Cuidare de ti. [Aizawa Shouta]

[混乱]

-Anda, despierta. -Aizawa intentaba despertar a la chica que dormía plácidamente en su sofá.- ¡ARRIBA!

La castaña se sobresaltó. -¿¡QUE TE PASA?!

-Son las 5:30am, debes ir a tu hogar a ponerte ropa limpia para ir a trabajar. -Explicaba un cansado Shōta.-

-Espera, son las 5:30am, solo dormiste poco más de 2 horas. -la chica se levantaba del sofá.- ¿Como harás para man... -la chica recordó que el azabache aprovechaba cualquier momento para dormir.-

-¿Que?

-Nada. -la chica se estiró y suspiró cansada.-

Aizawa dejó a Eri con su vecina, la cual fue difícil de convencer a tan temprano hora del día. Aizawa y Hoshi caminaban entre las calladas calles de la ciudad.

-Puedes irte a descansar, no era necesario venir a acompañarme. -la chica miro hacia arriba para ver a los ojos al mayor.-

-Estás bajo mi dirección, si algo te pasará me iría muy mal y más aún cuando vienes de mi casa. -El mayor hablaba sumamente agotado.- Eres peor que cuidar de un animal.

"Que amigable" pensó sarcástica la castaña. Continuaron su camino hasta llegar a la morada de la chica.

-Pasa, puedes dormir en el sofá mientras me arreglo. Aún hay tiempo. -la chica de mirada esmeralda trataba amigable a Shōta por ser su superior.- Claro, solo si quieres. -El azabache entró a la casa yendo directo al sofá.- Creo que si quieres.

La chica vio como el hombre de tez pálida cerró sus ojos recostado en el sofá. Akiyama camino directamente a su baño a darse una ducha. La chica se puso su ropa de héroe. Se dirigió a la sala donde encontró una agradable escena; Twinkle se encontraba dormida sobre el pecho del azabache. La pequeña soltó una pequeña risa.

-Aizawa~ -Se acercó al oído del mayor.- Debes comer algo.

El azabache abrió los ojos y observó a la castaña que estaba a un lado suyo. La miraba directo a los ojos.- No tengo hambre.- Shōta se miraba tranquilo, mechones de pelo estaban posados sobre su rostro. La chica volteó la mirada.-

La fémina se fue a su cocina y tomó un desayuno rápido. Regreso a la sala a darle aviso a su superior para poder irse ya a la jornada, pero a este lo encontró sentado en su sofá con una sonrisa en su rostro mientras jugaba con la pequeña gata.

-¿Aizawa?

La miro, bajo a la gata y regresando a su semblante cotidiano, dijo: -Si ya estás lista, vayámonos. Odio llegar tarde.

La joven pintó una sonrisa y así se dirigió junto al mayor a su trabajo. Llegaron a tiempo, al entrar se encontraron con Yamada, el cual los abrazó  y estuvo charlando con ambos, con esa brillante y viva personalidad que el rubio posee.

-GOODYE MY DEAR FRIENDS! -se despidió Mic mientras sus 2 amigos entraban al aula de clases.-

Hoshi se fue a su lugar en la esquina del aula. Aizawa dio su clase con normalidad, pero la chiquilla se encontraba perdida en sus pensamientos. Entre todos sus pensamientos, vino a ella la imagen de Aizawa mirándola a los ojos. La chica se levantó sobresaltada del asiento, toda la clase la miro.

-A menos que hayas visto a un alíen sobrevolar la escuela, no veo la necesidad de hacer un acto tan ridículo como ese. -Aizawa la miro con gran desaprobación.-

La chica se disculpó haciendo una reverencia y se volvió a sentar. "¿Porque pienso eso? Aizawa es un imbécil, solo conozco hace 5 días. Esto es ridículo" la castaña se regañaba en sus pensamientos. El resto de la clase continuó así, con una chica confundida por sus extraños pensamientos.

-Eso sería todo. -Aizawa se dirigía a la puerta del aula despidiéndose de la clase.- Akiyama, vámonos.

Hoshi salió de sus pensamientos y siguió al hombre de negra cabellera. Mientras seguía al mayor, su miraba estaba posada en el, lo veía con detenimiento, buscando qué cosa podría llegarle atraer de él.

El hombre se percató de la mirada de la más joven.- ¿Algo que quieras decirme?- la pregunta asusto a la chica de tez clara y rápidamente está empezó a negar con la cabeza.-

Aizawa dio sus clases del día y Hoshi seguía callada analizando la extraña situación. A Aizawa no le molestaba que la chica estuviera callada, al contrario, se sentía tranquilo, la joven lo llegaba a desesperar algunas veces por sus comentarios. Pero no dejaba de verlo extraño, ver callada a una persona tan abierta, era algo preocupante. A la hora de salir la chica seguía con ese extraño comportamiento.

El azabache quería preguntar que le pasaba, pero tampoco era algo que le importara.

-¿QUE TE SUCEDE, AKIYAMA-SAN? -llegó el rubio abrazando por los hombros a la anteriormente mencionada.-

-Nada, solo estoy cansada. Ayer tuve el enfrentamiento con Aizawa y vaya que me agote. -la chica sonrió.-

El antes mencionado no creyó que realmente fuera cansancio, en la mañana se veía llena de luz como de costumbre, algo debió pasar para ese repentino cambio, ¿pero que? Desde que despertaron ambos no habían tenido oportunidad de no estar en la visión del otro. Recordó que la chica había empezado con esa extraña actitud después de levantarse de imprevisto en la primera clase,¿habrá sido por lo que le dijo? El sabia que la chiquilla era en ocasiones infantil, pero no parecer ser del tipo que se deprima por esa clase de comentarios. 

-Aizawa, are you okay? -pregunto el ojiazul. El somnoliento hombre no se había percatado que permaneció con la mirada perdida durante su razonamiento de la situación.- 

-Estoy bien, iré a casa. -se encamino a su hogar.-

-Yo también quiero irme a casa, nos vemos. -La castaña se dirigió igualmente a su morada. Se despidió con una sonrisa, pero al momento de darse la vuelta, su semblante cambio nuevamente al confundió.-

Llego a su hogar y se tiro en su sofá, Twinkle se le acerco. 

-Solo por que hoy estoy sensible, te perdono. -La gata blanca se recostó a lado suyo.- 

"¿Porque?" Sus pensamientos estaban confundidos. 

-Twinkle. -la gata maúlla en son de respuesta.- Es ridículo que me "guste" Aizawa. ¿Realmente me gustara? -la joven empezó a contradecirse en cada oración que salio de su boca.- Lo se, es imposible que me guste. Es muy amargado, su voz es tan ronca, es muy pálido, tiene ojeras muy marcadas. ¡Si! No me gusta. Es una simple confusión. 

La chica suspira aliviada y sonríe.

-No me gusta.