Especial

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Sus cristalinos ojos reflejaban felicidad, el estar así con la persona que amaba, recargado en el pecho de Haku sintiendo como el tiempo parecía detenerse para que ellos pudieran estar juntos por más tiempo. Era tarde, y ambos habían tenido un día muy difícil, se encaminaron hacia la cama; cuando eran niños y terminaban cansados de tanto jugar terminaban tomando una siesta por la  tarde, tomados de la mano o muy cerca el uno del otro, en alguna ocasión abrazados, siempre cuidándose, no podría haber escena más hermosa que aquella . Ahora era diferente, había mucho más que simple cariño, sus miradas no serían las mismas de antes, esas miradas  ocultaban sus sentimientos, ahora podían demostrarse lo que de verdad sentían, con sólo una mirada. Se habían recostado, mirándose frente a frente, una caricia surcaba el rostro del menor, no estaban lejos uno del otro, pero tampoco tan cerca, aunque de pronto parecía ser incluso una distancia grande, Yuuki se acercó un poco más a Haku, y él lo envolvió en sus brazos, le besó la frente y lo atrajo hacia sí. El cuerpo del menor parecía estremecerse con cada contacto, el mayor disfrutaba de aquello y quiso ir más lejos, besó los labios de Yuuki y acarició su espalda hasta llegar al borde de su camisa levantándola para acariciar su suave piel de aquella manera por primera vez, un temblor recorrió por completo a Yuuki, y un brillo peligroso asomó a los ojos de Haku, no podía evitarlo, en poco tiempo ya estaba sobre el cuerpo de Yuuki empujándolo hacia abajo, volvió a besarlo y subió más la camisa hasta encontrar sus pezones, con una mano tomó uno de ellos y el otro comenzó a succionarlo hasta que un sonoro “¡ah! ¡B-basta!” salía de los labios del castaño, su cuerpo parecía temblar, Haku se separó un poco para observarlo mejor, si que temblaba, y más que de placer parecía tener miedo, ¿qué pasaba?, se preguntó, lo observó un poco más sin hacer ningún movimiento, el menor colocó uno de sus brazos por sobre su rostro cubriendo así sus ojos, con cuidado Haku retiró aquel brazo para mirarle más de cerca,  los ojos de Yuuki parecían querer llorar y cuando vieron a Haku lo hicieron.

Aún el desconcierto se notaba en sus ojos, ninguno dijo nada, Haku se levantó y salió hacia el balcón de la habitación con la cajetilla de cigarros en sus manos no sin antes soltar un “...joder” con un tono parecido a molestia.

Yuuki lo miró irse, lentamente él también se levantó y le dió alcance antes de que el otro pudiera encender el cigarrillo, se lo arrebató de los labios y espero.

---dime que no es cierto

---...no puedo

---...ni siquiera quiero tocarte ahora...

Fueron pocas  palabras, pero quedaron grabadas en la mente del menor viendo como el azabache lo decía seriamente y volteaba a verle de manera que a su parecer, era helada, aunque en realidad no había ninguna expresión en el rostro del mayor que denotara su estado de animo, su rostro parecía inexpresivo. Sentía su corazón oprimirse y luego encogerse de forma súbita, miró el suelo con una expresión desconsolada...

---es que...--- “no me deseas” quería preguntar, no tuvo oportunidad de hacerlo, cuando alzó la vista nuevamente ya era presa del abrazo del mayor sobre él, en un momento quiso apartarlo pero su cuerpo no le respondía, se quedó inmóvil en el mismo lugar.

---no me malentiendas...--- dijo acariciando suavemente al menor, aún sin atreverse a mirarle--- quiero tomarte y hacerte mío... solo que... No pensé que tú...

---esta... ¿Mal?

---no es eso, solo que... Jo, en todos estos años te ví salir con algunas personas y yo pensé que...

--- has pensado mal.

---puedo darme cuenta pero, ¿porqué?

--- porque... Ninguno era el indicado. Ellos... Alguna vez insistieron pero yo... Me negué, no estaba... Cómodo... Con nadie...

Que Fue Lo Que Pasó!!??Donde viven las historias. Descúbrelo ahora