Destino Inesperado

Capítulo 8

Elizabeth no se da cuenta que su marido está detrás de ella y al parecer Eliza esta desconcertada por toda la información que recibió.

Su mano derecha aterriza en mi mejilla con bastante fuerza que siento el sabor metálico de la sangre en mi boca, se ve que en sus ojos hay una furia matadora, esta tan ciega de la ira que comienza hablar hasta por lo codos.

-¡¡Cállate!!- grita -Maldita metida, si, yo me acuesto con ellos y con muchos más, pero a ti nadie te va a creer maldita huérfana, es tu palabra contra la mía, a mi los hombres me buscan y me desean, cosa que a ti jamás te va a pasar, por que eres un engendro, el cual si sale de esta casa, no tiene donde caerse muerta, la que no tiene padres ni dinero, los padres que han de estar agradeciendo no haber tenido que soportarte, y si, todo el dinero de tus padres nosotros lo disfrutamos y no te imaginas la alegría que sentí cuando me enteré que murieron y todo lo de ellos quedaba en una simple e insignificante mocosa-

Oh no perra, tú no te atrevistes a tratar haci a mis padres, por primera vez en mi vida hago lo que siempre quise hacer, estampó mi puño directamente en su nariz, rogando para que se rompa, Bruno mira todo perdido, al parecer no se esperaba la confección de su esposa y peor mi reacción, Elizabeth comienza a gritar por su nariz y la sangre que brota de ella.

-Mis padres fueron las mejores personas que pudieron existir, no quiero que más en tu asquerosa vida vuelvas hablar de ellos por que lo próximo que haré es arrancarte la silicona de tus senos y trasero maloliente- amenazó - y no me vengas con ridiculeces que a ti los hombres te buscan, por que para meterte en la cama del vecino tardaste un mes, pero lo entiendo, a él no le gustan maduras y que te iba hacer caso a ti si se revuelca con tu hija, al final cedió contigo por el simple hecho de ser una vagina fácil y con Roberto el mejor amigo de Bruno, tanto coqueteo hasta que el té vio igual que todos y aprovecharse el embarazo de tu supuesta amiga para provocar a su marido, que perra, no se como la gente es tan estúpida para no darse cuenta, lo último que falta es que Eliza te presenté a un novio y también te lo termines follando. ¡Oh! Espera eso sí paso con Sergio y si que lo disfrutaste mucho tiempo a las espaldas de tu querida hija- escupo todo encolerisada y sabiendo que Bruno escucha todo, se ve que ella trata de pegarme pero la empujó para que choque contra el pecho de su marido, en el instante que lo siente se pone más pálida que una hoja y sus ojos se abren del horror, oh si, querida....

-Elizabeth, comienza a preocuparte mejor por tu matrimonio que por la mejora que le hice a tu cara-

Salgo empujandolos, pero al parecer Eliza me sigue hasta mi habitación, comienzo a escuchar gritos y eso me alegra demasiado, Bruno suele llegar mucho más tarde por eso Elizabeth no se espera verlo ahí.

-Eres una maldita perra- dice Eliza mientras me jala del cabello en mi habitación, error perra.

-No más que tú puta-

Me giró y agarró su cabello y jalando con fuerza, con todo la rabia que siento estampó mi puño en su estómago dejándola sin aire, con mi otro puño le golpeó en el rostro dos veces para ver si puedo romper su nariz, el crujir de esta me confirma que lo logre, se tira en el suelo maldiciendo y sollozando por su pobre nariz, como puedo la agarro bien del cabello y la arrastró por el piso hasta sacarla de mi habitación y cerrar la puerta.

Escucho sus gritos pero poco me importa, no se dé donde saqué tanta fuerza para hacer todo esto, pero me alegro por que me pude desahogar de todas estas ganas que tenía de partirle toda la cara, con una sonrisa de satisfacción cojo una maleta y meto todo lo de la Universidad, y la poca ropa que me queda, 2 jeen's gastados y 4 blusas las cuales 2 son de Lena y su sudadera gris que ya es prácticamente mia, casi lloriqueo al ver el vestido negro todo roto con tijeras, era tan hermoso, veo la ropa deportiva intacta al parecer no la vieron , guardo todo en la maleta, junto con otra ropa sobreviviente y la cierro, en mi bolso guardó todo lo del baño que me pertenece, mi álbum y ahorros.

Bajo de mi habitación con mi maleta en dirección de la puerta, no aguanto más estar aquí, yo sé que algún día recuperare mi casa.

Con el sonido de todos los gritos de la casa salgo y me la quedó mirándo desde una distancia prudente, con una sonrisa nostálgica, tantas cosas hermosas pase en este lugar con mis padres, pero no puedo seguir en este infierno.

Me doy la vuelta y me subo al primer taxi que encuentro, con dirección a la casa de Len, al llegar a su puerta la golpeó con ansias, al minuto se abre dejando ver a una Lena en una pijama de coronas y una cuchara de helado el la boca, que al verme se le cae provocando un sonoro ruido..

-¿Pey que ocurrió, por que traes maletas?, por fin te escapastes de tu casa, tienes hambre, ¿te hicieron algo?- Le sonrió y le doy un sonoro beso y me adentro a la casa.

-Pues es una larguísima historia- dramatiso mientras me dejo caer en su sofá.

-Tenemos toda la noche querida- habla mientras coge una bandeja de caguil con caramelo que había en la  mesita la frente del sofá.

Le cuento todo lo que pase, la llegada a casa, mi habitación destrozada, la discusión con Eliza, con Elizabeth, los golpes que le dí a las dos y también que confesé algunas de las infidelidades de Elizabeth mientras su marido estaba de tras de ella..

Se ríe a carcajadas al describirle como le deje la cara a esas dos víboras.

-Quisiera que me dejes quedar un tiempo aquí Len, hasta que encuentre un trabajo y un departamento pequeño que pueda pagar-

-Hasta la pregunta ofende Pey, sabes muy bien que está es como tu casa, además mis padres te adoran, puedes quedarte el tiempo que quieras- Dice mientras recuesta su cabeza en mis piernas.

Así la pasamos conversando un rato más hasta que me llevo a la habitación de invitados donde me quedaría...

Voten y comenten♡

Auf Wiedersehen♡