Capítulo 7

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Era un día espectacular para volar por los aires. Yoongi llevó a Jimin a dar unas vueltas en su primer día de libertad. Él jamás había volado de esa forma. Siempre lo había hecho de regreso al campamento, mas no por placer. Era increíble.

El mayor, por su parte, no podía dejar de pensar en su futuro juntos. Moría por ser su pareja. Los dragones lo hacían de un modo bastante particular, haciendo una danza preciosa en los aires que terminaba en la tierra, con los dos juntando sus narices y cerrando sus ojos mientras estaban en su forma de dragón. Si la unión entre ellos era verdadera, una pequeña marca nacería en sus cuellos, indicándoles que se pertenecían uno al otro por el resto de sus vidas. De lo contrario, el amor no sería lo suficientemente fuerte y debían de buscar a alguien más, aunque esto era muy poco frecuente. Yoongi sabía dentro de su corazón que con Jimin eso pasaría al instante, mas se llevó una sorpresa al haberlo intentado, pues el menor al instante lo esquivó pretendiendo no haberse dado cuenta y bajó al suelo.

Yoongi lo siguió. Estando uno frente al otro, se miraron a los ojos. Jimin bajó la cabeza y notó cómo el otro lo acariciaba con su hocico, haciéndole mimos. Aún cabizbajo, soltó un triste quejido. El alfa se transformó, siendo seguido por el más chico. Se acercó a él y acarició su rostro.







—No te sientes bien...

—Lo estoy.

—Jimin, puedo notarlo ¿Pasó algo? Parecías feliz hace unas horas.

—Lo sé, es que no quiero volver.







Jimin caminó desde el pequeño bosque en medio de las islas, hasta la arena, a orillas del mar. Miró hacia el horizonte y soltó un suspiro. También aquello era cierto. En cuanto estuviera de vuelta, lo irían a presionar para que dijera si había visto o no al tan codiciado Furia Nocturna.







—Prometo que hallaré una forma de adelantar los planes. No descansaré hasta haberte sacado de ahí.







El corazón del joven dragón se estremeció de alegría ante aquellas palabras, aunque no dejaba de sentirse afligido por el pensamiento de que tal vez estaba siendo utilizado por el mayor. Este, por su parte, lo abrazó desde atrás y dejó un suave beso en su cuello que esparció cosquillas por todo el cuerpo del omega.







—De hecho, creo que tengo un plan.

—¿Cuál es?

—La próxima que salgamos, podemos fingir que has encontrado al dragón que tanto buscan.

—¿Y eso para qué?

—Podría convencer al jefe de atrapar a toda mi aldea.

—Estás loco —se soltó de su agarre— ¿Cómo podría eso salir bien?

—Él sabe que nuestra raza es la dominante por naturaleza, que generalmente somos los líderes de los diferentes grupos de dragones que conviven juntos en algún lugar, como nosotros. Si puedo convencerlo de usar la idea de atraer a todos con la pareja de los Furia Nocturna, entonces podremos ir a mi isla, decirles que se preparen para liberar a todos y sacar a los que estén capturados.

—Pero no podrán volar ni defenderse. Los cazadores utilizan un líquido que nos debilita.

—Ya me encargaré de eso esta noche. Alteraré la mezcla. Hoseok dijo que avisaría a todos que debían fingir ser débiles en cuanto ya no estén bajo el efecto del veneno.

—¿Quién es Hoseok?

—Un amigo. Él es el que me mostró la isla en la que nos conocimos.

—Sí que es un buen amigo, entonces. Sus intenciones siempre fueron buenas. Ahora, junto a ti está arriesgando su vida por nosotros. Son ambos muy valientes y brillantes.

—¡Fue mi idea!

—No sabía que eras celoso.

—No lo soy.

—Claro —rodó sus ojos—. Eres muy inteligente, Min Yoongi. Estaré agradecido contigo de por vida.

—Por ti —tomó entre las suyas sus manos y las besó—, haría lo que fuera, Jiminnie.

**************

La noche había llegado. Yoongi, luego de haber llevado de vuelta a su omega al campamento de cazadores, se reunió con el jefe. Pensaba que debía accionar su plan cuanto antes. Por eso, luego de haberle dicho al hombre que tenía buenas noticias, fue a sentarse junto a él en el cuarto de la torre que le pertenecía para contarle todo al respecto.







—Es una sorpresa que alguien venga con algo bueno después de tener que salir con ese dragón, amigo. Créeme, en años, no encontró a nadie. Incluso atacaba o se desviaba para escaparse, pero siempre lo atrapaban antes de que pudiera lograrlo ¿Cómo es que tú, en tan sólo unos días, lograste tener buenos resultados?

—No lo sé, pero los tengo. Hallé al Furia Nocturna.

—¿¡Qué!?







Por un momento, el hombre se quedó sin habla.







—Tiene que ser una broma.

—No lo es.

—¿¡Y POR QUÉ NO LO CAPTURASTE, IDIOTA!? —golpeó el escritorio frente a él.

—Porque necesitamos que nuestro dragón haga que el otro confíe en él y que lo convenza de atraer a todos los suyos hasta aquí. En donde hay un Furia Nocturna, hay toda una comunidad de dragones dirigidas por él.

—Estás teniendo en cuenta el plan que te había mencionado.

—Creo que es lo más inteligente. Mientras más, mejor. Su ejército de dragones será incluso tres veces más grande en cuestión de horas.

—¿Y cómo encontrarán al otro Furia Nocturna?

—Ya conoció al nuestro, va a regresar a buscarlo.

—Eres más listo de lo que pensaba, Yoongi. Todo lo que dijiste es tan correcto, que no hay necesidad de revisarlo con más cuidado. Acepto. Hagámoslo a tu manera.







El jefe del campamento extendió su mano para que Yoongi le diera un amistoso apretón, sellando así el trato de llevar adelante el plan. El joven estuvo a punto de hacerlo, pero algo hizo que se detuviera: una horrible punzada en su corazón que hizo que apretara con fuerza sus ojos por el dolor. Llevó la mano que había estirado hacia adelante hasta su pecho, apretujando entre sus dedos la ropa que llevaba puesta, justo a la altura de su corazón. El otro se alarmó.







—Yoongi, ¿Estás bien? ¿Estás enfermo?







Silencio. El dolor desaparecía de a poco. Cuando fue dentro de todo tolerable, el muchacho dejó ir un largo suspiro.







—E--estoy bien, lo siento.

—¿Seguro?

—Muy seguro.







Antes de que pudiera hacer alguna otra pregunta, el pelinegro se apresuró para estrechar su mano y marcharse. Aquel extraño episodio le había sorprendido en demasía, pero decidió no darle mucha importancia, pues tenía cosas que hacer para que su plan no tuviera fallas.

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Lo que seguro tiene fallas es este capítulo. Acabo de terminarlo y son las 2:23 de la mañana.

Tengo mucho sueño, así que me voy a ir sin decir mucho más(?

Espero que les haya gustado, los quiero ♡

The one [Yoonmin] [Omegaverse] ©Donde viven las historias. Descúbrelo ahora