en todo a su mami, esta bien? Mañana viajarán a Mazatlán.
Alice: Te voy a extrañar tía Lu *la abrazó*
Luisa: Y yo a ustedes mis amores - dijo abrazandolas -

Sé quedó con ellas hasta que se quedarán dormidas y luego fue a hablar con Mateo.

Luisa: Me duele ver a Kim tan mal amor.
Mateo: A mi también me duele ver mal a la pequeña Kim - dijo triste -
Luisa: ¿Qué hacemos?
Mateo: Nos vamos a Mazatlán con ella - dijo mientras una sonrisa se asomaba en su rostro -
Luisa: Enserio? - dijo lo más feliz posible -
Mateo: Si amor, porque tú eres capaz de dejarme y irte con Kim - dijo riendo - O me vas a negar que lo estabas pensando?
Luisa: *rio* No amor - dijo sarcástica - No puedo dejarte sola con los niños. Y tú trabajo?
Mateo: Puedo adelantar las vacaciones.
Luisa: Eres el mejor hermoso, gracias *Lo abrazó*

A la mañana siguiente Luisa estaba preparando el desayuno cuando escucho a Kim vomitar, corrió hasta el baño y la ayudó a recoger su cabello.

Kim: 5 meses y los vómitos siguen.
Luisa: Te ves super mal, te haré una manzanilla.
Kim: Qué envidia amiga, el embarazo a ti te tiene regia - dijo saliendo del baño -
Luisa: Te tengo una noticia.
Kim: Es mala?
Luisa: Yo no doy noticias malas amiga. O si, pero este no es el caso *sonrió* Me voy a Mazatlán contigo - dijo lo más feliz posible -
Kim: Enserio? *dio un grito de felicidad* Me haces muy feliz, nunca te vayas de mi vida por favor.
Luisa: Nunca - dijo abrazandola -
Kim: Y los niños y Mateo?
Luisa: Ellos vienen conmigo *sonrió* Ahora vamos a desayunar. Mateo *gritó para que él bajara*
Kim: No tengo hambre Lu
Mateo: *Entrando a la cocina* No aceptaremos un "No tengo hambre" verdad amor *miró a Luisa*
Luisa: Te preparé un jugo de Fresa y le puse el ingrediente secreto - dijo sonriendo -
Kim: Esta bien *Tratando de sonreir*
Mateo: Ya aliste las maletas amor, tenemos que estar en el aeropuerto en dos horas.
Kim: Eres un gran chico *se acerco a él y le dio un beso en la mejilla* Gracias por ser tan bueno conmigo.
Mateo: De nada hermosa, sabes que siempre podrás contar con nosotros - dijo abrazando a Lu con su otro brazo -

Todos desayunaron, terminaron de alistar algunas cosas y se fueron al aeropuerto. Kim no tenía ganas de nada, se puso unos lentes negros ya que sos ojos estaban un poco hinchados por tanto llorar. Kim había olvidado un pequeño detalle, su vida ya no era tan privada como ella hubiera querido. Toda la fama de Juan había echo que la mayor parte de su privacidad sea revelada. Llegaron a el aeropuerto y vieron a unas personas con micrófonos corriendo hacia Kim..

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Gracias por leer♥️

Psdt: Recuerden leer la nueva novela que está en este mismo perfil♥️

Unidos por el destino. Temporada 2Donde viven las historias. Descúbrelo ahora