8. Todo cambia

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Harry no sabía qué hacer. Podía besarla, y decirle que le gustaba desde hace muchísimo y estaba completamente enamorado de ella... O, por el contrario, levantarse y no hacer nada. Ambos se miraban. Harry recordó aquel beso acompañado del "Te quiero" de Hermione... Desde aquel momento no volvieron a hablar de aquello, pero, y si a Hermione también le gustaba Harry? Y si no? Todos estos pensamientos pasaban por la mente de Harry. Hermione le miraba a los ojos. Harry, decepcionado consigo mismo, se levantó y la ayudó a ella. Entonces, un sentimiento de quizá, valor, entró en su cuerpo. La ayudó a levantarse, y nada más acabar, se acercó y la besó. A Ron se le cayó la cerveza de mantequilla al suelo y ambos notaron que todo el mundo les estaba mirando. Se separaron y sonrieron. Al fin Harry comprendió que aquel sentimiento sí era mutuo. Entonces, se oyeron unos gritos fuera de las Tres Escobas. Ambos se levantaron y miraron hacia la puerta. Un hombre alto, pálido y de facciones irreconocibles estaba en la puerta, Voldemort. Harry sacó la varita, entonces notó que todo el mundo a su alrededor estaban paralizados. Al parecer, sólo Hermione y él podían moverse... Qué pasaba? Voldemort le miraba con intereses, un interés que iba, al parecer, en aumento.
V: Harry... Potter, nos vemos en persona
H: Qué quieres
V: Creo que ambos sabemos la respuesta a esa pregunta...
Era cierto, todos lo sabían. Harry cogió a Hermione de la mano, y corrió hacia la parte trasera del bar. Se pusieron bajo una mesa, y tiempo después, al no escuchar nada, Harry salió. Elevó la varita y caminó por todo el lugar. La gente seguía paralizada, y Voldemort había desaparecido. Entonces escuchó un grito ahogado, y corrió hacia donde estaba Hermione.
V: CRUCCIO!
Hermione se retorcía y gritaba en el suelo. Al verlo, Harry corrió y se interpuso entre ella y Voldemort.
H: NO LE HAGAS DAÑO
V: Eres un necio, Harry Potter
Ambos se miraban.
H: Mátame, pero no le hagas daño
V: El amor, la invención más estúpida...
Se escuchó una explosión. Ambos miraron a la puerta. Alguien había entrado, y les estaba mirando. Albus Dumbledore. Harry aprovechó aquel momento de sorpresa para coger a Hermione en brazos y alejarse de Voldemort. Tenía heridas por todo el cuerpo, dando a entender que la maldición Cruciatus no era la única que le había echado. Miró a Dumbledore, sólo con una mirada entendió lo que quería. Hacía poco habían aprobado el examen de aparición, y era el momento de ponerlo en práctica. En apenas unos instantes, estaban en la enfermería. Harry puso a Hermione en una camilla, y en seguida vino Madame Pomfrey para curarla.
Harry iba hacia la enfermería. Habían pasado apenas unas horas, y quería ver como se encontraba Hermione. Según había entendido, Dumbledore ganó la pelea, pero Voldemort huyó. Abrió la puerta y se quedó de piedra. Estaba Ron besando a la inconsciente Hermione. Harry pudo ver en su mano izquierda una Amortentia, al parecer, todavía llena. Corrió hacia ellos y empujó a Ron haciendo que cayese al suelo.
H: FUERA
R: Harry... Puedo... Puedo explicarlo...
H: PENSABA QUE ERAS MI AMIGO
R: HERMIONE SIEMPRE TUBO QUE SER MÍA, ENTIENDES?
H: HERMIONE ES MI NOVIA, ACÉPTALO YA
Se dirigieron una mirada de odio. Ron había cambiado. Se fue y dio un portazo.
Hr: Ha... Ha... Rry?
H: Hermione -la abrazó- cómo estás?
Hr: -se tocó el labio, al parecer, roto- Me... Duele
Harry lo miró y no pudo evitar besarla. Al parecer no le dolió a Hermione, que lo siguió con gusto.
Harry se miraba al espejo. Se había puesto su traje de quidditch, pues para el baile de primavera había que ir disfrazados. Sonrió y bajó a la sala común. Allí le estaba esperando Hermione con un precioso vestido dorado y el cabello recogido en un elegante moño, iba de snitch. Bajó y le dio la mano.
H: Lista?
Hr: Lista
Bajo la atenta mirada de todos fueron hacia las afueras de Hogwarts. Esta vez era en un jardincito bastante amplio. Empezó a sonar la música, y con ella, el baile de muchas parejas. Harry le puso las manos en la cintura y Hermione sus brazos alrededor de su cuello. Notó la cabeza de Hermione en su pecho y sonriendo siguió bailando. Era un momento perfecto... Entonces, se escuchó un gran estruendo cerca de donde estaban ellos...

Perdón por la tardanza <3

un flechazo &gt;&gt; harmioneDonde viven las historias. Descúbrelo ahora