Jitzu ✔✔

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"Me niego a perderte".

Narra Jihyo:

Mirando al suelo, voy en camino al mismo sitio de siempre. Buscando ahogar en alcohol las penas de lo que nunca fue, intentando encontrar un porque en el fondo de la última copa.

Desapareciste, cubriendo muy bien cada paso, como quien no quiere ser encontrado.

<<No quieres ser encontrada.>>

El bullicio es hasta molesto; las palabras saltan al viento, volando lejos. Las risas y las lágrimas se evaporan, consumiendoce finalmente al amanecer.

Hace meses no pego ojo, todo tu culpa, culpa de tu recuerdo, tan doloroso como la hoja filosa de aquella cuchilla traicionero que atravesó de lado a lado mi corazón.

Es tarde, la noche ha cubierto cada centimetro de la ciudad. Es peligroso, pero mis manos no tiemblan de miedo. El bar de mala muerte ya no me intimida como la primera vez.

<<Suelo ser cliente habitual.>>

Una vez en la barra, pido la bebida más fuerte, algo se vodka joderá mi garganta pero no supone precisamente un problema. Anulara mis sentidos, eso es justo lo que busco.

<<Aturde mis ideas, almenos no pienso.>>

Una vez frente a la barra, le hago señas al encargado. Jimin vuelve a rellenar mi copa. Quema. Después de la quinta copa todo sigue igual, he desarrollado una extraña inmunidad a esta bebida, tomarla a menudo es lo que tiene.

Para cuando voy por la décima ya todo me da vueltas, siento el mareo, pero aún soy consciente. O almenos eso creo, cuando escucho nuestra canción en la radio creo que estoy alucinando.

Esa estúpida canción que repite una y otra vez que jamás estaré sola, pero es una cruel mentira susurrada con maldad a un corazón inocente.

Pasos a mis espaldas, la madera del suelo del bar cruje. Todo está extrañamente en silencio de repente, pero nadie parece prestarle atención a los fuertes pasos.

Aún sin saber quién es me encojo en mi sitio, intentando disimular el repentino miedo. Percibo un olor conocido, el suyo.

JAAJAAJJAAJJAJAJA, patética. Eso eres Jihyo, una patética chica enamorada de otra que desapareció de la noche a la mañana dejando sólo una nota.

"Amor, realmente lamento irme, pero tengo que hacer esto. Los días junto a ti para mi, han acabado."

Desde entonces no hago mas que preguntame ¿por qué diablos huyó? ¿qué hice mal para que no eligiera quedarse a mi lado o almenos... llevarme con ella?

Demasiadas preguntas, y ninguna respuesta. Sólo silencio y ninguna pista de su paradero.

El olor se siente cada vez más cercano, tan dulce que me marea. Tan conocido que me hace recordar. Tan difícil de pasar por alto.

Dios, estoy enloqueciendo.

Siento una mano en mi hombro, todos parecen perder el aliento, están tan pendientes a lo que pasa, o eso me parece a mi. Doy un pequeño salto en mi y me encojo en mi asiento.


Dedos largos y fríos. No puede ser.

- Jihyo.

Esa es su voz, estoy segura de ello, no quiero voltear. No quiero seguir escuchando. Tanto tiempo esperando una respuesta y ahora no quiero tenerla.

<<No hables.>>

- ¿Eres tu?

Y lo ha hecho, hablar, aún si no quiero oírla, aún si no puedo entenderla.

Volteó, y ahí está, con una ceja levantada y una mueca en los labios, juzgando mi estado, me siento tímida por un momento. ¿Quién querría que Zhou Tzuyu le mirase como si no valiera lo suficiente? es intimidante y me hace sentir tímida. Me hace querer estar en mejores condiciones, pero entonces esta la pregunta, ¿porque me importa? no fui yo quien desapareció por todo un año.

Siento que tengo que explicar el porqué estoy asi, pero es más que obvio, y en todo caso es ella quien que empezar con las explicaciones.


- Park Jihyo, para servirle.

- Eres tú. - dijo.

Idiota, ¿tienes problemas para reconocerme ahora? ¡Claro que soy yo!

- No, si te parece soy su niet...

Y todo, de repente, se volvió oscuro.


...

La luz en mi cara, es molesta, muy molesta. El dolor de cabeza es horrible, todas las resacas lo son. Ojalá estuviera en mi comoda camita, eso sería un plus, pero noooooo, estoy... ¿dónde estoy?

Parpadeo un par de veces, intentando fijar la vista. Hay demasido luz en esta habitación. Entrecierro los ojos, y miro al rededor.

Una habitación vacía, y en pésimas condiciones. Intento levantarme y entonces lo noto, algo en mis muñecas se sentía apretado, cuerdas.

No puedo moverme. Joder. ¿Qué mierda está pasando?

- ¡Eh! ¡Ayuda!

La puerta del fondo se abre cinco minutos después. Entonces caigo en cuenta de que es Tzuyu quien atraviesa esa puerta. Lo de la noche anterior... no fue un sueño.

Ella realmente está de vuelta.

- Buenos días. - dice, con una estúpida sonrisa de oreja a oreja. Cínica.

- ¿Se puede saber porque mierda estoy atada?

Ella se mueve más cerca, yo me estremezco.

- Cuida esa boquita guapa, y deberías ser más agradecida con tus anfitriones.

- ¿Pero de que hablas? ¡Ni siquiera se que hago aquí!

En silencio, camina hasta estar frente a mi. Hago lo posible por no temblar, es tan imponente como la recuerdo. Se agacha y acaricia mi mejillas, dedos largos y fríos.


- Ahhh así que es eso, no te preocupes Ji. Pronto lo sabrás. Pero te digo una cosa, me niego a perderte, no otra vez.

Y finalmente, una sonrisa.

CORREGIDO. ✔✔

One Shot's; Twice [+18] (CORRECCIÓN)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora