25 Días Antes

Día 1: sábado

Querida Rachel:

            Así es como empieza todo. Hoy es el primer día de verano (bueno, de hecho ya es de noche) y algo me impulsó a escribirte esto, no tengo idea de que fue o de cuando te daré esta carta, pero puedo sentir que hay una razón importante para hacerlo…Lo sé, lo sé. Estoy siendo bastante misterioso.

             Estoy más que seguro de que vas a reírte de mí hasta más no poder cuando leas esto, probablemente me dirás algo como “Dan, una carta ¿en serio? ¿Qué te estás fumando? Somos vecinos” incluso antes de leerla…Dios, me da vergüenza sólo de imaginarme tu expresión. Esto es una tontería, pero aún así siento que debo continuar.

             Bien, trataré de explicarte más o menos la razón que me llevó a esto, pero la verdad ni yo mismo estoy seguro de porqué lo hago. Verás, esta mañana me levanté temprano para ir al entrenamiento de Football y me pasé todo el tiempo pensando en lo que dijiste ayer, todo eso sobre aprovechar el verano, ¿recuerdas la conversación? 

-         Tengo entrenamiento mañana – te dije cuando insististe en que me quedara para ver una película.

-         Te estás perdiendo la vida, Dan – me reprochaste – Eres el mejor jugador del equipo, no necesitas entrenar tanto y menos en vacaciones. La mayoría de los jugadores a penas van un par de veces por semana, pero tú te exiges demasiado cada día, y ¿para qué?

-         Me hace mejor – te respondí algo dudoso. Parecía que te habías tomado el tema bastante personal, así que me preocupaba un poco hacerte molestar

-         Ya eres el mejor, y puedes mantenerte así sin mucho esfuerzo – entonces me señalaste con tu dedo acusadoramente – Te diré por qué lo haces: Tienes miedo. Sí, no me veas de ese modo. Tienes miedo de hacer y probar cosas nuevas, tienes miedo de no ser el mejor si emprendes otra cosa. Pero, tienes todo el verano por delante, no te acobardes, arriésgate un poco.

             Yo sólo asentí a tus palabras y me fui a casa. Anoche ni siquiera tenía idea de que estabas hablando, pero después del entrenamiento, luego de mucho pensarlo, me di cuenta de que algo de cierto hay en todo esto. Por eso fui a invitarte a la playa esta tarde. Claro, lo menos que esperaba cuando me estacione frente a mi casa era ver la motocicleta de Richard Harrison en tu entrada. Preferí esperar a que se fuera antes de cruzar la cerca que separa nuestras casas, pero imagínate cual fue mi sorpresa cuando lo vi salir y despedirse de ti como si fuese tu mejor amigo de toda la vida (por cierto, si no lo recuerdas yo soy tú mejor amigo de toda la vida).  En serio no tengo idea de que le ves a ese tipo, y sí, sé que eres lo bastante lista como para no dejarte engañar o manipular por cualquier chico, pero supongo que no está de más decirte que es un idiota peligroso, lo mejor será que tengas cuidado.

             En fin, creo que me estoy desviando un poco del tema, el punto es que escribo esto porque de algún modo quiero asegurarte que voy a hacer todo lo posible por tomar algunos riesgos, como tú dices, y salirme de la rutina. De hecho, lo de esta tarde estuvo genial, extrañaba mucho ir a surfear contigo. Ya sé, ya sé, es mi culpa que no lo hayamos hecho más porque siempre estoy ocupado. Pero te prometo que ahora será diferente, haré que este sea el mejor verano que hayas tenido en tu vida.

             En serio espero que te haya gustado el tótem que te regalé.

 

Tu Amigo:

                                                                                                         Dan