Novios por equivocación. »KookV«

Capítulo 4.

Después de aquél idiota sueño intenté hacer como si nada hubiera pasado pero claro, Jungkook se había dado cuenta de mi incomodidad y mi tristeza en las siguientes clases por lo cuál me invitó a su casa.

Jungkook, yo, en una habitación. No lo creo.

Igual acepté, al fin y al cabo no había nadie esperándome en casa. Así es, todos estos años he ganado una beca antes de entrar al colegio la cuál me pagaba hasta las copias que debía sacar. Minho y Jisung me ayudaban con mi comida llevandome algo de comida cada día mientras que yo trabajaba los fines de semana en una tienda de cómics y aveces le hacía las tareas a los chicos de cursos bajos.

Ya habían acabado las clases e íbamos tomados de las manos a la casa de Jungkook, lo único que de verdad había pasado era su petición de que me sentara con él en las demás clases, que Hoseok pasara por la mitad de nosotros y que hablaramos por papelitos pero parece que el viejo rechoncho de Química me había aburrido tanto que me quedé dormido de repente.

- ¿Quieres comer algo?- Me encogi de hombros. - ¿Tomar algo?- De nuevo me encogi de hombros.- Kim Taehyung.

- ¿Qué quieres, Jeon? -Mi voz salió quebrada y entre un sollozo, toqué mis mejillas antes de salir corriendo hasta el baño al darme cuenta que estaba llorando. Me encerré en él apoyando mi cuerpo en la fría madera de la puerta tapando mi boca para no dejar salir aquellos sollozos tan rotos.

- Tae... Abre la puerta, por favor. -Diría que hubo un largo silencio pero mis sollozos los cuáles no podía callar era lo único que sonaba por mi parte. -Taehy... -Me di vuelta dándole un puño a la puerta antes de ponerme de rodillas frente a ella esta vez sin aguantar ningún sollozo.

Sentía que algo en mi pecho me quemaba mientras que había una voz en mi cabeza la cuál no dejaba de repetirme que aquél chico que se encontraba afuera jamás me vería con otros ojos, que él simplemente le gustaba alguien más y no podía hacer nada contra ello.

Después de unos minutos sentí que la puerta fue abierta para después sentir que los brazos contrarios me rodearon a la vez que me cargaba, yo sin dudarlo me colgué de su cuello mordiendo mis labios intentando calmarme aunque sea un poco.

- Abre la boca. - Susurró al sentarse en la cama conmigo sobre sus piernas, no sabía como pero en su mano se encontraba una botella de agua. Le hice caso y sin esperar más acercó la botella a mi boca para que tomara agua lo cuál acepté. Me sentía como un pequeño bebé en sus brazos, aunque había una diferencia. Yo era un pequeño bebé, pero jamás podría ser su bebé.

Intentó animarme después de lo pasado, pero fui sincero y le pedí que me dejara en mi casa pero se negó, no quería dejarme así. Ahora me encontraba acostado con mi espalda en su pecho mientras que él se encontraba con su espalda en la cabecera, estabamos viendo Mi Villano Favorito por petición mía aunque parecía que él estaba bastante entretenido en mi cabello y su celular aunque lo presté tanta atención hasta que puso su celular frente a mí, antes de que pudiera darme cuenta nos había tomado una foto, claro, yo saliendo bastante mal. Me di vuelta rápidamente intentando quitarle el celular entre risas hasta que lo logré saliendo a correr de la habitación.

-¡Vuelve aquí pequeño tómate! -Solté una carcajada mientras corría a no sé donde e intentaba desbloquear su celular, al ver que no sabía su patrón me quedé quieto haciendo un berrinche. De un momento a otro me encontraba acorralado en una pared con Jungkook siendo mi quién me había acorralado.- Mi celular.

-Me veo feo, elimina eso.

-Te ves hermoso, cállate y dame mi celular.

-Obligame. - Claro, yo me refería a que me obligará a darle el celular pero antes de que pudiera reaccionar tenía los cálidos y suaves labios de Jungkook sobre los míos. Yo no pude aguantar, mi mente gritaba que lo alejara y saliera corriendo pero mi cuerpo reaccionaba de diferente manera. Mis manos fueron hasta su cuello aceptando sin pensar más, necesitaba sus besos, necesitaba a Jungkook.

De un momento a otro me arrebató el celular de las manos para después romper el beso. Yo me quedé estático en la pared viendo totalmente embobado aquellos labios que me tenían loco desde la primera vez que los vi y Jungkook se dio cuenta de eso.

-Volvamos a ver la película.- Murmuró con un leve sonrojo en sus mejillas que me hizo sonreír, respondí con un asentimiento antes de volver a la habitación y volver a la posición en que estabamos antes. Aquellas pequeñas caricias en mi cabello de verdad me estaban dejando dormido hasta que al final caí dormido en los brazos de un hermoso chico.

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No sabía cuanto tiempo había estado dormido, pero de que iba a matar a quién me había despertado lo iba a hacer. Estaba soñando como Jungkook adoptaba un pequeño conejo y me lo regalaba, ¡Era tan esponjoso!

Mi nariz se arrugo al escuchar varias voces murmurar entre ellas y me asusté un poco al sentir un peso en mi cintura aunque me relaje cuando sentí el aroma de la colonia de Jungkook en toda mi nariz por lo cuál me acerqué más a él terminando con mi cara escondida en su pecho y él apretando mi cuerpo contra el suyo.

-¡JEON JUNGKOOK! ¿CON QUIÉN ME ENGAÑAS?- Me levanté de repente casi que empujando a Jungkook de la cama por aquél grito que no tenía idea de quién era. Cuando pude acostumbrarme a la luz me di cuenta que se trataba de un chico peligris. Al recordar lo que había dicho vi a Jungkook el cuál tenía una ceja alzada.

-Ya amor, vas a matar al pobre tomate.- Reconocía esa voz en cualquier parte por lo cuál sólo me límite a bajar la mirada, ¿Qué rayos hacía el aquí?- Taehyung, debemos hablar.

Me levanté y salí del cuarto seguido de Seokjin, ¿Qué rayos hacía aquí? ¿Por qué le había dicho de esa forma a ese chico? ¿Acaso eran algo y no confío en mi, en su hermano menor, para decirlo?

-¿Quién es él? No, no, ¿Cómo pudiste entrar?

-Jungkook es un buen amigo mío, Tae. Y el chico de allá arriba es mi novio, se llama Kim Namjoon. Antes de que digas algo, hoy se lo pedí. Vine a visitar a Jungkook para avisarle que todo había salido bien ya que no me contestaba los mensajes. Ahora, ¿Qué hacías abrazado a Jungkook como si tu vida dependiera de ello? ¿De donde se conocen? ¿Son novios? ¿Te gusta?

Definitivamente hoy sería un larguísimo día y conociendo a Jin no se iba a dar por vencido hasta que le dijera por lo cuál simplemente lo llevé hasta el patio donde me tiré al césped y ahí empecé a contarle todo a mi hermano mayor.