Terminamos, después de pasar frente a muchos ebrios y alcohol, en la entrada de una habitación al final del pasillo del tercer piso, donde claramente no estaba permitido entrar... eso solo aumentó mis ganas de hacerlo, por lo que entré y arrastré a mi preciso novio conmigo.—Tengamos nuestra fiesta privada, le robé este vodka al chico inconciente en el segundo piso —dije levantando la botellita y haciendo un mini bailecito.
—Diablos ¿Quieres que nos echen Elian? —espetó mirándome con frialdad y mordí mi labio.
—Oh no cariño, me pondré más caliente si me insultas, es tan sensual vieniedo de ti —comenté sentándome sobre la cama con una pierna sobre la otra y dejando la botella sobre ésta.
—Frank no se molestará, pero si su prometida sabe de esto o entra aquí será un problema, a ella no le agrandas por alguna razón —esa zorrita envidiosa, ni tos me da cuando me mira despectiva.
Ops, cierto que debo soportarla por los muchachos.
—¿Cuándo te he metido en problemas amor? —cuestioné juguetón y estrechó los ojos haciéndome reír— Bien, bien, mejor dicho... —me acerqué a su pecho y comencé a desprender su camisa botón por botón— ¿Cuándo la has pasado mal conmigo?
Todavía con su serio semblante sentí como su piel comenzaba a arder, su cuerpo es tan susceptible que me emociona ver sus reacciones cada vez.
Deslicé la camisa por sus tonificados hombros y descendí por sus brazos, sin dejar de besar la piel que iba exponiendo
Cuando me deshice de ella sonreí malocioso, él llevó una de sus manos a mi cuello y lo acarició hasta subir y tomar mi rostro.
—Siempre me haces sentir muy bien —dijo con naturalidad, tomándome por sorpresa y nuestros ojos se encontraron.
Acorté la distancia entre ambos y me detuve cerca de sus labios con una insinuante expresión. Aún con su mano en mi mejilla me acercó autoritario, besando lenta pero decididamente mis labios.
Me separé del beso e incliné acariciando los costados de su cuerpo hasta llegar a su cadera, sin dejar ningún espacio de su hermosa piel sin ser rozada por mis labios y me arrodillé a medida que desabrochaba su pantalón.
—Oh vaya... ya estás así duro y no he hecho nada —dije juguetón y tomó con fuerza el largo de mi cabello.
—Sí, lo haces —afirmó entre dientes, bajé mis ojos a su boxer y lamí la extensión de su erección sobre la tela— Oh cielos...
Con ambas manos bajé la única prenda que le quedaba y liberé su virilidad, lo sujeté con una mano y recorrí con mi lengua desde la base hasta su rosada punta sin dejar de mirarlo.
Soltó un gruñido por mi acción y su agarre se intensificó en mi cabello volviendo mis ojos llorosos.
Una increíble electricidad recorrió mi cuerpo en ese momento y sentí algo crecer en mi entrepierna.
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Buenos amigos SPIN-OFF (+18↔GAY)
RomanceSpin-off de la novela "Kilian". Donde Matthew es demasiado cobarde para decir en voz alta lo mucho que ama a su buen amigo.