Cada mañana, cuando el despertador suena, es muy fastidioso que los profesores no acepten la excusa del "corazón roto" para faltar o no hacer los trabajos. Desearía poder perderme en mi almohada y en las lágrimas de la noche anterior. Desearía volverme pequeña y olvidar los problemas, olvidar todo, excepto a ti. Cómo puedo seguir pensándote cuando tú podrías no estar haciéndolo, o tal vez si. Pero cada vez hablamos menos como para saberlo.
Hace unos días se acabaron las miradas cargadas de complicidad cuando estábamos a tan solo unos metros de volver a tocarnos las manos, besarnos el rostro y amarnos. Cuánto desearía haber podido amarte más fuerte, mucho más. Te abrazaría miles de veces si supiera que lo nuestro iba a acabar muy pronto, te tomaría más veces de la mano y besaría el interior de tu palma, te abrazaría más veces para perderme en tu calor.
Pero no cuenta desearlo.
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365
Short StoryÉl la dejó, ella quiere regresar. Ella lo ama, él ya no. Cuando te deja, deberías entender que él ya no es tu hogar. Cuando lo amas, harías todo por regresar. Bueno, ésta es mi historia. Mi travesía de 365 días para enamorarlo de nuevo. O no.