La Ley Murphy

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La ley de Murphy, si, esas leyes tan ciertas que dan miedo. Debería haber una así, “cuando creas que tu viaje pueda salir bien, no te emociones saldrá mal, tal vez termines muerta; ahora que lo pienso podría haber sido una divina ¿no creen?

No me pregunten como las descubrí pero la verdad es que el Murphy ese era un genio. Increíblemente, si algo puede salir mal, saldrá peor. Y es por ello que les digo ¡que se joda Murphy!, que se joda por tener tanta razón, que se joda por inventar esas reglas y principalmente que se joda por semejante vuelo en avión

Sentí como una luz poco a poco se hacía más fuerte, entrecerre los ojos mientras dejaba escapar un gemido de molestia. Se escuchaban unos gritos lejanos. Intente abrir los ojos de nuevo pero no conseguia tolerar a luz.

-¿Estoy muerta?-Pregunté, aun con los ojos cerrados, a nadie en específico o puede que todos. Mi garganta estaba extrañamente seca.

-No querida, yo creo que estas bien viva.

-¿Dios, estoy en el celo?

-¿Qué? si claro ya quisier.- Se escucho un golpe seco y unos lamentos. La voz rectifico, más grave que antes.- Si… estas hablando con Dios.

-Entonces, creo que debería confesar mis pecados, ¿no?

-Si, creo que deberías, cuéntame ¿qué te preocupa?- Dijo pensativamente la voz.

-Bueno, antes que nada Diosito, debo decirte que hubo una vez con Mathew y entonces, comprenderás, había una cam…

-¡No!-Sentiste una presión sobre tu boca y una voz conocida, momento ¿podías sentir?- Esto es un delirio, demasiada información podría soltar Brianna, Eliza deja de jugar a la niña muerta y abre los ojos.- Demandó la voz.

Obedeciste, más que nada por el tono mandón, poco a poco fuiste abriendo los ojos, aún con la incomoda luz dándote de lleno en la cara. Primero uno, luego el otro. Se escucho un grito.

-¿¡Que demonios esta mal con ustedes dos, es que quieren darme un infarto!?- Grite exaltada dando un brinco hacia atrás, hasta sentir la ventana a mis espaldas. Frente a ti, muy cerca de ti, habían estado Jennifer y Brianna, quienes ahora intentaban en vano aguantar la risa. Por otro lado habían unos cuantos pasajeros y aeromozas que te miraban extrañados, algunos, literalmente, se habían apartado.

-¿Qué me ven?…. Ni que tuviera monos en la cara.- Respondí enfurruñada mientras cruzaba mis brazos y me acomodaba en el asiento. Les dirigi otra mirada y ellas volvieron a soltar la risotada. Idiotas.

-Es… que… no… puedo… ¡Fue… demasiado cómico!- Decían las dos entre risas, estaban totalmente rojas y ya se agarraban la panza.

-¿Qué son esos gritos de allí atrás?- pregunto alguien mientras se oían unos pasos acercarse hacia ustedes.

-¿Tu?.

-¡No! No, no, no, no, no ¡No!.- Dijo el chico recién llegado mientras negaba con la mano en la frente. Traia la camisa medio desarreglada y tenía pintura labial en un cachete. Ay Dios.

-Díganme que esto no es verdad.-Susurraste tapándote los ojos con ambas manos, al ver que nadie respondió.-¿¡De todos los santos lugares del universo, tuviste que elegir este!?

-¡Como si a mi me gustara estar atrapado contigo a 9000 metros de altura! se que soy increíblemente deseable pero mira que perseguirme en mis vacaciones…- Presumió el con sorna.

-Mira idiota presumido, aqui, el unico que esta persiguiendo a alguien, eres tu.- Terminaste enterrando el dedo en su abdomen.

-Justin ¿con quien hablas?- Se escucharon otras dos voces acercándose, nuevamente los ya conocidos pasos también.- ¿Qué demonios hacen estas aquí?.- Dijo uno de ellos con los ojos totalmente abiertos mientras las señalaba, el otro dio un paso atrás intentando huir

-"Estas" tienen nombre arrogante cobarde- Respondio Brianna mientras se levantaba de su asiento

--No te quejes Bri-Bri, sabes que me amas además Ryan no huye.

-Callate Somers o terminaras peor que él.- Respondió Brianna apretando los puño mientras se enfrascaban en su propia discusion, al parecer, sin recordar que estaban en un avion y que los pasajeros seguian mirandolos.

-Más ya quisieras. Hasta tus gorilas son más sexys que tu.

-Pobre Eliza ya no sabe distinguir a la realeza. Soy lo mejor a lo que puedas auspiciar.- Dijo Justin mientras tomaba mi cara con sus manos. Quedaron a centímetros el uno del otro, mirándose fijamente.

-Talvez si tengas algo de razon. Si eres sexy.- Respondí pasando la lengua sutilmente por mis labios. Él se mordió el labio. Sus labios llegaron a rozarse.- La realeza, pero de los idiotas.- Susurraste antes de empujarlo y soltar una sonora carcajada.

-Bieber, será mejor que calmes un poco tus ánimos. Sé que soy sexy, pero no sabia de tu poca… resistencia.- Senti como alguien me impulsaba de nuevo al asiento y como impactaba sus labios sobre los mios furiosamente.

-Ambos podemos jugar este juego Eliza, terminaras rogandome que te lleve a mi cama.- Susurro entre un rastro de besos por mi cuello. Le dedique una mirada envenenada mientras veia como se levantaba. Oh no Bieber, esto no se queda así.

El piloto anunció que estaban a punto de aterrizar y ahí fue cuando llego Christian, quien al parecer se había quedado dormido, para llevarse casi a rastras a Ryan y Chaz.

Por eso y muchas cosas más ¡que se joda Murphy! Porque “A quien menos quieras encontrarte, a ese te encontrarás”

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¿Que tal?

¿Vaya que tienen mala suerte noo? porque ¿¡QUIEN NO QUISIERA ENCONTRARSE A JUSTIN-DEMASIADO-SEXY-PARA-TI-BIEBER EN UN AVION!? .

Vale hahaha. Pues parece que Eliza es la unica que no. Espero que les haya gustado :))

Besos Fáciles (A Justin Bieber Fanfic)Where stories live. Discover now