Estábamos en el funeral de quien fue en su momento mi mejor amiga. Sarah.
El sacerdote decía unas palabras en su memoria y solo podía ver como los Hamilton lloraban por su pequeña.
Todos se estaban yendo, incluso sus padres, yo quería pasar más tiempo.
- Angela... debemos irnos, debes descansar - Evan trató de convencerme pero no lo logró.
- A pesar de su traición... el que haya sufrido una muerte tan violenta... Fue mi amiga por mucho tiempo - las lágrimas salían a mares, sentí unos brazos rodearme y un susurro en mi oído.
- Tranquila, encontraremos al maldito hijo de puta que hizo esto y todo se va a arreglar.
- Pero nada va a devolverle la vida.
Evan decide dejarme sola un momento y le hago señas a los de seguridad que me esperen un poco a una distancia prudente. Veo su nombre en esa lápida gris.
"Sarah Kristall Hamilton"
(1996 - 2019)- ¡Como lamento que nuestro último encuentro! - dije con nostalgia recordando ese día - ¡Las cosas horribles que nos dijimos! Aún recuerdo el día en que nos conocimos, yo solo tenía 13 años, era nuestro primer año de universidad - los recuerdos llegan.
Flashback
Papá me dijo que iniciaba una nueva etapa a partir de ahora, que pase lo que pase siempre iba a estar conmigo.
Me sentía perdida en este lugar, en mis manos tenía la hoja que decía en que salón me corresponde la primera clase.
Veo a una joven de cabello castaño y piel blanca caminar por el mismo pasillo y decido preguntarle.
- Disculpa ¿Sabes dónde queda el salón 304?
- Voy al mismo salón... un momento, tu eres Angela Zuckerman - dijo la chica un poco alocada - Mucho gusto, Sarah Hamilton - me dijo tendiendo su mano hacia mi y la tomé.
Fin del flashback
- Solo espero... que estés donde estés... puedas perdonarme.
Me levanté del césped y al levantar mi cabeza a lo lejos, detrás de un gran roble, pude ver la figura de alguien y por alguna razón que me causó temor, sentí que me veía fijo.
- Matt, Vince, vamos a casa por favor.
********
Bien, estoy en la sala de estar y frente a mi, unos muy pero muy enojados padres que me ven fijo.
- ¿Y bien? ¿Vas a decirnos el por qué nos ocultaste algo tan delicado?
La mirada de papá hizo que bajara mi cabeza.
- Creí que era una simple broma...
- Responde la pregunta Angela Christine - mamá y papá nunca me llamaban por mis dos nombres a menos que estuviesen furiosos conmigo, como es el caso. Y si, mi segundo nombre es Christine, Angela Christine Zuckerman.
- Yo... no quería involucrarlos, aparte que el me decía en cada nota que nunca hablara de esto con nadie.
- Ahora alguien pagó con su vida aún sin merecerlo - dijo mamá.
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¡Sólo Mía!
Fiction générale¿Alguna vez sintieron que algo no andaba bien? ¿Que por más buenas personas que sean, siempre hay alguien que quiere destruirlos? Pues ese es mi caso. Tenía una vida perfecta a pesar de haber perdido a mis padres a los cinco años, conocí el verdade...