Ambos se encontraban allí, en ese pequeño acantilado que dejaba ver las luces nocturnas de la ciudad en la que estaban, nunca habían estado tan lejos de casa y jamás pensaron que París fuera un lugar tan acogedor. La Torre Eiffel brillaba en su esplendor mientras que los edificios de la París del siglo XX le daban su toque especial.
-. No es correcto.- susurro YoonGi en coreano a aquel parisino de ojos verdes que lo miraba con frustración.
-. Min YoonGi no hables en coreano, sabes que no te entiendo.- dijo mordiendo su labio al ver al atractivo hombre a su lado.
-. Me haces hacer cosas incorrectas para el hombre que realmente amo, Adrien.- dijo ahora YoonGi en el idioma del menor quien observaba su ciudad natal como el tesoro más grande del mundo.
-. No exageres YoonGi.- susurro el parisino con las mejillas sonrojadas mientras jugaba con cadena que adornaba su cuello.- ambos ya tienen la edad para hacerlo, si te ama aceptará la desición que tomaste.(Foto)
TaeHyung se encontraba feliz de encontrase en Berlín a pesar de extrañar demasiado a YoonGi sentía que debía terminar aquella misión, estaba dejando atrás una etapa de su vida que amo demasiado... La actuación. Nadie más que él sabía que ya estaba en edad para hacer una familia y poder centrarse con YoonGi si era posible casarse al fin, crear una familia que pudieran sostener con el esfuerzo de años de trabajo y el amor que ambos se profesan.
Aquel viaje había sido el más difícil para su relación y apenas terminarán de grabar las escenas en Berlín podría volver a París, donde se encontraba su verdadera pasión esperándolo. Miraba aquel anillo que había comprado para darle a YoonGi antes de que le avisará la producción del drama en el que se encontraba trabajando que tendría que viajar, estaba planeando llevarlo a la Torre Eiffel o al puente de los candados para pedirle que fuera su esposo, que quería estar con él por la eternidad.
La semana había pasado más rápido de lo normal y TaeHyung ya she encontraba en el aeropuerto de París camino a su hogar. Apenas entró un fuerte llanto llegó a sus oídos y se asustó, que habían hechos estos dos mientras TaeHyung grababa los últimos detalles de su drama en Berlín; no se había ido mas que dos semanas.
-. Tae...- susurro el parisino que habían conocido ambos en aquel viaje.- ¿Qué haces aquí? Volvías en una semanas más.-
-. Oh sí Adrien, yo también estoy feliz de verte... Yo también te extrañe...- dijo TaeHyung sarcástico en el idioma del muchacho de tan solo 17 años.- ¿Qué es ese llanto?.- Adrien nervioso se encogió de hombros cuando YoonGi con una pequeña criatura en sus brazos llegaba hasta la entrada.-¡Min YoonGi no me digas que secuestraste a ese bebé!.- ambos tanto como Adrien como YoonGi negaron con la cabeza asustados por la reacción del hombre al frente de ellos.
-. Pues es nuestro hijo Tae, Adrien lo encontró en un callejón y no pude llevarlo a la policía de verdad que no puede.- dijo YoonGi mordiendo su labio inferior dejando de lado al parisino al hablar en coreano ya que aún no se acostumbraba al francés.- Tae se que es difícil pero no puedo entregarlo a un estado que se qué pasará por necesidades, debemos llevarlo a Corea por favor.-(Foto)
Aquel pequeño niño de cabello oscuro y ojos azules caminaba hacia los mayores con aquel pequeño cojín en sus manos, se dificultaba su andar gracias a su corta edad pero debía hacerlo por sus padres. Al llegar ambos hombres en el altar sonriendo tomaron los anillos del cojín rojo para susurrar un acepto y colocarlos en sus respectivos dedos.
La vida para ambos no fue fácil. Recién a los 30 años de TaeHyung y 32 de YoonGi habían podido cumplir su sueño, tenían una familia juntos y aquel pequeño ser que caminaba con dificultad y corría a los brazos de su tío SeokJin era una luz en el camino de aquella pareja.
Las peleas jamás se extinguen en aquella explosiva pareja pero si se amaban, tanto que lograban superar más de una dificultad.
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-. MinHo no corras para allá.- grito TaeHyung no muy alto a su ya no tan pequeño hijo.- ven acá ahora mismo.- el pequeño de 13 años se acercó con la cabeza gacha a su padre quien lo abrazo con fuerza.
-. Papi ¿Por qué no me puedo parezco a ti o papá YoonGi? Mis amigos me molestan.- susurro el pequeño apunto de llorar.
-. MinHo sabes que te amo, eres mi hijo y apesar de lo que diga la gente, eres hermoso así como eres.- el pequeño asintió con una sonrisa pero aún tenía lágrimas en los ojos.- la vida no es fácil pero no dejes que te lastimen por como eres por fuera porque apesar de no tener la apariencia de un coreano eres uno, uno que es parisino también.- YoonGi mordía su labio, sabía que el momento llegaría pero no dejaría que nada ni nadie alejara la felicidad de su hijo. Se agachó a la altura de su pequeño hijo acariciando su cabeza.
-. Tú puedes no tener nuestro ADN pero tú eres nuestro hijo ¿Lo sabes no?.- el pequeño asintió ahora con la sonrisa más sincera.- tú padre y yo pasábamos por cosas peores, no dejaremos que un niño, adulto o anciano te haga pasar por lo mismo pero sobre todo tu no debes dejarlos, debes amarte a ti mismo para no dejar que nadie te haga daño como lo hicimos nosotros, que apesar de amarnos nos dañabamos.-
-. Papis yo sé que no soy su hijo pero me siento suyo porque me salvaron de muchas carencias aunque debo aceptar que me duelen las palabras de aquellos niños ya no dejaré que me afecten porque ustedes son mi mayor ejemplo, son fuertes e independientes y aunque se griten en ocasiones se que se aman. Gracias por darme una familia como la de ustedes.Al fin estaban completos, al fin sentían que no les faltaba nada porque aquella familia era más que eso, eran un batallón que seguían luchando contra las adversidades y encontraron un pequeño ser de luz que logrará contar su historia, una historia de amor y dolor que logró un cometido... Su felicidad.
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Notas De Recuerdo. (Terminada)
ФанфикDonde YoonGi piensa que TaeHyung lo olvido y busca maneras desesperadas para que lo recuerde.