Estaba muy preocupada y decidí que seria mejor ir a buscarle así que me dirigí a la tienda de pan más cercana. Abrí la puerta. Justo delante de mi pude observar unos ojos que me miraban fijamente. Era León.
Tenía mucho miedo. Me acorde del día que nos amenazaron con la pistola, León conocia al que lo hizo, y no pude evitar pensar que ese hombre estaría allí también. Por suerte -o eso pensé- no fue así.
Por unos instantes pensé en salir corriendo, pero luego me acorde de mi padre y me quedé.
Él no estaba allí.
Volví a llamarle. No contestó. No sabía donde buscarle así que decidí volver a casa cuanto antes.
Ya había llegado a mi calle cuando vi que las ventanas de las casa de algunos vecinos estaban rotas, entonces oí un ruido de cristal rompiéndose. Salí corriendo de allí, porque aunque quería encontrar a mi padre no pude contener mi instinto de supervivencia. Me escondí detrás de un contenedor y asome la cabeza por un lado. No vi nada que me llamase la atención. Unos segundos mas tarde llegó la policía.
No queria salir de mi escondite, pero tuve que hacerlo cuando una mujer me encontró:
-Hola, soy la inspectora Wilson -dijo con un tono amable y comprensivo- pero puedes llamarme Brooke, si lo prefieres.
No dije nada, simplemente la obseve atentamente sin atrevirme a moverme, y mucho menos a salir.
- Me gustaria ayudarte, pero para hacerlo necesito que salgas de ahí y vengas conmigo. ¿De acuerdo? -ante mi silencio, Brooke continuó con sus preguntas- ¿Sabes donde estan tus padres?
-No -dije mientras miraba hacia otro lado- Mi madre murió hace unos años en un accidente de coche, - Brooke me miró con compasión- y mi padre salió a comprar hace unas horas y todavia no ha vuelto.
Un par de minutos mas tarde le pregunté que havía pasado, sin embargo me respondió que todavia no lo sabían. Aunque no me sentía segura del todo, algo en su forma de mirarme o de hablarme me hizo sentir que estava a salvo, así que finalmente, decidí salir.
Pude ver a mucha gente allí, preguntandose que habria sucedido, pero desgraciadamente nadie lo sabía aún. Habia quienes decian haber visto a un homre de 1'60m salir huyendo antes de que llegara la policia, tambien habia los que especulaban sobre invasiones extraterrestres y platillos volantes. La inspectora Wilson me pidió que subiera a su coche, y sin dudarlo un segundo entre rapidamente, con la esperanza de poder escapar de todas las miradas curiosas de la gente. Ella comentó que me llevaría a comisaría y que esperaría alli hasta que encontrasen a mi padre, tambien me dijó que estabamos un poco lejos, y que el viaje iba a ser largo.
Despues de veinte minutos en el coche empeze a relajarme y finalmente me dormí
