XXIV

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Advertencia: Capitulo con muchas escenas sexuales. No me hago cargo de daños psicológicos.

Narra Harry:

Me senté en una de las sillas de piel al otro lado del escritorio de Niall. Él estaba estudiándome y eso me molestaba. Yo había sido quien lo llamó y arregló este encuentro. ¿Porque estaba tan malditamente divertido?

—Voy a pagarte la cantidad completa por el alquiler del condominio. Yo sé cuál es la tarifa y te hice un cheque por todo un año de alquiler. Aunque, Emma probablemente no va a estar viviendo allí mucho tiempo. Al lograr que confíe en mi, voy a hacer que se mude conmigo —Deslicé un cheque por su escritorio.

Niall miró abajo hacia él y luego de vuelta a mí. —Asumo que esto es porque tú no quieres que me esté haciendo cargo de lo que es tuyo.

—Eso es correcto.

Niall asintió y recogió el cheque. —Bien. Yo no debería tener que hacerme cargo de Emma o tú bebé. Pero lo haría. Tú podrías no creerme, pero estoy feliz de que estés enterado del embarazo. Solo no jodas las cosas. Tú tendrás que asegurarte de que Gemma mantenga sus garras dentro.

No necesitaba a Niall diciéndome lo que hice y lo que no necesitaba hacer. Nada de esto era asunto suyo. Sin embargo, aún no había terminado con él, así que hacerlo enojar era mala idea.

—No quiero que trabaje turnos dobles o afuera en el calor. Se niega a dejar de trabajar pero sus horas necesitan ser acortadas.

Niall se cruzó de brazos sobre su pecho y se inclinó hacia atrás en su asiento. — ¿Ella sabe sobre esto? Porque lo último que supe, necesitaba todas las horas que pudiera conseguir.

—Lo último que supiste era que yo no sabía que ella estaba cargando mi bebé. Nada puede sucederle, Niall. No puedo permitir que nada más le pase.

Él asintió y dejó salir un profundo suspiro. —Bien. Estoy de acuerdo. No me gusta que me digan que hacer pero estoy de acuerdo.

—Una cosa más —dije antes de levantarme—. Jimmy es gay, ¿Cierto?

Niall soltó una carcajada y entonces asintió. —Sí, lo es, pero guárdate eso para ti mismo. A las mujeres les gusta venir solo para mirarlo. Recibe buenas propinas solo por eso.

Bien. Yo creí que él lo era pero su fijación a Emma me molestaba. —Entonces supongo que él puede revolotear sobre mi chica.

Niall esbozó una sonrisa maliciosa. —No creo que pudieras detenerlo aún si lo intentaras.

Mi teléfono sonó mientras caminaba hacia mi Range Rover. Esto me recordó que Emma no tenía teléfono. Así que no sería ella llamándome. Iba a visitarla ahora. Hablaríamos del asunto entonces. Sacando mi teléfono, vi el nombre de mi madre en la pantalla. La había ignorado durante cuatro semanas. Yo tenía a Emma  de vuelta pero aún no me encontraba listo para hablar con mamá. Presione el botón de Ignorar y guarde mi teléfono de vuelta en mi bolsillo.

Una vez que estuve en lo de Emma revisé debajo del tapete y estuve feliz de ver que no había una llave escondida. Había hablado con ella y Dani la noche anterior sobre lo inseguro que era eso. Golpeé la puerta y escuche los pasos en el otro lado. El auto de Dani había estado en el club cuando me fui, así que sabía que Emma estaba sola. Solo pensar en tener algo de tiempo a solas con ella me hizo sonreír.

La puerta se abrió y una “recién arrastrada de la cama” Emma se asomó en el otro lado sosteniendo una dona. El rubor en sus mejillas era adorable. La pequeña diminuta camiseta sin mangas cubriendo esas grandes y hermosas tetas suyas y los pequeños shorts bóxer tomaban lo adorable y la convertían en ardiente.

"Atrévete a Quererme"Donde viven las historias. Descúbrelo ahora