Only Twenty More || Minsung

Día 18

Minho se sorprendió a sí mismo, cuando decidió darle una sorpresa a Jisung e irlo a ver con un ramo de rosas a su casa. No solía ser de este tipo de novio, de los que regalan cosas porque si. Eso no quería decir que fuera reacio a gastar dinero, simplemente creía que si se debía hacer un regalo debía ser para alguna ocasión especial que lo mereciera, un regalo es algo especial y único.

Jisung también se sorprendió al verlo ahí palplantado en la puerta, con el ramo de rosas tendido hacia él acompañado de una gran sonrisa. Sin embargo recibió el regalo encantado y lo hizo pasar. Chan entró al salón y miró sorprendido la escena, se retiró antes de que lo pudieran detectar.

―Es... Una sorpresa verte con un regalo en mano porqué sí ―admitió Jisung con el ramo agarrado.

―Para mi también lo es... Pero... Quería hablar contigo y creo que eso es un buen comienzo... ―dijo Minho.

A Jisung le recorrió un escalofrío por el cuerpo al oír que quería hablar con él. Le dijo que se sentase en el sofá y posteriormente él también tomó asiento.  Minho lo miró fijamente y Jisung dejó con delicadeza el ramo en la mesa de centro.

―Jisung... He venido aquí porqué no quiero perderte otra vez, quiero permanecer contigo todo el tiempo que me sea posible y prometo no volver a fastidiarla otra vez ―declaró Minho sujetando las manos del menor entre las suyas con un tono suplicante.

―Minho... A mi también me gustaría poder estar contigo... Pero... Después de todo, yo... Lo siento ―dijo Jisung sin poderlo mirar. Si veía la carita de Minho triste no se podría reprimir y dejaría que sus sentimientos tomaran el control de sus elecciones. Quería estar con Minho, lo deseaba pero tenía miedo de volver a sufrir y a salir lastimado, o peor, que personas externas también sufrieran las consecuencias; estaba convencido de que no había sido fácil para Jaeyong dejarlo ir.

―Jisung... Te lo prometo, te juro que me volveré a ganar tu confianza. Sólo dame una oportunidad más... ―suplicó Minho.

―No es tan fácil, no es sólo eso...

―Entonces cuéntamelo, ¿qué ocurre?

―Nada Minho, no te preocupes.

― ¿Cómo esperas que no me preocupe si me dejas en ascuas? Jisung... Confía en mí, una vez más, por favor ―siguió pidiendo.

Chan observaba la escena desde el pasillo. Sabía que su hermano lo estaba rechazando para protegerse a sí mismo pero no podía evitar sentirse mal por Minho, si Woojin no quisiera contarle sus problemas estaba seguro que estaría igual que él.

―Déjalo Minho por favor...

Minho suspiró, decidió no seguir presionando a Jisung. Al fin y al cabo tenía sus motivos para desconfiar de él. Lee llamó la atención del menor y le levantó la barbilla con su mano, acercando su rostro a escasos centímetros del suyo. Y como si Jisung fuera un fino jarrón de porcelana le besó suavemente, tan leve que se le podría llamar roce. Jisung se sonrojó con el contacto, nunca antes Minho lo había besado tan dulcemente. Se quedaron un rato sujetando la mirada hasta que una alarma sonó desde el teléfono de Jisung.

⚠ Hospital 19:30 🏥

Se levantó y le dijo a Minho que tenía que irse a un sitio porqué había quedado. Minho no dijo nada y se limitó a marcharse silenciosamente por la puerta, no sin antes darle otro beso, esta vez en la mejilla.

― ¡Chan! ―llamó Jisung mientras se calzaba sus Converse.

Al rato apareció su hermano con todo listo. Juntos enfilaron por la calle y tomaron el bus 4419 que los dejaba justo en la entrada del hospital. No tardaron en llegar, como mucho les llevó 10 minutos. Una vez en recepción les atendió una enfermera que los llevó a una sala de espera.