Un día vino un policía a nuestra escuela, llevaba su uniforme y su gorra, pero no iba armado. Nos dijo que quería hablar con nuestra profesora.
Pero no se quedaron hablando allí, sino que se fueron a la comisaria, porque según parecía querían hacerle unas preguntas sobre el hombre extraño.Unas horas mas tarde, aquel mismo día volvió "el hombre extraño", al que le apodamos Marcos.
Entró en nuestra clase y nos preguntó si algún policía había pasado por allí. Le dijimos que no, entonces se quito la mochila de la espalda y la dejó en el suelo. La abrió. Todos le mirábamos expectantes. Sacó una caja decorada con dibujos infantiles de mariposas, soles y lunas. Nuestros rostros reflejaban una mezcla entre miedo y sorpresa pero sobretodo sorpresa.
Destapó la caja y cundió el pánico. Llevaba una pistola.
Mire a León, él no parecía sorprendido ni asustado. Parecía tranquilo y seguro de si mismo.Marcos nos volvió a hacer la misma pregunta, pero esta vez iba apuntándonos a todos y cada uno de nosotros, pasando su pistola de cabeza en cabeza saltándose a León.
Esta vez alguien dijo que si. No se quien fue porque el miedo no me había permitido levantar la cabeza, y estaba demasiado asustada para reconocer de quien era la voz ni des de que parte de la clase me llegaba su sonido.Luego Marcos y León se fueron. Unos minutos después llegó la policía porque según parece les había llamado una señora que vive justo delante del cole