un flechazo >> harmione

3. Quidditch y amor

Harry estuvo varios días pensando en todo lo de adivinación. Además de que se iba a morir, iban a haber amor y celos... Con quién sería? Los días pasaron normales, y cada vez Hermione le gustaba más. No podía decírselo, ya que ella le veía como su mejor amigo, y no quería arruinar la relación que tenían. Por fin llegó el día que Harry tanto esperaba, el primer partido de quidditch. Gryffindor vs Slytherin. Desde el primer curso era buscador de Gryffindor, y le encantaba jugar. Después de comer, se despidió de sus amigos y fue al vestuario. Allí Oliver Wood, el capitán del equipo, les dio las instrucciones necesarias. Con este discurso concluido, fueron hacia el campo. Se montaron en sus escobas y salieron. La adrenalina corrió por el cuerpo de Harry. Estaba listo para empezar. Sonó el silbato y la quaffle fue liberada. En unos minutos iban:
Gryffindor: 30
Slytherin: 50
Entonces Harry vio la snitch pasar por delante suya. Aceleró la escoba y fue a cogerla. En unos instantes, estaba de pie en la escoba a punto de cogerla y... Estiró el brazo y cayó de la escoba. Fue rodando hasta la mitad del campo. Entonces, abrió la mano. Había cogido la snitch. Se levantó y enseñó la snitch a la gente, que le aplaudía. Después del partido, todo el barullo que había en el campo se trasladó a la sala común. La gente bebía cervezas de mantequilla y gritaban el nombre de Harry. Gracias a él, además de ganar este partido, habían ganado todos los anteriores. Harry estaba con Ron, Hermione y Seamus hablando y tomando cervezas de mantequilla. De repente, nadie sabe si por la ilusión o por el momento, Lavandería Brown se acercó a Ron y le plantó un largo beso en la boca. Ron no se apartó, ni la apartó a ella, si no que se lo siguió. La gente les miraba sorprendidos. Utros les silbaban y otros, simplemente les ignoraban. Harry miró a Hermione. Estaba entre sorprendida y divertida. No pudo aguantar la risa, así que se rió por lo bajini. Después de eso se fueron con una excusa no muy convincente a un lugar a solas. El resto del tiempo Harry estuvo con Hermione. Y si ese era el momento para decirle que le gustaba? Entonces, después de una media hora, se dispuso a decírselo.
H: Hermione, tengo que decirte algo...
Hr: Claro Harry, dime
H: Pues...
De repente le empezó a arder la cicatriz de una manera que nunca había experimentado. Soltó un grito y se llevó las manos a la frente. No aguantaba el dolor. Era muy fuerte. La gente le miraba con temor, pensando seguramente en el presagio. Entonces, fue como si las visiones que tenía por la noche la estuviese teniendo despierto. Voldemort estaba persiguiendo a alguien, Harry no podía ver quien era hasta que le dió la luz. Era un hombre viejo. Harry no le conocía, pero le sonaba su cara...
V: DÓNDE ESTÁ EL CHICO?
¿?: En Hogwarts...
V: TENÍAS QUE TRAERLO AQUÍ INÚTIL! CRUCCIO!
¿?: AAAAAH! No... Pude... ALGUIEN LE PROTEGE...
V: QUIÉN
¿?: Sirius... Black
V: Ya me has servido de mucha ayuda... AVADA KEDRAVRA
Harry volvió a abrir los ojos. Había muchísima gente a su alrededor. Muchos tenían cara de temor, otros, de tristeza. Hermione le abrazó. Harry se lo siguió. No sabía si había dicho en alto todo lo que había visto, y si no era así, tenía que contárselo. Lo del dolor de cicatriz, los sueños con Voldermort, y ahora preguntarle si sabía algo sobre... Sirius Black, que según aquel hombre, le protegía.

Tercer capítulo, este más interesantee⭐