Capítulo 19

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Escuche como Hee se despedía desde la sala y el sonido de la puerta principal, hoy debía llegar antes a su trabajo así que no podría ir a dejarme, por un lado lo agradecía, sabía que él me conocía bien y me preguntaría que porque ayer había llegado tarde y no había querido comer pizza. Después de lo que había pasado con Hyukjae no tenía muchas ganas de contestar las preguntas que seguramente me hubiese hecho. Así que fui directo a mi habitación.

A pesar de que ayer quería hundirme y a la vez saltar, hoy había decidido que, si tenía que suceder algo entre Hyukjae y yo, sucedería, algo así como un mantra en mi cabeza "lo que tenga que pasar pasara". Yo era de esas personas fáciles de ilusionar y lo peor era que lo sabía y aun así no ponía barreras, aunque, cito nuevamente; todo es culpa de las novelas rosas que me leo cada noche.

Hoy me había arreglado un poquitín más, siempre iba al trabajo bien vestido y con mi cabello arreglado, pero hoy me había dado la gana de exfoliarme los labios y ponerme un poco de bálsamo labial, también me había puesto un poquitín de vaselina en mis pestañas y esto le daba un toque como si fuesen más gruesa e intensas, y lo último era que había cambiado la partidura de mi pelo, esta vez era de lado izquierdo al derecho, este último era diminuto, aunque la intención tampoco era que lo notaran.

Tome mis cosas y toda mi valentía para dirigirme a la agencia. No quería ver a Hyukjae, ósea si quería verlo pero no, porque no sabía cómo reaccionaría, sabía que me pondría de todos los tonos y que mis manos comenzarían a sudar, sabía que sería así pero lo controlaría o al menos trataría.



Un día más de trabajo, y todo estaba normal, salude a los chicos a medida que iba llegando a mi puesto, no podía evitar mirar a todos lados tratando de ver si Hyukaje se encontraba en el perímetro, pero no.

Las primeras dos horas fue básicamente contestar los correos de la bestia y llamar a Siwon y Yeri para coordinar una reunión.

Donghae, acaba de llamar Hyukjae, dice que si puedes subir a su oficina –me dijo Hani, sin prestarme atención ya que tenía su mirada fija en unos presupuestos-

Ok –fue lo único que dije, hasta allí había llegado mi seguridad, y mi "lo que tenga que pasar pasara". No quería ir, quería hacerme una bolita y quedarme bajo mi escritorio.

Hae, ¿estás bien? –Sungmin me miraba del otro lado del mesón con una expresión clara de confusión- estas rojo y te vez... raro.

Odiaba ser un libro abierto para algunas personas, sobre todo para Min que era bastante perceptivo- No pasa nada, solo me ha dado un poco de... calor -me miro y se encogió de hombros-

Avise rápidamente que iría donde Hyukjae y me fui escaleras arriba. No iba a negar que las manos ya me estaban sudando y aun ni siquiera lo tenía tenia cerca. Ya estando frente a su puerta, me frote mis palmas para eliminar el exceso de sudor, pase mis manos por mi cabello tratando de acomodarlo y me aplique un poco de bálsamo labial que llevaba en mi bolsillo del pantalón, no sabía porque lo había hecho, pero me apetecía y de alguna extraña manera me hizo sentir un pequeñin confiado.

Respiré y toque, el toque fue tan insípido que tuve que tocar una segunda vez y con más fuerza.

Adelante Donghae –escuche la voz de Hyukjae del otro lado-

Boté el aire que tenía retenido y abrí la puerta, entre y cerre. Sin mucha confianza trate de evitar su contacto visual hasta que estuve frente a su escritorio y fui levantando mi vista lentamente hasta toparme con un Hyukjae sentado en su silla, con sus manos entrelazadas sobre su escritorio y su típica aura de seguridad.

I Trust - EunHaeDonde viven las historias. Descúbrelo ahora