@;; Soy tu dueño [Baning]

Capítulo 4: - Dejame ser libre -

En las muy transitadas calles ya de noche, se encontraban dos jóvenes, una con una vestimenta escolar y otro con ropa común entregando volantes a cualquier persona que pasará delante de ellos o por sus costados. Apenas habían salido de la escuela o de la universidad se dedicaron a realizar aquello. Tenían la esperanza que una de las tantas personas que le entregaban el volante supiera el paradero de aquel chico de ojos color miel y cabello castaño. No sabían si habían imprimido pocos volantes, o que habían entregado a muchas personas que ya se había terminado todo. Sus rostros tristes, se miraron mutuamente, se veían el rostro de los dos cansados y a la vez melancolía. La rubia se lanzo a los brazos de su acompañante para empezar a llorar fuertemente, no le importaba que la escucharan, solo quería llorar, llorar por el...

- ¡Helbram! ¡¿Por que mi hermano!? ¿¡Por que se lo llevaron a el?! - grito entre lágrimas la pequeña aun abrazando a su mejor amigo que también estaba apunto de llorar.

- Tranquila Elaine, lo vamos a encontrar, te lo juró - dijo lo mas calmado que podía, no podía ponerse a llorar. Uno de los dos tenía que ser fuerte y ese sería el. Acaricio la mejilla de la rubia quitando las lágrimas de la la misma. - Vamos, te acompaño a tu casa.

Mientras la abrazaba con una mano empezaron a caminar lentamente hacia la "casa" de la chica (si es que se podía llamar casa). A petición de Elaine, Helbram decidió quedarse en la casa de ella, aparte que le prometió hace varios años a Harlequin, que si el no estuviera en algún momento, el tendría que cuidarla por el. No tenía tampoco ningún inconveniente, por que aquel vivía solo por lo que sus padres murieron hace un año.

Pero algo andaba mal, tenía un mal presentimiento al igual que sentía que alguien los estaba persiguiendo. Aceleró el paso para llegar mas rápido, pero dos hombre que aproximadamente media unos 2 metros con sus trajes de color negro. El de cabellos verdosos se posicionó delante de la menor mientras que miraba desafiante a uno de los señores.

- Así que ustedes son familiares de aquel mocoso que debía ser de mi propiedad - uno de los dos se aproximó al mayor para agarrarlo de los brazos hacia arriba y levantarlo - Amm para ser un chico de universidad eres muy bajo - contesto de manera burlona.

- ¡Dejalo! - grito Elaine enojada, para también ser alzada de la misma manera.

- Serán una muy buena carnada - dicho último se escucharon algunos gritos para ser metidos a una camioneta al igual que drogados

- ❤ -

Las lágrimas recorrían por su delicada piel mientras que miraba a los ojos a aquel hombre tan grande para el; aquel hombre que era su pesadilla y que deseaba que solo fuera eso...una pesadilla, una horrible pesadilla. Ahora se encontraba debajo de el echado en la cama mientras que Ban sostenía sus muñecas fuertemente. Empezo a patalear pero simplemente era demasiado débil que no lograba moverlo.

- Sabes~ Me encanta verte de esa manera - una vez mas se acerco a su rostro para darle un beso.

Esos besos que tenía mucho sentimiento para uno y que para el otro solo era una tortura. El mayor de los dos agarro la cabeza del chico para que no se separará del beso, por que era lo que quería evitar. Metió su lengua para enroscarla con la lengua de el apenas.

Una vez mas se alejo para volver a realizar la misma acción.

- Su-Suelteme - otra vez fue interrumpido por un beso apasionado.

Rápidamente aquel lo empujo fuertemente haciendo que sus labios fueran separados tan solo unos centímetros.

- P-Por favor~ - rogó el castaño.

Aquel se paro fuera de la cama para mirar al de ojos miel ahora sentado sobre la cama y su cabeza estaba agachada sin levantar la mirada. Lo miro con seriedad para voltear e caminar hacia la salida de la habitación.

- Por favor~ - de nuevo esa voz lo hizo parar y voltearse a la dirección de donde el - Q-Quiero ver a mi familia -

Le...enojaba, mas bien le ponía echa furia escuchar las palabras dichas por King. Solo no entendía. Era tan obvio saber que su padre adoptivo lo vendió ¡Como podía querer ver a ellos!...por que solamente se fijaba en aquello y no en el. Cree que mas bien ignoraba todas las cosas que el le hacía solo para preocuparse mas por su familia.

- Te vas olvidando de ellos - Ordenó sin despegar la vista de los ojos de el.

- ¡No! Quiero ver a mi hermana... ¡Quiero ser libre! -

- Nunca lo serás - fue donde el para rápidamente desvestirlo.

Después de varios minutos se escuchaban gemidos de dolor y gritos por parte del castaño quien estaba siendo penetrado fuertemente por aquel sujeto mientras que sus piernas estaban elevadas.

- Duele, duele detente ahhh~ - grito entre lágrimas.

Esto es un infierno... ¿Por que ami? ¿Que eh echo yo?...no lo se....

Yo solo quiero ser libre....libre..