......TESSA....
-¿Y qué amigos son esos?-Evan Daddario, el chico nuevo.
Dani arqueó las cejas y frunció los labios con un mohín.
-Ya, el musculitos. Bueno, no me sorprende, ese también es un poco rarito.
-A mí me parece simpático.
-Si tú lo dices -comentó Dani sin estar muy convencida. De repente se incorporó-. ¿A qué parte del lago? Puede que tengas a Adam de vecino.
Yo negé con la cabeza.
-Están en Wolf's Grove. Creo que son los que han comprado la casa de la señora Clarissa
¿Recuerdas cuando íbamos hasta allí a vender galletas?Dani asintió y una sonrisa nostálgica se dibujó en su cara.
-Sí, me gusta esa casa. Pero ninguna puede compararse a la que hay junto a la cascada. Es de ensueño, como un palacio de cristal -comenté en voz baja. Esa construcción me tenía fascinada.
Unos años antes, un arquitecto muy famoso de Los Ángeles había construido la casa para una chica de la que se había enamorado. Durante unas vacaciones, la mujer se había encaprichado del lugar, pero apenas vivieron allí unos meses.
Acostumbrada a la ciudad, Whitewater se convirtió en un lugar solitario y asfixiante para ella, y acabó abandonando la casa y también al hombre. Desde entonces, la vivienda estaba en venta.-Es bonita -comenté
-¿Bonita? ¿Solo bonita?dijo Dani
-¿Y qué quieres que diga? ¿Qué es la casa de mis sueños? Ya sabes que lo es, mataría por tenerla. -Suspiré y cerré los ojos-. Debe resultar imposible no ser feliz en un lugar como ese.
Una sonrisa se dibujó en mis labios al imaginarme dentro de esa casa, y mi mente volvió a divagar entre fantasías. Pensé en Adam, sentado a la enorme mesa de una cocina espectacular, mientras yo me acomodaba en su regazo con una taza de café. Él me acariciaba la espalda y me sonreía, para después besarme en el cuello con una mirada que me hacía estremecerse.
Abandoné esos pensamientos y mi sonrisa boba en el momento en el que me percaté de que Dani me estaba mirando con demasiada atención.
-¡No, no quiero saber en qué estabas pensando! -exclamó Dani ruborizada, cuando despegé los labios en lo que parecía un intento por justificación
........POV/Adam.......
Llegue a la bifurcación. No tardé en divisar el roble y el camino; y también una señal, semioculta entre la maleza, en la que se podía leer: Sendero del lobo.«Tiene gracia», pensé.
Me estremecí con una suave risa, era irónico que se llamara así, sobre todo cuando conducía a la nueva residencia de una familia de licántropos.
Avanzé por el camino de tierra convertido en un barrizal por culpa de la lluvia. Una gota me cayó en la mejilla desde el pelo mojado, haciéndome cosquillas. El coche se deslizaba con mucha facilidad sobre el barro, e intenté secarla frotando la cara contra el hombro sin quitar las manos del volante. Aparté la cara de golpe al percibir el olor de la chica impregnado en la prenda, mientras una emoción desconcertante se agitaba dentro de mi pecho: el tenue recuerdo de un corazón palpitando en su interior, rivalizando contra el hambre que se agitaba dentro de mi. Respiré profundamente, intentando calmarme,hasta que empezé a recuperar de nuevo el control de mis pensamientos.
Por suerte, una imagen me distrajo. Una casa de madera y piedra, con el tejado de pizarra, apareció a lo lejos rodeada por el espeso bosque. Tenía grandes ventanales que dejaban ver el interior de la vivienda y, conforme me fui acercando, pude distinguir varias figuras que se movían por las amplias estancias. Sonreí, y una sensación de calor me recorrió el pecho. ¡Cuánto los había echado de menos!
Una explanada de gravilla servía de aparcamiento a un monovolumen y a un Range Rover plateado último modelo. Detuve el coche junto a los otros vehículos y toqué el claxon un par de veces. El portón de madera que daba entrada a la casa se abrió de golpe, y una niña que no contaba con más de siete años salió disparada a través del umbral.
-¡Ya está aquí, ya está aquí! -gritó la pequeña. Corrió hacia mi con sus diminutos pies descalzos y una amplia sonrisa dibujada en la cara. Tenía el pelo rubio, recogido en una coleta que ondeaba sobre su espalda, y unos ojos grandes y grises de los que era imposible apartar la mirada
Me agaché para recibirla y la niña saltó a sus brazos abiertos con una gracia que me desarmó.-¡Adam! -gritó con voz cantarina.
-¡Hola, Lily, cómo has crecido! -exclamé abrazándola.
La niña asintió, emocionada, y se apretó contra mi cuello.
-Te he echado mucho de menos -dijo con un mohín.
-Y yo a ti, princesa, y yo a ti -reconocí mientras la besaba en la frente.
Yo deje a Lily en el suelo y abrí los brazos a la mujer que se acercaba hasta ellos con paso rápido, Isabel, la esposa de Eiden. Lucía una larga cabellera rubia recogida en una trenza, y vestía un pantalón corto de color blanco y una camisa a cuadros sin mangas que dejaban al descubierto una piel dorada por el sol. Era una mujer bellísima, exuberante, y nadie diría que aquel cuerpo había sufrido cuatro embarazos. La seguían tres muchachos de anchos hombros y grandes sonrisas en unos rostros muy atractivos.
-¡Adam! -exclamó Isabel, saludando efusivamente con la mano.
-¡Hola, Isabel!
-¡No sabes cuánto me alegro de que estés con nosotros! -dijo emocionada. Nos abrazaron unos segundos y ella tomó mi rostro entre las manos para darme un beso en la mejilla-. Mírate, tan guapo como siempre. ¡Dios mío! ¿Qué te ha ocurrido? ¡Estás empapado!
Yo sonreí y moví la cabeza, restándole importancia a mi aspecto.
-Tuve un pequeño incidente en la carretera, nada importante.
-¿Estás seguro? Pareces un poco cansado.
-¡Ya vale, mamá, vas a conseguir que resucite con tanta ñoñería! -dijo el más joven de los tres chicos que la acompañaban. Tenía dieciséis años, aunque aparentaba alguno más.
Chicos que no les importe el capitulo tan largo como dice el dicho no te guíes por la portada y si el contenido es bueno y si es muy largo comenten y los hago un poco mas cortos Los quiero mucho y por favor voten por este capitulo CHAAOOOO 💋💋💋💋💋💋💋