Tócame

Prólogo

Si me preguntarán cuántas veces Olivia Harper rompió mí corazón...

Yo jamás en mi vida estaría con alguien tan mierda como Adam, ni siquiera somos amigos.

En realidad nada, solo no quiero que me vean llegar contigo.

Haría cualquier cosa para que no me relacionen contigo.

Ve y dile eso a alguien que te lo crea, porque yo no te creo ni tú nombre, estúpido .

Ayudarme ¿Tú? ¿Qué me podría aconsejar un hombre que se acuesta con todas?, ¿Qué tenga sexo con todos los hombres qué pueda?. No creo que alguien como tú pueda ayudarme.

Puedo estar a un milímetro de ti, y lo único que  siento es asco. No te confundas, Clark, yo no soy idiota y sé que eres un casanovas.

Sabes muy bien que jamás saldría con alguien como tú. Eres todo lo que odio, juegas con las mujeres, solo las usas por diversión, no seré una más.

No son rumores, son hechos. No saldré jamás contigo y no pienso seguir hablando de esta estupidez.

Para mi sí pero para ti no porque en este preciso momento se acaba tu maldito juego que consiste en joderme la existencia. Siempre supe que eras una basura de persona pero jamás me imaginé de que serías capaz de aprovecharte de mi condición solo para obtener un maldito revolcón conmigo.

No te me acerques. Recuerdo la clase de persona que eres, recuerdo que te encargaste de decirle a Margareth que supuestamente me había acostado contigo y permitiste que lo dijera frente a varias personas. Recuerdo a la perfección que lo único que buscas es sexo y solo eres otro eslabón en la infinita cadena de personas que solo velan por cumplir sus caprichos sin importar a quién lastiman en el camino. Pero ¿Sabes? Jamás pensé que fueras capaz de armar toda una película cliché, fingir que sentías algo por mí ¿Y todo para qué? Para demostrarte a ti mismo que sí quieres algo lo obtienes.

Lo que soy es lo que tienes en frente, y está Olivia te odia con toda su alma y quiere verte lejos de su vida, escoria humana.

No hay nada que hablar. Lo que sucedió fue un error de lo cual me arrepentiré el resto de mi vida y me odiaré por siempre.

No tengo tiempo para esto.

Felicidades, te deseo un buen viaje.

Diría un sin fin de veces, pero ninguna dolió tanto como en el momento que nuestras miradas se cruzaron y ella decidió irse, poniendo así el punto final a nuestra historia.

Mis ojos siguen el trayecto del automóvil con la esperanza de que en cualquier momento se detendrá y ella bajará y correrá hacía mí, pero estamos hablando de Olivia Harper y ella no hace esas cosas.

Siento mí corazón comprimirse al momento que todos nuestros pasan por mí cabeza como una película romántica con un final triste y enseguida mis ojos se nublan, pronto las lágrimas comienzan a rodar por mis mejillas y ni siquiera trato de detenerlas.

—Adam, traje una...—Las palabras de Alanís  se quedan en el aire al ver mí rostro—Dios ¿Qué ha sucedido, Adam? —Lanza la botella de agua al suelo y corre a abrazarme.

Me dejo envolver en los delgados brazos de mí hermana y enseguida mis lágrimas surgen con más intensidad.

—Ella renunció a mí, así sin más. Ni siquiera me dió la oportunidad de darle mí versión. Se acabó, se acabó y sin darse cuenta se ha llevado mí corazón.

Su abrazo se intensifica.

—Sabes que Olivia es muy orgullosa, solo es cuestión de tiempo para que se dé cuenta que...

—Le dije que sí no venía no la volvería a buscar más, y sabes que siempre cumplo mí palabra.

Con delicadeza me aleja de su cuerpo y me observa con ternura. Se agacha y alza la botella de agua que dejó caer hace un momento y me la ofrece. Limpio mis lágrimas con mis manos y niego en dirección a Alanís.

De manera involuntaria mis ojos se dirigen a la calle por donde se perdió el auto en el que va Olivia y vuelvo a sentir otra punzada en el pecho.

—No permitas que ella te vuelva a romper el corazón, Adam. Quizás lo mejor es seguir adelante y que la olvides.

—No será tan fácil.

—¿Por qué lo dices? —Me giro para ver a mí hermana.

—Porque la amo.

Enseguida Alanís escupe toda el agua que estaba por tragar. Sus ojos se abren con evidente sorpresa y me mira como si hubiera dicho la mayor locura del mundo.

—¡Por Dios, Adam! Debes decírselo en este momento, quizás ella cambie de opinión...

—No. Le dí mí palabra y pienso cumplirla—Alas trata de decir algo más pero la interrumpo—. Es mí última palabra. Lo que sucedió entre Olivia Harper y yo, ha acabado.

Mis últimas palabras me queman la garganta, pero se lo dije. Aquella noche en la cual decidí tatuarme con ella le dije que la única batalla que no podría pelear sería cuando ella ya no me quisiera más en su vida, y el momento ha llegado. No hay nada más que me ate a ella aparte de mí corazón roto que se empeña en amarla.

Todo se terminó.

Ya que insistían tanto, pues aquí está el prólogo de Tócame. Espero y lo disfruten.

No me pregunten que cuando voy actualizar porque ni yo lo sé 🤷🤣.

Sin más que decir me despido.

¡Nos leemos pronto!