Recuerdos de Paris

Capítulo 6

Baje del avión y me dirigí a la zona de equipajes, es la primera vez que vengo a España desde que nos fuimos hace más de quince años, David prometió que habría alguien esperándome, me pregunto cómo me reconocerán. Hace mucho que no nos vemos y todos hemos cambiado un poco.

estaba decidiendo si valdría la pena arriesgarme a tomar un taxi cuando un hombre se me acerco. Su cabello estaba blanco en las sienes, tenía gafas y aspecto cansado, supe que era el antes de que hablara.

– ¿Emily? ¿Eres tú?

– eso creo, la turbulencia del avión como que me sacudió un poco así que no estoy del todo segura

– bien, temía que te me perdieras entre toda esta gente, ¿tienes todo tu equipaje?

– me falta recoger una maleta

– vamos pues

– ¿cómo sigue ella?

– sin cambios, todo igual desde la última vez

Caminamos por el aeropuerto, después de recoger la maleta nos fuimos directo al estacionamiento, David quería que pasáramos por su casa para dejar mis cosas, pero yo no tengo la intención de quedarme ahí, así que le dije que había reservado habitación en un hotel cercano al hospital para estar cerca por si mi madre necesitaba algo.

– deberías quedarte en casa, no es necesario que gastes en un hotel

– gracias, pero lo prefiero así

– sabes que eres bienvenida en casa, ¿verdad?

– de verdad te lo agradezco, pero no quiero causarles molestias, me quedare en el hotel

– no eres ninguna molestia, pero está bien, igual la invitación queda abierta

Me limite a mirar por la ventanilla, no era un viaje muy largo, pero estaba cansada. Según lo que me habían dicho, mi madre había llegado inconsciente al hospital, tenía múltiples fracturas en las extremidades, en tres costillas y el cráneo, hasta que no bajara la inflamación de su cerebro ocasionada por el traumatismo los médicos no podían decir el grado de daño ocasionado, tampoco sabíamos si despertaría. Su columna también estaba rota, lo más probable, si despertaba es que no pudiera volver a caminar, al menos no pronto, necesitaba un trasplante de medula ósea, sus hijos y David ya se habían hecho la prueba de compatibilidad y estaban esperando resultados. Si ninguno de ellos salía compatible, lo haría yo.

Después de registrarme en el hotel acompañe a David al hospital, mi madre estaba en la UCI y no permitían el paso, pero a David le daba igual, se la pasaba en la sala de espera, me dijo que lo hacía porque no quería estar lejos si ocurría algo, los hijos de mi madre, porque aún me negaba a pensar en ellos como mis hermanos, estaban en la escuela y el trabajo respectivamente, pero según me dijo David por la tarde ambos estarían ahí.

Me dirigí a la recepción y pregunté por el director del hospital. Tenía una carta sellada del hospital Saint-Louis, me la había dado el director, el cual recibió la llamada de David solicitando mi regreso a España por cuestiones familiares, y según me habían dicho, el Hospital donde estábamos andaba en busca de más personal médico. En realidad, esperaba no quedarme demasiado tiempo, pero nunca se sabe, y además si trabajaba aquí, podría entrar a ver a mi madre.

– Buen día, ¿en qué te puedo ayudar?

– Buen día, quisiera aplicar para ingresar a trabaja aquí

– claro, tienes que ir con la doctora Sánchez, es la última puerta por el pasillo de la izquierda

– vale, gracias