Amor Prohibido /Kevlex Y Tú/

D O C E

Narra Kevlex

No sabía que hacer, ni que decir, solo me puse a llorar aterrado al verla ahí tirada en el suelo, rápidamente la levanté y la lleve a su habitación, Carla llego después con un te y un plato de sopa para Tn, pero que yo no sabía que ella sentía todo eso por mí, me sentía tan culpable al verla así, inconsciente, no reaccionaba, no despertaba, estaba pensando en que sería mejor llevarla a un hospital cuando despertó.

—Los dejo solos— dijo Carla levantándose de la cama y yendo hacia la salida de la habitación.

—Si, está bien— dije entre sollozos.

—¿Qué pasa?— pregunto muy desorientada —¿por qué lloras?

—Perdóname, por favor, perdóname— dije tomando muy fuerte su mano —no sabía que sentías todo eso por mí, por favor perdóname.

—Todo está bien ¿Okay?— dijo mirándome fijamente.

(...)

Ya es martes y acabo de llegar al instituto, pero qué raro ¿por qué Tn no ha llegado? ella siempre llega temprano no entiendo por qué hoy no, mientas me sumía en mis pensamientos ví pasar a sus amigos por enfrente de mi, le hable a su amiga... ¿cómo se llamaba? Ah ya... a su amiga Jazz.

—Oye ¿Por qué Tn no ha llegado?— pregunté rascándome la cabeza por la confusión.

—Pues por que ya no vendrá, se dió de baja ayer en la tarde.

—¡¿Qué?!— ¿Pero como que ya no vendrá? —¡¿Por qué?!

—Hey, cállate ¿quieres? No estoy a diez metros de ti cómo para que me grites.

—¡Responde!

—Ayer dijo que ya no vendrá y que se irá a vivir con su madre de nuevo cuando lo de la niñera termine.

—Pero ¿Por qué?— no lo comprendía, ¿por que Tn se iría?, lo peor es que me dolerá ya no tenerla cerca, ya no tenerla en frente de mi apartamento.

—No lo sé... ¡tal vez por que tú, maldito engreído de pacotilla te acostaste con ella solo por una puñetera apuesta!.

—Ya lo sé y reconozco mi error.

—Pues haces bien— dijo tomándome por los hombros —ahora, si no quieres que se vaya pues ve por ella, reconquistala y amala como ella te ama o te amo a ti.

—Gracias, tienes razón.

—Claro.

Salí corriendo en ese momento y me dirijí a mi auto, tenía que llegar lo antes posible a su apartamento no podía dejar que se fuera no podía hacerlo, aunque aún faltaban 4 meses para que lo hiciera, pero en esos cuatro meses tenía que convencerla de que no se fuera.

—¡Tn abreme por favor!— grite después de tocar como mil veces su puerta sin respuesta alguna.

—¿Qué sucede?— salió con una toalla envuelta en todo su cuerpo y ¡Dios mío! tuve que contenerme para no hacerle nada en ese instante.

—¿Como está eso de que te quieres ir a vivir con tu madre?.

—¿Quién te lo dijo?— me quedé me silencio y después ella dijo —Pues si, si me iré a vivir col mi mamá.

—¿Pero porque?.

—Por que no soporto estar cerca de ti sin que recuerde que solo me utilizaste y que no sientes nada por mi más que asco.

—¡Claro que no! ¡¿No puedes entender que yo te amo?!— wow eso no lo veía venir, y es que no se lo quería decir, bueno al menos no aún.

—No te creo, si no tienes nada que decir, adiós— intento cerrar la puerta pero la detuve, la tomé entre mis brazos y la abrace (para los que pensaban que la besaría, pues no, no era buen momento) lo más fuerte que pude y le pedí perdón una vez más, ya tendría más tiempo de convencerla para que así no se fuera y me dejara para siempre.

—Ok, está bien te perdono, pero de todos modos me iré.

—Es tú desición.

—Este... si, ahora déjame pongo la ropa, no me gusta que me veas así.

—Ok, nos vemos luego pequeña.

—¿Pequeña?

—Ya me voy.

—okay...— dijo y se encerró en su habitación —¡Por favor deja mi llave en la mesa!— oh cierto aún tenía su llave.

Salí y entré en mi apartamento, cerré la puerta detrás de mí y me recargue sobre la puerta, ya vería como le hacía para que no se fuera.

(...)

Lo que dije hace unos meses no fue cierto, hace unas semanas que papá y mamá llegaron, le dieron su dinero a Tn y ella no dudo ni un segundo en irse, ahora estoy aquí, sentado afuera de mi apartamento viendo cómo Tn entra en el ascensor y se va por completo de mi vida, la extrañaré y no sé qué haré sin ella, ¿Con quién desayunare todas las mañanas como lo hicimos los últimos cuatro meses? ¡¿Qué haría sin ella joder?!.

—¿Qué pasa?— escuché que alguien decía pero no tenía ánimos de ver a nadie —¿No la acompañaras como ella quería?— era Jazz la que me hablaba.

—¿Que? ¿Ella quería que hiciera eso?— pregunte levantando la mirada.

—Si, me lo dijo hace un rato.

Salí corriendo de ese lugar, el ascensor demoraba mucho así que tuve que bajar por las escaleras, era tan cansado pero valía la pena, baje de dos en dos hasta que llegue a recepción y ella ya había tomado el taxi rumbo al aeropuerto, ¡Pero que tenía que llegar ya!.

Salí lo más rápido que pude, entré en mi coche y arranque, tenía que llegar, necesitaba llegar, las calles se me hacían eternas, no veía la hora de que me acercara aunque sea un poco al aeropuerto.

—No te vallas por favor Tn— me decía a mi mismo con la esperanza de que ella escuchara, pero eso es imposible pero que la alcanzará y que se quedará conmigo si era posible, al dar vuelta a la esquina la ví ahí bajando sus maletas de aquel taxi, volteó a ver a ambos lados y bajo la mirada decepcionada —No entres ahí— y entro, ahora tenía menos posibilidades de alcanzarla y de tenerla conmigo —¡No!— grite golpeando el volante y recargando mi cabeza en el —no te vayas— me estacióne cómo pude y salí literalmente corriendo.

“Pasajeros del vuelo tres seis nueve con destino a Los Ángeles favor de abordar por la sala tres”— decía una señorita a través del altavoz.

Solo esperaba que ella no subiera en ese, que lejos se iría, que lejos estaría, camine hacia la sala tres y ahí estaba ella esperando a entrar.

—¡Tn, no te vallas!— grite pero ya era demasiado tarde, ya había abordado el avión.

—¡Te amo!— grito antes de entrar completamente.

—¡No! ¡No te vayas!— me puse a llorar como un niño, pero ¿Qué querían que hiciera? La perdí y la perdí completamente.

•••••••••••••••••••••••••••••••••••••••

¡Ay qué bonito!

¿Qué opinan sobre esto?

Lo amo por completo al Kevlex