CAPITULO 30

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Dígame doctor ¿Qué es lo que sucede?¿ La enfermedad de Vania ha avanzado más de lo previsto?, ¿La vida de los  bebés está en peligro?.

-Nada de eso Max, Vania goza de perfecta salud salvo por las secuelas de su accidente.

-¿Qué me quiere decir con eso?

-Que Vania nunca estuvo enferma, alguien en el laboratorio estuvo alterando los resultados de sus análisis y hasta hace poco nos dimos cuenta, es por eso que le pedí al responsable de laboratorio que le volvieran hacer todos los estudios a Vania para estar completamente seguros, también dimos con el responsable de esta vil infamia y por supuesto se ha establecido una denuncia en su contra, por parte del hospital; pero quiero decirte que no actuó solo, una persona le estuvo pagando para que hiciera todo esto.

-¿Pero quién pudo ser capaz de semejante bajeza doctor?

-Su nombre es Patricia, ¿eso te dice algo?

-Por supuesto que sí- dijo Max furioso

-Solo nos queda esperar que rinda su declaración Enrique que es la persona que estuvo alterando los resultados y también ella se verá bastante comprometida con la justicia.

-Lo único que me importa ahora es saber que Vania está bien y que su vida no corre ningún peligro.- dijo Max

-Pueden ir a casa tranquilos que así es, solo tendrá que venir a sus chequeos porque ya pronto nacerán esos pequeños.

-Así lo haremos doctor

Al salir del consultorio Max llamó a sus padres y a los míos les dijo que tenía algo importante que comunicarles pero que no lo podía hacer por teléfono, dijo que los esperaba en casa. Fue a la habitación donde estaba esperándolo llegó me dio un beso y me dijo sonriendo es hora de ir a casa.

Yo estaba muy nerviosa de camino a casa y no decía nada; creo que Max lo notó me tomó de la mano y dijo:

-No hay nada de qué preocuparnos ya todo pasó- en ese momento no comprendí exactamente lo que quería decirme con eso. Entonces le pregunté

- ¿Max los bebes están bien?

-Claro que sí amor- me respondió llevándose mi mano a sus labios para darme un tierno beso.

-Max si estuviera pasando algo tú me lo dirías ¿Verdad?

-Por supuesto amor pero no pasa nada, quiero que estés tranquila, no le hace bien a los bebes que estés  estresada.

Cuando llegamos a casa  nos recibieron muy contentos Helena y don Raúl entramos a la casa y Max me pidió que nos quedáramos en la sala; se me hizo algo extraño que no me dijera que descansara en la recamara, cosa que agradecí pues estaba casada de estar en cama.

Al poco tiempo llegaron mis papas y mis suegros no se me hizo algo extraño pues siempre estaban al pendiente de mí; ya una vez todos en la sala Max se sentó a mí lado me abrazó y dijo:

-Tengo algo muy importante decirles por eso les pedí que nos reuniéramos.

Papá Renato fue el primero en preguntar y yo solo miraba a Max intrigada por lo que iba a decir.

-¿Qué sucede Max?

-No quiero que se preocupen todo está bien, de hecho nunca estuvo mal.

- ¿A qué te refieres con eso hijo?

-Vani no está enferma de nada, está completamente sana. El doctor Johnson me informó que comenzó a tener sospechas de que algo no estaba bien en la enfermedad de Vania y le pidió al responsable de Laboratorio que le volvieran a practicar todos los estudios a Vani para saber que era lo que estaba sucediendo. Cuando tuvieron los resultados comenzaron a investigar que había sucedido con los resultados anteriores y se dieron cuenta que alguien  había alterado los resultados de los estudios hasta que  dieron con los responsables de esto.

Esperando el amorDonde viven las historias. Descúbrelo ahora