Día 16

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Realmente Lee Haneul no se esperó ver a su hermano al otro lado de la puerta la noche anterior, con maletas y cajas detrás de él. Se preocupó, como toda hermana mayor y enseguida lo acogió en casa. Minho se lo contó todo y Haneul lo escuchó atentamente. Le sorprendió mucho el hecho de como se complicaba la vida su hermano pero aun así lo apoyó en su elección.

― ¡Minnie! ―llamó la chica desde la cocina a la mañana siguiente. ―Es hora de desayunar.

Minho apareció en la cocina y tomó asiento en la barra esperando ansiosamente el desayuno. Hacía tiempo que Haneul no cocinaba para él, y también había pasado un largo tiempo desde la última vez que se vieron. Haneul había estado muy ocupada con su grupo de baile participando en competiciones y ejerciendo de back-up dancers de grupos musicales. La última vez que se vieron Minho todavía no había conocido a Jaeyong.

―Mhm... ―musitó Minho mientras saboreaba los huevos con bacon. ― ¡Cuánto tiempo! Están riquísimos noona.

―No tienen ningún secreto ―dijo ella entre risitas, feliz por volver a ver a su hermano. ― Entonces, ¿Qué harás hoy?

―Hablaré con Jisung, le contaré todo y luego bueno... Pasará lo que deba pasar supongo ―explicó Minho mientras tomaba un sorbo del café. ― Pero bueno, ¿Tú cómo estuviste noona? ¿Cómo fue la gira?

―Oh... Fue genial, realmente es muy impresionante subirse a escenarios tan grandes ―dijo Haneul con admiración. ―Quería pasar a visitarte después de descansar un poco, pero creo que no te hubiera encontrado en tu antiguo piso ―añadió con unas risitas.

―Tampoco avisaste de cuando llegaste, podría haberte venido a buscar al aeropuerto ―replicó Minho indignado por que su hermana no le contara que llegaba.

―Quería daros una sorpresa a todos pero más bien me la has dado tú a mí ―repuso su hermana.

― ¿Papá y mamá tampoco saben?

Haneul negó con la cabeza y Minho la regañó por no hacerlo. La obligó a llamar a su madre y a contarle que ya había llegado. Aunque Minho no mantuviera contacto con sus padres no quería que su hermana también lo hiciera. Se fue de casa a los 16 y cuando obtuvo un lugar decente donde vivir. Nunca se llevó bien con ellos, Minho siempre había sido tratado como la sombra de su hermana. Lo apuntaron a clases de baile porque su hermana también iba y cuando les confesó a sus padres que quería dedicar parte de su vida al mundo del baile le dijeron que todo se lo debía a su hermana ya que gracias a ella descubrió el baile.

No se alegraron por él por haber descubierto su vocación en la vida como tampoco le prohibieron seguir bailando, se limitaron a hacer una clara referencia a su hermana y a callar. Minho sentía que era el hijo que en realidad nunca desearon y la situación lo ahogaba. Pero la verdadera bomba cayó cuando confesó que era homosexual. Su hermana lo apoyó hasta al final pero sus padres se limitaron a soltarle:

―Tu hermana no es así ―soltaron con desprecio, lo que en realidad mostraba su desacuerdo ante la revelación de su hijo.

Sin perder tiempo Minho se buscó la vida para seguir adelante y tan pronto como la ocasión se le presentó delante huyó, sólo Haneul sabía las verdaderas intenciones de Minho. Él nunca la odio, no podía odiarla, ella no tenía la culpa de nada y siempre lo había estado apoyando y ayudando cuando sus padres no lo hacían.

Después de terminar el desayuno Haneul se despidió de su hermano ya que había quedado con sus padres en comer juntos para ponerse al día. Minho pronto se quedó solo en casa y empezó a plantearse como debía decírselo a Jisung, porque conociéndolo se echaría la culpa de su ruptura con Jae. Después de darle muchas vueltas al asunto decidió no complicarse mucho más y llamó a Jisung para quedar. Quedaron en verse por la tarde en el puesto de helados de siempre.

Only Twenty More || Minsung Donde viven las historias. Descúbrelo ahora