Ep 3: Roto

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"¿Alguna vez has escuchado o te han dicho que si cometes pecados iras directamente al infierno? ¿Será que por más que intentemos ser buenos, si llegásemos a cometer un solo error, nuestra alma estará condenada para sufrir y ser torturada por toda la eternidad allí abajo?"

En algún lugar de la existencia o tal vez no.

Era un terreno plano, un cielo de una combinación de colores, donde mayormente predominaba un lila, celeste y un ligero azul oscuro, con un par de brillos. Él pastor estaba de rodillas encima de una colina con los ojos cerrados orando a Dios.

— ¿Es realmente esto lo que quieres? —preguntó una voz gruesa.

Abrió sus ojos y volteó rápidamente para ver de quien se trataba.
— ¿Quién es? —Preguntó al ver que no había nadie más que solo él.

Los deseos más profundos y oscuros del hombre siempre salen a la luz... pero, ¿Tu qué haces en medio de todo esto? Se supone que predicas la palabra de Dios... no lo contrario.

George: ¿En dónde estoy?

Responde.

George: Estaba cansado, siempre dejaba que los demás caminen encima de mí, jamás me oponía a nada, esperando todos los días la justicia divina... ¿Qué recibí al final? Una paliza... si Olivier no hubiese estado allí... yo hubiese muerto en ese callejón.

¿Esa es razón suficiente para rendirte frente a un demonio y dejar que hiciera lo que le plazca contigo?

George: Olivier me dio habilidades que jamás había tenido... me hizo sentir como jamás había sentido... después de mucho tiempo finalmente me siento una persona importante y nueva...

¿Realmente crees eso?

George: Soy feliz... y eso me basta, limpiare los pecados que sean necesarios con este poder... y no dejaré que nadie... nadie se interponga.

De pronto los ojos del pastor se abrieron, estaba recostado en el suelo de su despacho, con el traje que él había creado para "limpiar los pecados". Lentamente se fue levantando mientras se veía en el espejo que tenía en frente; de un momento a otro apareció en el baño gracias a su habilidad de teleportación; abrió la llave del lavamanos para agarrar agua y lavarse la cara; cuando levantó su mirada hacia el espejo para verse, el color de sus ojos habían cambiado al tono rojo sangre de su lado demoniaco, su piel mantenía su tono natural pero se estaba emblanqueciendo muy lentamente, y unas ligeras venas oscuras se comenzaron a hacer presente en su cuello, la mirada era penetrante y fija.

— No dejaré que nadie se interponga... —se dijo así mismo.

Terminal terrestre de Danfield Ville.

Un bus que provenía directamente desde el aeropuerto de la ciudad de Londres llego finalmente a la estación para desembarcar a todos sus pasajeros que llegaban a Danfield, algunos turistas, otros que regresaban de sus vacaciones, algunos eran nuevos...

Y alli estaba, una chica de cabello oscuro, unos fantásticos y llamativos ojos verdes, de aproximadamente metro sesenta y ocho; usaba jeans negros, botas oscuras, una blusa blanca y una chaqueta de cuero color marrón encima. Cuando salió de la terminal vio un pequeño letrero en la salida que decía "Bienvenido a Danfield Ville" ella tomo aire para sujetar bien sus maletas y caminar hasta la salida para tomar un taxi que la lleve hasta el sur de la ciudad, sin embargo ya había un auto esperándola afuera. Ella simplemente sonrió.

Casa de Sky.

Lissandra terminaba de mudarse a la casa de su amiga, que casualmente era grande y capaz de mantener a varias personas, por ahora solo vivían Sky, Alice y ahora ella.

Danfield Ville 3: El Mortal supremo ©Donde viven las historias. Descúbrelo ahora