*Continuación de el hijo de mi jefe*
Llegue a mi departamento y no podía sacar de mi mente el beso que nos habíamos dado, necesitaba contarse a alguien así que le hablé a Diana
—-Hola- dijo ella
—-Diani acabó de hacer algo que pienso que está mal— le dije
——¿Qué pasó?— dijo ella
—-Estaba en la oficina y estaba Santiago ahí— dije y sonreír al recordar el beso— nos besamos y fue un beso muy apasionado
—-¿Y que tiene de malo?— dijo ella
—-Qué en cualquier momento se pudo volver algo más y eso— dije nerviosa— y estábamos en la oficina de mi jefe
—-Ale, nunca te he conocido un novio, me contaste que rechazaste a Bernardo y todo, yo pienso que tienes que vivir un poco, deja de pensar en lo demás— dijo ella— ya tienes 23 y tienes pensar más en ti
—-Estoy concentrada en mi— dije— Y no te niego que si me gustaría tener a alguien conmigo pero no
—-¿O acaso le tienes miedo a Santiago? a lo que te pueda provocar— dijo
—-No, no lo sé— dije — tengo miedo de enamorarme de alguien como él
—-El es un gran chico, solo conócelo— me dijo
—-Bueno, lo intentaré, de hecho saldremos a cenar el sábado
—-Bien, ahí está disfruta y déjate llevar por el momento—dijo
—-Bueno, gracias por el consejo
—Te veo después linda— me dijo
—-Hasta mañana— le dije
—-Ale mañana es sábado— dijo
—-¿En serio?— dije
—Si, nos vemos el lunes y disfruta tu cena mañana— dijo y me colgó
Era viernes en la noche y nada me estaba más que ver una buena película antes de irme a dormir, Justo cuando iba a poner la película mi celular sonó, era una llamada de un número desconocido, normalmente no contestaría pero algo en mi me dijo que lo hiciera así que lo hice
—-¿Bueno?— dije
—-¿Como te atreves a irte asi?— dijo la voz de Santiago del otro lado del teléfono
—¿Quien habla?— dije jugando
—-¿Es en serio Boluda?— dijo un poco molesto pero me encantaba— Santiago
—-Ya se que eres tú, solo quise molestar
—-¿Entonces?— dijo el
—-¿Que?— dije mientras me paraba para servirme agua
—-Te fuiste— dijo el
—-Lo tenía que hacer, ya era tarde
——¿Ese es tu gran pretexto?
—-No es pretexto
—-Si lo es Alejandra
——¿A que hora nos veremos mañana?— dije cambiando de Tema
—-me estás cambiando de tema, pero iré por ti a tu casa— dijo el
—-No, ¿en donde y a qué hora te veo?
—-A las 8:00 en tu casa— dijo el
—-Ni crees que te dire en donde vivo
—-No necesito que me lo digas