ALFA TERCO.

5K 455 49
                                    

Min SooHae se encontraba en el ala real del palacio rojo recogiendo sus cosas para cuando su nieto heredará las tierras, hasta que se topó con aquel pergamino de plata que con tanto recelo guardaba pues allí estaba escrita la mitad de la profecía que indicaba que desgraciadamente su nieto era aquel alfa dentro del papel.

SooHae ha reinado durante muchos años Rubelina y todos allí la conocen como "La Abuela", ella ha estado esperando a que su nieto fuera lo suficientemente mayor para retomar el mandato, claro había puesto una condición... conseguir a su predestinado a manera de que la profecía se acelerará de alguna manera, pero no se imaginaba que su precioso nieto lunar sería tan terco como su fallecida hija.

La Anciana era la única en toda al región que sabía donde estaba la gema principal de Rubelina, el Topaz Rojo Imperial, además de saber la ubicación del castillo de La Luna Menguante y como llegar a el.

Recientemente habia llegado al reino una carta donde se anunciaba la junta anual de Mineralia, donde se discutian temas como economía, seguridad y más cosas... Al parecer esta junta hablaría sobre la revelión del Onix y las regiones de rocas sin lustre y pensó que sería una buena oportunidad para que su nieto aprendiera como sobre llevar una amistad con los demás reinos y los nuevos regidores de estos.

- Min Yoongi, mocoso ven aquí- la abuela lo tenia agarrado de la oreja donde apretaba fuertemente el arete de rubíes - Te he dicho que tú irás a la junta y no recibo un no por respuesta - Min Yoongi no quería ir pues aun no era el Rey y sus demás amigos ya lo eran, le parecía humillante aun no serlo todo por su terca abuela.

- ¿Quién te crees para mandar a tu próximo rey? - lo único que se escucho en todo el reino fue un estruendoso sonido, aquel sonido que indicaba que la abuela min acababa de darle un golpazo en la cabeza a su nieto -Yahh por qué la violencia, eishh - dijo tallándose la cabeza mientras murmuraba cosas indescifrables con un puchero.

- Porque no me respetas, ya te dije Min Yoongi, todos debemos ir y tu no serás rey hasta que no encuentres a tu destinado y te aseguro que posiblemente esté en esa reunión - dió un portazo dejando solo al alfa y salió al jardín de las rosas.

- Yi ti diji min Yingi , patrañas - escupió al suelo y salió por la puerta principal junto a su hermoso caballo negro, un regalo de la tierra del jade por su cumpleaños veintiuno - Ya verás que mi pareja esta aquí, esta sangre no se va a ensuciar con las demás gemas - Yoongi nunca conoció a sus madres pero su abuela le contó una historia sobre eso.

Cuando Yoongi estaba por nacer, su madre la hermosa SooBin no aguanto el dolor del parto y murió feliz por traer a su hijo, su delta orgulloso se había perdonado así mismo dejando ir el alma de su cuerpo, como su destinada no soporto la perdida murió junto a su amada y ambas cenizas se encuentran resguardadas en el palacio rojo.

Lo que no sabía era que Soobin había logrado ascender al cielo superior o reino lunar bajo el nombre de Diana, predecesora de Selene.

- ¡Guardías! - un grupo de alfiles rojos se reunieron alrededor del escarlata - Quiero que reúnan a todas y todos los omegas del reino que posean los labios mas rojos, las uñas mas hermosas y el cabello más brillante y de color fuego - asintieron y salieron en búsqueda de los pedidos del príncipe.

Por otro lado la abuela lo observaba desde el jardín riéndose de la terquedad de su nieto por querer buscar lo imposible en su reino, mil veces ya le había dicho que su predestinado no vivía en Rubelina pero por más que le haya dicho este no entendía.

De cierto modo a la anciana le recordaba a su hija.

Horas pasaron cuando los guardias habían reunido ya a poco más de 100 hermosos omegas de labios color sangre y cabellos cerezas.

Mineralia | YM PAUSADADonde viven las historias. Descúbrelo ahora