Capítulo 5

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Al final mi madre no vino, ni el primer mes después de su llamada, ni los siguientes, siempre encontraba algo que la detenía de venir y así paso un año, yo decidí que las vacaciones las utilizaría para ir a la playa, no pensaba ceder a mi madre, no todavía al menos, ahora por lo menos mantenía el contacto de forma regular.

Alizee y yo nos fuimos una semana a la playa, solo nosotras, ella aun esta con Dean, pero decidimos pasar esta semana solo de chicas. Tanto estrés del hospital merecía un descanso, así que dábamos largos paseos por la arena, y probábamos la comida del lugar, era increíble.

– me gustaría quedarme más tiempo

– creo que a Dean no le gustaría que te quedaras

– tendré que convencerlo de mudarnos a algún lugar cerca de la playa

– la playa está bien, podrías mudarte a Hawaii

– siempre he querido visitar Hawaii! Cambiando el tema, ¿qué ha pasado con Dashiell?

– sigue en el hospital, contra todo pronostico

– no seas tan cruel con él, lo rechazaste tanto que tuvo que conformarse con Camille

– oh cuanto sacrificio ¿no?

– vamos, no seas cruel, el pobre aun babea por ti

– pues tiene una forma muy rara de demostrarlo, además el no babeaba por mi...

– pero es que tu no lo quisiste cuando... ¡ouch!

– que paso?

– algo me pico el en pie

– algún bicho?

– creo que solo fue una roca, una muy puntiaguda al parecer porque aquí no hay nada

– a ver déjame, ver tu pie

No tenía más que un pequeño puntito rojo en la planta del pie, así que lo dejamos pasar, después de nuestro paseo en la playa, Alizee tuvo la genial idea de ir a bucear, algo que al inicio me puso un poco recelosa, pues odio que los animalitos me rocen el cuerpo cuando estoy en el agua, pero al final me deje convencer, así que nos apuntamos con un guía, y nos llevó en una lancha hasta los arrecifes de coral luego nos ayudó a ponernos el equipo y nos zambullimos en el océano.

Fue como entrar en un mundo completamente diferente, había peces de todo los colores y la luz del sol se reflejaba en sus pieles dándoles un aspecto tornasolado, es increíble la cantidad de criaturas que viven aquí, era como estar en una dimensión desconocida. Había estrellas de mar pegadas en el lecho arenoso, y peces entre las anemonas y corales.

Los peces rozaban mis piernas al pasar nadando y me hacían cosquillas en los costados, inclusive el cabello de Alizee parecía que tenía vida propia, fue hermoso. Todo tiene una tonalidad distinta bajo el agua y los reflejos del sol crean un espectáculo impresionante.

Al final de la semana ninguna quería irse, pero nuestras vacaciones terminaron oficialmente y tuvimos que regresar, nuestro trabajo no se hace solo

– Emily, tenemos que regresar el siguiente año!

– definitivamente si

Decidimos pasar nuestra última noche en la arena de la playa, tiradas viendo al cielo, cerca nuestro había una hoguera y un grupo de jóvenes estaba alrededor, lanzando palos y viendo las llamas cambiar de color, el alcohol circulaba por el grupito, todos parecían estar pasándosela en grande. Casi amaneciendo, Alizee y yo regresamos al hotel.

– chicas, ¿qué tal les fue en sus vacaciones?

– muy bien Dean, Alizee está deseando mudarse de forma permanente

Recuerdos de ParisDonde viven las historias. Descúbrelo ahora