25 Días Antes

Día 8: Sábado

Querida Rachel:

 

            Un terrible sábado de entrenamiento para mí. Lo sé, es raro, acabo de decir que el entrenamiento fue terrible. Es bastante irónico, tomando en cuenta de que antes me divertía yendo todos los días. No es que ya no me divierta, pero es diferente, como si las cosas que hemos hechos estos pocos días de verano le han dado una nueva perspectiva a las cosas que me gusta hacer. Tú y tu rara filosofía, que llega de improvisto como si fuese un huracán y transforma todo a su paso.

             Aparte de eso, el día también fue bastante agotador y para colmo, aunque lo intenté mucho, no pude dejar de pensar en tu extraño estado de ánimo. Has estado muy sonriente y tranquila conmigo, pero puedo ver en tus ojos que planeas algo. Creo que preferiría  que te hubieras molestado y hubieses montado una escena, así todo acabaría pronto.

 P.D.: Un día, ha sido sólo un día Rachel, y de verdad no fue mi intención, no creo que sea necesario que elabores una gran venganza. Ya me disculpé ¿qué más quieres que haga?...Bueno, en cualquier caso, lo siento.  

 Tu Amigo:

 

                                                                                                                           Dan