Strip | Pedrimente

10

uhhh 👀👀

-

A las 10 y tantas de la noche, Pedro decidió que era hora de irse. La despedida fue larga, ninguno de ellos quería alejarse.
El celular del más alto reventaba de mensajes por parte de Camila, mensajes que él respondería tal vez mañana en la tarde o, mejor aún, el lunes.

Estaba nervioso, sabía que Camila ya debería estar sospechando como habían sucedido las cosas y que ya estaría viendo como hablar con sus papás, pero Pedro ya estaba cansado e iba con todas las intenciones de confesarle todo a sus padres.

--

Después de despedir a pedro en la puerta de su casa, Martin se sintió asustado, algo le decía que lo que venía no iba a ser bonito.

Y tenía razón.

Prendió su celular encontrandose con los mensajes de un número desconocido.

"Hola, Martin. 🙂"
"Apuesto que ya sabes quien soy 🙂"
"Ni te atrevas a faltar el lunes al colegio 🙂"

"Camila."

Martin se mordió los labios, no tenia idea que sería capaz esa chica ¡Ni si quiera la conocía!

Bloquear el número fue su primera acción, también sacó un screenshot en su celular, después le contaría a Pedro.

--

Camino a su casa, Pedro sentía como todo el estómago se le revolvía, con cada paso que daba sentía los nervios golpearle más duro.
Estaba parado frente a la puerta, con el miedo a flor de piel, nunca pensó que girar una llave fuera tan difícil.

Finalmente entró, vió a sus padres en la sala de su casa. Trago duro, respiró hondo y se paró frente al televisor.

-Mamá... Papá...-los llamó él con los ojos cristalizados, sus padres lo miraron confundidos y prestando mucha atención a lo que les iba a decir su hijo.- Les estuve ocultando esto por demasiado tiempo, no quiero que piensen que estoy confundido ni nada, estoy seguro de como me siento en este momento y no es ninguna... "fase" que ya superaré, así me defino yo y espero puedan... aceptarlo.-pedro no era capaz de mirarles a los ojos, estaba totalmente inseguro y solo pedía que la tierra lo tragara.- Yo soy... bisexual.

Por fin se sintió capaz de levantar la mirada, los vio a ellos, a sus padres, a las dos personas que lo conocen mejor que nadie, confesandoles algo que no se deria confesar. ¿Te imaginas a los heterosexuales diciéndoles a sus padres lo que son? No pasa. Su padre se levantó del sillón, yéndose hacia la cocina o tal vez su habitación, solo quedaba su madre la cual parecía estar buscando las palabras exactas para hablar con su hijo.

-No te preocupes por tu padre, hijo, solo le tomará un poco poder asimilarlo.-ella tomó las manos de pedro entre las suyas.- Eres nuestro hijo y... te queremos desde que supimos que vendrías, te amamos tal y como eres, Pedro.- Él abrazó a su madre, agradecido por que lo haya aceptado. Ahora solo faltaba contarles lo demás.

-Hay algo más, mamá.- ella volvió a ponerle atención.- Camila... ¡Ella está loca! Mamá te juro que no la puedo soportar más ¡Ella quiere atacar a Martin!

Su madre se veía sorprendida, siempre había visto a Camila como una chica super linda e incluso pensó que llegaría a casarse con su hijo.
Ninguno de ellos creía en lo que estaba pasando.

--

Después de hablar con sus padres, Pedro se sintió más tranquilo, solo faltaba asegurarse de que Martin iba a estar bien.
Unos quinientos mensajes adornaban el logo de Whatsapp en su celular, los que finalmente abrió. Tan rápido como lo hizo le llegaron más.

"pedro!????????"
"repsonde rapidooooo!!!!!!"
"me vas a vistearrr????"
"reaponde!!!!!"
"estuviste con ese martin verdaddd??"
"dime ka verdad pedro"
"🙂🙂🙂🙂🙂🙂🙂🙂"
"no sabes lo que soy capaz de hacer 🔪 🙂"

Leer eso fue horrible ¿Qué le pasaba a esa chica?
"Te veo hoy en el parque, Camila" fue el único mensaje que le envió.

Y después de ese llegaron muchos más.

--

Camila podía parecer una chica dulce, agradable, fuerte e inteligente, frente a las personas que quería, pero todos tenemos defectos.
Ella era obsesiva, se encaprichaba con algunas cosas y luego las desechaba, era tóxica y egoísta.

Después de la partida de Pedro, su primer novio, no dejo de pedirle a sus padres que por lo que más quisieran la llevaran a Buenos Aires. Ellos se negaron, un capricho de su hija no les haría gastar tremenda cantidad de dinero en lo que es una mudanza, pero nada detendría a Camila. Ahorró y trabajó para conseguir el dinero no solo para su boleto sino para el de sus padres y para pagar la mitad de una mudanza. Ella sin duda estaba orgullosa, pensaba que lo había logrado ¡Volvería con Pedro!

Oh, pobre Camila, debió dejarlo ir.

Grande fue su sorpresa al enterarse de que la única persona en la cabeza de ese chico no era ella. Todo se le vino abajo y entonces ella pensó.

"No será mío, está bien, pero tampoco será de ese."

Estaba dispuesta a hacerlo, había trabajado muy bien su plan, manipularia a quien sea para que ella no sea culpable de nada. No tenía miedos, estaba segura de lo que iba a hacer.

Mataría a Martin.

--

-Lo he pensado bien, Pedro, en serio quiero pedirte disculpas por mis acciones... solo estaba pensando en mi misma y...

-Está bien, Camila, solo te pido por favor que no te acerques a Martin ni a mí, haz tu vida sola, enamórate otra vez.-le había dicho Pedro con el minúsculo cariño que le quedaba por ella.

Ella actuó su emoción, abrazó a pedro y él a ella. Tal vez el último abrazo que se darían... frente a una cámara.

--

Al abrir los ojos no sintió más que terror al saber que era lunes, se le revolvía el estómago cada vez que lo pensaba. Estaba asustado, obvio que sí, no tenía idea de como sucederían las cosas ese dia.

El camino hacia el colegio fue como una película de terror. Cada vez se acercaba más al enorme edificio y cada vez se sentía más inseguro. Había olvidado por completo contarle a Pedro sobre los mensajes que le había dejado Camila y se golpaba mentalmente por no haber actuado de inmediato.
Calculaba unos 20 metros de distancia entre él y el gran portón del lugar cuando una mano lo jaló en dirección contraria.

-Ni si quiera te atrevas a gritar, maricón enfermo de mierda.

-

avisen si hay algún error 😤

nos vemos mañana, besos en el hombro. 💕