Los días transcurrieron lentamente provocándole gran estrés en el chico que tan solo deseaba un momento de tranquilidad fuera del hogar, algo que era imposible teniendo a una pequeña niña traviesa en casa que solo deseaba jugar con su padre.
—Papá quiero jugar contigo –se volvió a quejar la pequeña que estaba a su lado.
—Helen por favor entiende, no tengo tiempo para jugar contigo ahora. Ve con tu abuela a ver si quiere jugar contigo
Sin más, salió de la oficina azotando la puerta de esté provocando que la irá se apoderará de él de un momento a otro.
Tomó sus cosas para colocarlas en una vieja bolsa que encontró en esa misma oficina para después salir para ver a las únicas chicas mirando la televisión.
—Mamá cuida a Helen, voy al lago y no, no llegaré temprano
La mujer simplemente continuo con lo suyo con una mueca de disgusto, era igual a su padre, cada vez que se enoja necesita salir al largo durante un largo tiempo para después regresar casi a la media noche.
El era simplemente un clon de su padre, con sus diferencias por supuesto.
Al salir de casa tomó su bicicleta que se encontraba a un lado del viejo buzón con la palabra "Martínez" escrito en cursiva y comenzar a pedalear.
Casi al momento de pedalear pudo ver al gran tren pasar frente a él provocando un bufido de desesperación y molestia en él para después frenar rápidamente.
Desde hacía relativamente poco volvieron a transcurrir los trenes por estos lados ya que después de un largo tiempo alguien decidió ocupar la ruta que cruza el pueblo los cuales habían estado abandonados desde que él tenía memoria.
Algunos minutos después un viejo auto de color azul con una franja blanca se colocaba a lado suyo para escuchar como las ventanillas del mismo bajaban.
—Buenas tardes joven
—Buenas tardes oficial Thompson
El oficial Thompson era uno de los pocos oficiales de policía qué estaban para proteger y servir.
Conocía perfectamente al hombre ya que con su madre, salieron durante un largo tiempo pero como cualquier otra relación terminaron rompieron de forma mútua y sin peleas.
Al inicio se enfado con su madre por esa "absurda" de desición ya que durante mucho tiempo su madre lo considero el hombre perfecto después de su padre.
—¿Ya conoces a mi hija? El lunes fue su primer día en el instituto
Tras aquél comentario empezó a recordar a los nuevos estudiantes de primero pero sin previo aviso el continuó.
—Vamos chico, está en el mismo salón de clases que tú –se quejó dando una leve risa mientras se escuchaba el tren cruzar.
—¿Su hija es Samanta Villar? –pregunto intrigado mirando al oficial.
Estaba por todo de contestar cuando comenzaron a hablar por la radio del automóvil provocando que el oficial pusiera atención en el mismo.
—Para todos los oficiales en servicio se solicita su presencia en la comisaría central lo más pronto posible, repito, para todos los oficiales en servicio se solicita su presencia en la comisaría central lo más pronto posible
Así continuo repitiendo lo hasta que la hombre le bajó el volumen y volver a poner su atención en el chico.
—Le mandas mis saludos a la Reyna y a la princesa por favor
ESTÁS LEYENDO
Mi Segunda Princesa || PROCESO ||
Dla nastolatkówDrack Martínez un joven padre adolescente soltero trata de vivir un vida normal en un pequeño pueblo de Massachusetts con el sueño de ir a la gran ciudad y convertirse en el mejor pintor de la década. Mientras tanto Samanta Villar que acaba de lleg...