Capítulo 4~

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4. Maldito subnormal de mierda.

Al final elegimos una película de terror. Trataba sobre la niña del exorcista. Dios, me encanta esa película.

Kian se sentó al lado de mi en la sala de proyección, para hacerme compañía, según él.

Lo más típico que ha existido en esta vida.

Derek se ofreció a ponerse a mi izquierda. Y esta vez, su escusa fue que a lo mejor se le acababan las palomitas y tenía que coger de las mías.

-Como cogas algunas de mis preciadas palomitas, no vivirás para contarlo -le amenacé cuando me lo dijo.

El se quedó callado, pero aún así, se sentó a mi lado.

Durante la película, tuve algunos sobresaltos, e instintivamente me agarré a algo de mi derecha. Era Kian. Pero rápidamente lo soltaba al ver que éste me quería abrazar. En el último sobresalto, ya súper tensa, lancé las palomitas para arriba y, una fracción de segundo después, llovió sobre nosotros.

Acabé cubierta de mantequilla, sal, y trozos de palomitas en el pelo.

-Maldita seas, Chloe Dawson -maldijo Derek al salir, totalmente cubierto de palomas.

Yo me reí mientras le quitaba una del pelo. Él hizo una mueca cuando la palomita se quedó en su pelo pegada. Yo se la arranqué junto a un pelo. Yo y mi fuerza bruta.

-Me ha encantado la peli -exclamó Karen dando unas palmadas. - Ha sido espeluznante.

-Síp -dije marcando la "p".

-Y a esta señorita de aquí le ha dado miedo -Kian me dio un codazo.

-Que va - repliqué, y me crucé de brazos.

-¿Ah, no? -preguntó con una sonrisa de lado- ¿Y cuando te has estado agarrando a mi, que?

Rodé los ojos y le di un empujón que le mandó al piso de culo. Pero él me agarró antes de caer y me arrastró con él. Chillé al darme con el suelo, más bien del susto que del dolor.

-¡Imbécil, casi me rompo la espalda! -le grité en el suelo.

Ahora que me daba cuenta, fui consciente de nuestra postura. Él estaba encima de mi, y yo debajo con las manos acurrucadas en mi pecho sin poder moverlas. Nos quedamos ahí unos segundos, mirándonos, hasta que él rompió la conexión y se levantó.

Yo le seguí vacilante.

¿Qué demonios había pasado?

*****

Dios, ya era por la mañana. Me desperté y abrí los ojos. Parpadeé varias veces para acostumbrarme a la luz.

Cuando ya me acostumbré, me levanté pesadamente y decidí darme una ducha refrescante. Me vestí con una remera fucsia que dejaba al descubierto mi estómago plano y mi hombro derecho, con unos jeans grises ajustados haciendo que mis piernas se vean kilométricas. Me dejé el cabello suelto, dejando que caiga por mi espalda y sobre mis hombros. Me llegaba hasta cuatro dedos por debajo de mis pechos, con las puntas onduladas. Me puse delineador de ojos, y bajé a la cocina.

-Hola mamá -saludé sonriéndola tiernamente y dándola un beso en la mejilla.

-Hola cariño, te he dejado el desayuno en la mesa.

-Gracias... -pregunté dudosa.

Mi madre sólo se molestaba en prepararme el desayuno en fechas importantes, y siempre hacía tortitas. ¿Qué se celebraba hoy? Me fui al salón y ahí vi las tortitas, dejando un aroma irresistible.

Dejé a un lado mis preguntas sobre las tortitas y empecé a devorarlas. Mmm... cuánto hacía que no las probaba...

Terminé con dolor de estómago.

-Mamá... -la llamé dubitativa.

-¿Si?

-¿Por qué has echo tortitas, si hoy no es mi cumpleaños? ¡Oh! -grité de repente- ¿Es mi cumpleaños y no o sabía?

-No, no, Chloe. Estoy celebrando que por fin tengas otro novio que no halla sido Rubén.

-¿Novio? -pregunté mirándola horrorizada.

-Si... ¿Te acuerdas de los chupetones de ayer? Pues celebro aquel novio tuyo... -Oh, no.

-¡¿Quéééééé?! -chillé - Mamá, no tengo novio!

-¿No? -frunció el ceño totalmente confundida- ¿Y lo de ayer?

-No era mi novio, por Dios -agité los brazos exasperada-. Solo son dos chupetones...

Que disffrutaste mucho...

¿Qué carajos pensé? ¡Yo no lo disfruté! ¡Dios, me moría del asco!

*****

Llegué al instituto aún sumergida en mis cosas. ¿Por qué narices había tomado lo del cuello mi madre tan seriamente? No lo entendía.

Puse mi clave en el casillero y lo abrí. Me tocaba Dibujo. Por suerte no había que llevar nada, y podía ir libre de peso. Lo cerré sin haber cogido nada, y me dirigí hacia la clase de Arte. Pero, al doblar una esquina, unas manos me agarraron de la remera y me estamparon contra las taquillas. Hice una mueca al darme. Y cuando iba a gritar, unas manos me taparon la boca.

Entonces vi quién era: Liam. El puto Liam de los cojones.

-Hola, hermosa. ¿Te quedaste agusto al darme en las bolas? -preguntó así, sin más.

Maldito subnormal de mierda. ¿Quién se creía que era para llamarme hermosa? Y aún peor.. ¿para estamparme contra los casilleros? Me iba a joder la espalda como siguiese así.

Le grité insultos, pero todo lo que se oían eran murmullos apenas audibles por culpa de la mano que me tapaba la boca. Ya harta de su mano y de él, le mordí. El la apartó rápidamente y al final pude hablar. Con hablar me refiero a gritarle y chillarle insultos. Liam me cayó estampando sus labios contra los mios.

¿Qué cojones...?

Yo no le correspondí el beso. Pero él seguía. Intentó meter su lengua, pero yo cerraba la boca con toda la fuerza que podía. Pero no se dio por vencido, no. Dirigió sus manos a mi trasero y apretó. Y yo, como soy tan tonta, abrí la boca de la impresión y Liam aprovechó para meter su asquerosa lengua. Pasaron así los instantes, yo intentando sin éxito romper el beso, y él recorriendo mi boca con su lengua. Le mordí el labio inferior con fuerza. Se alejó de mi, dirigiendo su mano a su labio para ver si sangraba. Al ver que no, me miró echando chispas.

Pero no esa clase de chispas.

-GILIPOLLAS -le grité con la cara roja de ira- ¿CÓMO TE ATREVES A BESARME A LA FUERZA, TARADO CON UNA PELIGROSA ESCASEDAD DE NEURONAS? ¡NO . ME . GUSTAS!

-YA LO HE VISTO, MOCOSA -replicó él acercándose amenazadoramente a mi- ERES UNA ZORRA ESTÚPIDA, ¿SABIAS? YA VERÁS, PUTA, ME VENGARÉ. Y TE DOLERÁ.

Dicho eso, se dio media vuelta y se marchó por donde había venido.

Me entró miedo de repente. ¿Cómo que se iba a vengar? ¿Yo qué le he echo? ¡Si él fue el que se acercó a mí! Y lo peor de todo... ¿cómo es que me dolerá? ¿Acaso va a pegarme? ¿insutarme?

Millones de preguntas se agalopaban en mi mente.

¿Qué tipo de dolor será? ¿Uno físico, o uno emocional? ¿Me quedaré traumada... de por vida?

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Nota de la autora:

¿Qué os ha parecido el cap? Espero que os halla gustado Cx

Una pregunta... ¿Qué creeis que le hará Liam a Chloe?

Comentad y votad, por favor... :)

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