Continuación de Siempre lo recordaré
Habían pasado ya varias semanas desde el campamento, Santiago dejó de llegar a la clase casi dos semanas, apareció esta semana pero hoy no llego a clases, aún que no crean si me dolió, no saber nada de él.
Lo había visto en el cine ya hace varios días y me confundió con Catalina, nunca entendí porque pero eso hizo que diera un paso y me cortara el cabello , así que lo traigo un poco más corto
Era viernes en la noche, todas las chicas que vivían conmigo salían de fiesta o con sus novios, yo por mi parte prefería quedarme en casa viendo películas.
Estaba por la tercera película eran casi la una de la mañana, en ese momento tocaron la puerta, pero no me moví nadie que conozca pueda venir a la una, y si era alguna de las chicas traen llaves, así que no le di importancia.
Me abrace las piernas y seguí viendo la película pero los toques en la puerta se volvieron más fuertes y impotentes que se me hizo difícil ignorarlos, tome el control y le puse pausa a la película y me paré de mala gana, abrí la puerta y en ese momento sentí como mi corazón se salía del pecho al ver a Santiago recargado en la puerta pero no como me gustaría verlo, tenía heridas en el labio y una en la ceja, la mejilla roja y la barbilla raspada, mi mente estaba procesando todo, estaba asombrada por la sangre.
—-Santiago— dije— ¿Qué te paso?— le dije acercándome a él
Le se enderezó y me tomo de la mano evitando que lo tocara, su labio estaba abierto pero por suerte no hinchado
—No tengo porque darte explicaciones— dijo en su tono egocentrico— Pero no tenía a donde ir— agachó la mirada
—-Entonces,¿Que haces aquí si no
Vas a explicarme?— le dije enojada
Nos quedamos en silencio varios segundos y el alzo su mirada
—-Santiago,¿Que te paso?,¿Quien te golpeó?
—-Me golpearon los amigos de Catalina,¿Contenta?— dijo un poco molesto—...Pero no fue nada grave
—Bueno, si no es nada grave puedes irte
Intento cerrar la puerta pero el con su mano lo detiene, y se para enfrente de mi
—-Te cortaste el cabello,¿Por que?
—-Acaso importa— le dije
—-¿Ya te moléstate?
—-No
—-Claro que si, te pones a la defensiva siempre que te enojas
—Piensa lo que quieras
Santiago cerró los ojos y se tocó el labio
—-Entra— le dije—Déjame curarte
—-¿Por que harías eso?
—-Intentó ser buena contigo y tú no me dejas
—-Bueno lo aceptare porque me duele la cabeza
Entro y cerré la puerta, me miró y soltó un suspiro
—Segundo Pisa, habitación 3– le dije señalando la escalera— iré por el botiquín allá te veo
Asiento un poco dudoso y subió, y yo fui a la cocina por el botiquín, apagué la televisión y subí a mi habitación, me quede parada enfrente a la puerta pensando un poco, ¿Como que era sus única opción? No tiene sentido.
Entre y lo vi viendo mis fotos que tenia colgadas en mi habitación, lo jalo obligándolo a sentarse en la cama, abrí el botiquín y busqué gasas y agua oxigenada, fui al baño para lavarme las manos y regrese, mojo la gasa con el agua oxigenada, la pase por se ceja con cuidado, y después limpie su labio, me acerqué para ver qué tan profunda era y veo que tiene sangre seca, presiono la gasa contra su labio, Santiago se queja y hecha para atrás
