Huellas imborrables [Lysandro CDMU] #CDMAwards2019LI

Capítulo 5

- ¡¿Hyun?! – Me sorprendió muchísimo verle fuera de noche y sobre todo en un ambiente de fiesta, le tenía cómo alguien tímido y centrado, pero siempre han dicho que las apariencias engañan.

- Qué guapa estás Val, ¿Te apetece tomar algo conmigo? – Su aliento olía a alcohol, llevaría bastante rato bebiendo.

-Lo siento, he venido con unos amigos y no creo que me quede mucho rato.

- Solo un ratito – Me dijo esto mientras apretaba mas mi mano e intentaba acercarme a él, estaba muy borracho y yo no sabía como tratarle para no herirlo, al fin y al cabo, era mi amigo.

-Hyun no puedo de verdad...

- A dicho que no – Noté la voz de Lysandro fuerte y profunda justo detrás de mí. Hyun le miró de arriba abajo con incredulidad.

-Es mi amiga no pasa nada.

- A dicho que no – Volvió a repetir mientras me soltaba del agarre de Hyun – Si es tu amiga respétala. – Puso su mano levemente sobre mi baja espalda, tan leve como el roce de una pluma y volvimos a la barra.

- Gracias Lysandro.

- ¿Cuántas veces tendré que hacer esto? Aún recuerdo al surfero aquel que no te dejaba tranquila – Hizo una pausa para mirar hacía otro lado, exasperado- Aprende a defenderte.

No tuve tiempo de decirle nada mas cuando se encaminó hacia los demás les dijo algo y se fue. Castiel me miro con cara de duda y me acerqué para contarle lo que acababa de suceder.

-Bueno, te ha defendido, es un avance ¿no crees? – Puso su mano en mi hombro en forma de consuelo.

-No lo sé, no le reconozco. – Agache la cabeza volviendo a notar como se me formaba un nudo en la garganta. Castiel lo noto y me acercó a él para rodearme con sus brazos.

-Ya está no pasa nada, solo es cuestión de conocerle de nuevo. Todo saldrá bien – Siguió acariciándome la espalda hasta que notó que había muchas miradas sobre nosotros.

Castiel se había hecho muy conocido y todos los del pub nos empezaban a mirar y a cuchichear, al darme cuenta de esto me aparté de él, no quería causarle problemas o chismorreos a su alrededor.

-Te acompaño al campus, la noche ha terminado para ti.

Nos despedimos de Rosa y Leigh que también se marchaban y con su brazo todavía en mi hombro caminamos por las desiertas calles de madrugada. Después de unos minutos de absoluto silencio llegamos a las puertas de la residencia femenina.

-De nuevo, sana y salva. Voy a tener que empezar a cobrarte el servicio de acompañamiento – Nos reímos de su comentario a la vez.

-Gracias otra vez, espero que no me lo cobres muy caro, no me pagan mucho en la cafetería – Volví mis bolsillos para hacer ver que no tenía un céntimo encima mientras él se reía de mi pobreza.

-No, te prometo que no será caro... - Puso sus brazos en mi cintura y se acercó un poco a mí, al hacerlo pude ver que sus mejillas comenzaban a tener un tono rojizo a juego con su pelo. ¿Iba a besarme? Y lo más importante ¿Yo quería que lo hiciera? No sé qué me pasó, pero tenía el corazón tan roto que me aferré al calor que me ofrecía Castiel y antes de que el siguiera acercándose me lancé a sus brazos y le besé yo.

Al principio noté su cuerpo tenso, pero a medida que nuestro beso iba tomando ritmo se relajó y me acarició la cintura y la espalda con sus expertas manos. Mientras yo aproveché para poder acariciar su pelo, cosa que había querido hacer siempre, pero con el carácter que se gastaba nunca me había atrevido a hacer. Nos separamos para tomar aire y en su rostro pude ver una expresión pensativa, yo quería volver a besarle para no pensar en mi dolor, pero el me apartó suavemente.

-Esto... Esto no esta bien Val, no es que no quisiera hacerlo, pero no está bien – Se pasó la mano por el pelo y me dio la espalda – Olvídalo ¿Vale?

Comenzó a marcharse antes de que pudiera contestar ¿Por qué todo el mundo me dejaba con la palabra en la boca? Seguí mi camino por los pasillos de la residencia y no pude evitar en que lo que decía Castiel era verdad, no había estado bien. Le había usado para apaciguar mis sentimientos sin pensar en los de él. Tal vez él se arrepentía de besarme porque Lysandro es uno de sus mejores amigos, pero no iba a preguntárselo me dijo que lo olvidara y eso haré.

A la mañana siguiente tenía un dolor de cabeza terrible, no sabía cuanto había dormido, pero Yeleen no estaba ahí así que debía ser bastante tarde. Cogí mi móvil y pude ver la pantalla llena de mensajes, varios de Rosa, otro de Hyun y el último de Castiel. Instintivamente abrí el de el pelirrojo el primero.

"Siento lo de anoche, había bebido bastante, espero que hayas descansado bien. Nos vemos por ahí"

Noté una punzada de culpa en la boca del estómago y le escribí una respuesta sencilla:

"No te preocupes, todo está bien. Nos vemos"

Los siguientes mensajes eran de Rosa preguntándome cómo estaba y si había pasado algo malo con Lysandro, le envié un mensaje de audio explicándole todo (Menos lo de Castiel) para que se quedara tranquila. Y el último era de Hyun pidiéndome disculpas por su comportamiento de ayer y jurándome que no volvería a pasar. Le respondí lo mismo que a Castiel y me hice una bola en la cama.

Entonces empecé a recordar lo que dijo Castiel anoche: "Esto no esta bien Val, no es que no quisiera hacerlo..." Entonces ¿Quería hacerlo? ¿Le gustaba? En el instituto siempre estábamos peleando y era Lysandro el que mediaba entre nosotros para que hubiera algo de paz, pero él nunca dejaba de picarme. A lo mejor si debería hablar con él, no podía con la curiosidad, siempre me pasaba lo mismo. Era una curiosa de nacimiento. Eran las casi las tres de la tarde así que llamé a Chani a ver si quería salir a comer conmigo.

-Claro, podemos vernos en el restaurante italiano del centro.

-Me parece bien nos vemos allí Chani – Después de colgar me metí rápidamente en la ducha, cuando el agua caliente empezó a rozar mi rostro y mis labios me acordé del beso que me di con Castiel, fue tan apasionado y cálido, no es un beso que das por dar. Cada vez estaba mas confundida por los sentimientos que podría estar reprimiendo hacía mi, pero ¿Y yo? ¿Estaba reprimiendo alguno hacia él?

Me puse un vestido corto de lana medias y botas, hacía buen día así que no necesitaba del abrigo. Entré al restaurante y mi amiga ya estaba allí sentada. Al verme levantó la mano para que me sentara con ella.

-Siento llegar tarde.

-Oh no, has llegado bien. Yo he llegado pronto, quería hojear la carta.

- ¿Qué vas a pedir?

-Lasaña sin duda – Se lamio los labios con gesto de hambre.

- ¡Pues que sean dos!

Mientras esperábamos la comida notaba a Chani incómoda como queriéndome preguntar algo y no saber como hacerlo. Pero yo sabía lo que era así que le conté directamente todo lo que paso con Lysandro la noche anterior.

-Parece que fue una noche muy movidita... - Bajó la mirada con gesto de vergüenza.

- ¿Pasa algo Chani? - Le toque la mano para llamar su atención, ella me miró con gesto curioso.

- ¿No se te olvida ninguna parte de la historia? - Hizo unos movimientos con las cejas cómo invitándome a confesar, yo negué con la cabeza – Te vi anoche Val, con el chico de Crowstown.

Tragué saliva y aparte mi mano de la suya para tapar mi cara con ella. "Mierda"