𝙎𝙚𝙫𝙚𝙣

9.4K 938 171
                                    


-Si es lo que quieres... -Jungkook murmuró contra sus labios, con sus dedos corriendo por la cabellera rubia de Jimin mientras que lo besaba una vez más. Profunda y de alguna manera desesperada, sus caderas balanceándose un poco contra la otra y menor sintiéndose como jalea.

-Quiero... -murmuró por segunda vez, esperando que estuviese siendo lo suficientemente convincente. Su cuerpo entero relajado después del orgasmo, de la sensación restante de la lengua de Jungkook y los dedos en su agujero todavía muy prominente en su mente. Dios, Jimin ni siquiera se atrevió a pensar en cómo se sentiría tenerlo dentro de él-. Lo necesito...

El castaño tragó saliva, abrumado. Maldita sea, le faltaba aire. ¿Cómo pretendía controlarse con una imagen como esta? ¿Cómo pretendía no hacerle daño si lo tenía ahora, bajo su propio cuerpo, con la cadera erguida y prácticamente rogándole para...?

No. Basta.

-O-okay... -respondió trémulo, y en lugar de hacer algo, lo besó por un tiempo, como si no quisiera detenerse y Jimin estaba más que feliz por ello.

Porque sabía que por más asqueroso y sudoroso que estuviera, a Jungkook no parecía importarle un pedazo de mierda. Él lo seguía tocando y recorriendo sus manos por todos lados; en sus muslos, y con un pulgar rozando su pezón, haciendo que suspirara en su boca. Y mientras sus lenguas se masajeaban, honestamente, pensó que podrían hacer eso toda la maldita noche.

Cuando el alpha retrocedió, Jimin no pudo evitar soltar un pequeño gemido. Eso era lo que quería después de todo y se sintió demasiado nervioso una vez llegado en este punto.

Sus ojos mieles se sintieron pesados, observando cómo su mejor amigo se levantaba lentamente de la cama, lanzándole una sonrisa antes de tomar una respiración que parecía un poco temblorosa y bajarse los pantalones.

Jungkook era tan jodidamente ardiente, pero era mucho más ardiente estando desnudo frente a Jimin. Con su cuerpo marcado, brillando del sudor y con una clara erección guardada bajo sus boxers.

Sabía que era inapropiado, pero no pudo evitar mirarlo fijamente mientras se quitaba la ropa interior, casi jadeando al observar cómo ese miembro completamente duro golpeaba en su estomago, húmedo y enrojecido.

Se había puesto duro con solo besarlo y eso hacía que Jimin se sintiese orgulloso. Al manos la experiencia no fue tan mala, ¿verdad?

-¿Estás seguro, Minnie...? -se aseguró de preguntar mientras volvía a arrastrarse sobre la cama. El rubio asintió, obligándose a mirar la cara del alpha en lugar de entre sus piernas, preguntándose si le dolería o no.

No, absurdo. Era Jungkook, él se aseguraría de no hacerle daño, ¿verdad?

-Entrarás en celo pronto...

-Hasta pasado mañana Kook. No sé qué tanto te preocupa.

No obtuvo respuesta, o por lo menos no de inmediato. Jungkook vaciló un segundo antes de hablar:- Dime si... si te lastimo o algo. Empújame si quieres, rasgúñame... pero no te quedes callando, ¿okay? -dijo con tono alpha, volviendo a gatear hacia el rubio.

Jimin asintió con la cabeza un poco demasiado rápido, entre nervioso y desesperado. Quería tenerlo adentro, quería sentirse lo más cerca humanamente posible. Quería a Jungkook y a nadie más.

Hazlo.

El hecho de que ambos ahora estuviesen desnudos llevaba las cosas a otro nivel, la erección de castaño chocaba con Jimin al momento de inclinarse a besarlo. El menor gimió, respirando aceleradamente mientras lo sentía entre su cuerpo y le abría las piernas.

𝙁𝙖𝙡𝙡𝙞𝙣𝙜 ¦ 𝙆𝙤𝙤𝙠𝙢𝙞𝙣Donde viven las historias. Descúbrelo ahora