–Hablé con tu madre sobre lo de mi viaje y...–Fue interrumpida por la mirada interrogante del chico.
–¿Espera? ¿Viaje? ¿De qué hablas? –Le preguntó desesperadamente.
–Me iré de Goyang por unos dias, asi que...–Intentó explicarle pero él nuevamente se adelantó.
–Supongo que me dejarás a cargo de la tienda...–Dijo mirándola extraño.
–¿En serio crees eso? Cariño te quiero, pero eres muy...distraído como para dejarte a cargo de mi tienda. –Respondió ella haciendo gestos raros, que terminaron de confundir más al chico.
–¿Me estas llamando imbecil?
Ella inhaló profundo antes de responder, esto no sería nada fácil.
–No quise decir eso. Contrataré a alguien para que te ayude. Si logra ganarse mi confianza, queda a cargo de la tienda...para que no sea tan complicado para ti. –Aclaró ella, intentando hacer entender al chico pero éste aún tenía una pizca de duda en su rostro.
–¿Quién fue la pobre criatura que se ofreció para trabajar aquí?
–Tu amiguito, el chico que siempre compra nuggets. –Respondió ojeando una revista.
Hoseok palideció.
–Pero...¿Crees que tenga la suficiente responsabilidad para seste cargo? No me molestaría quedarme solo. –Manifestó, en un intento de que su tía cambiara de opinión.
Sin duda, que Kihyun trabajara en la tienda junto a él no era para nada bueno, partiendo por el nerviosismo que se generaba en el mayor, se le haría imposible atender tranquilo a los clientes. Además, temía que el más bajo se quiera aprovechar de él sólo por querer saber el secreto de no engordar, debía encontrar una manera para que el menor no hiciera de las suyas allí.
Aunque Hoseok era demasiado estupido como para ponerle un límite.
–Eso lo veremos, en un rato llega. –Aseguró, observando el reloj que rodeaba su muñeca.
Tal y como dijo, diez minutos más tarde Kihyun estaba frente a ellos con una gran sonrisa. Al parecer, estaba bastante emocionado por trabajar en una de sus tiendas habituales, algo que le causaba cierto entuciasmo a la tía Minjung, puesto a que luego de haber conversado con el de menor estatura le parecía que era la persona correcta para el cargo, claramente olvidando la situación del día anterior.
–Debo ir a hacer...papeleos. –Comentó la mujer dejando a Hoseok con el menor.
Él debía comenzar dentro de un rato a atender a los clientes que llegaban en masa a la tienda, algo así como una prueba por la tía Minjung. Asi que, Hoseok se dió un pequeño descanso y prefirió supervisar a su pequeño nuevo compañero, quien se sentía un poco intimidado por la mirada del pelinegro.
Una chica de unos quince años se acercó al mostrador con dos grandes bolsas de frituras, a Kihyun le tocaba atenderla por lo que intentó darse un tiempo al pasar cada producto por el lector de código de barras. No estaba para nada contento con la compra de la chica, quizá porque le gustaría haber sido él quien la hubiera realizado.
Le entregó el vuelto y mantuvo la bolsa dónde estaba los nuggets sin intención de entregársela aún. La adolescenta lo miraba con una ceja alzada, esperando impaciente su bolsa, pero esta simplemente no llegaba a sus manos. Hoseok le dió un pequeño codazo a Kihyun para que de una vez por todas diera por hecha la compra, pero el más bajo estaba en una especie de trance.
Observaba atentamente la bolsa de nuggets, en su rostro se notaba tristeza y el enfado que sentía en ese momento con la chica que había comprado sus adorados nuggets. A los pocos segundos, el pelinegro le arrebató la bolsa a Kihyun para dársela a la adolescente que los fulminaba con la mirada, para luego caminar irritada hacia la puerta.
Hoseok pensaba en la paciencia que tendría que tener en los próximos días, para que una situación de éste tipo no volviera a ocurrir.
Era entendible que el menor fuera adicto a los nuggets, pero necesitaba controlarse.
ESTÁS LEYENDO
nuggets ➳ wonki
Fanfiction❝en donde Kihyun compra semanalmente decenas de bolsas de nuggets❞ adaptación fixariot ©