Destino Inesperado

Capítulo 11

Terminó de bañar y vestir a Liam, lo cargo bajando con el a la cocina, no veo a nadie hací que lo pongo en una silla de bebé y comienzo a inspeccionar toda la cocina tratanto de grabar en mi mente donde está cada cosa, ya que tengo que hacer un desayuno nutritivo, pero al parecer en esta cocina no ahí todos los nutrientes necesarios que un niño necesita a está edad, tendré que hablar con Renata sobre el tema.

Comienzo hacer un poco de batido de fresas y lo pongo en un vaso pequeño, con lo que tengo a la mano hago un waffles en forma de pescado y el otro lo trato de hacer en forma de un dinosaurio, me salen un poco deforme pero igual se diferencia y lo ubicó en un plato tendido.

-Que prefieres Liam, ¿Chocolate o miel?- pregunto girando en mi eje para mirarlo a sus ojitos.

Me mira entusiasmado mientras aplaude, es un amor de niño.

-¡¡Colate!!- grita mientras se ríe.

-Chocolate será entonces- le respondo sonriendo.

Comienzo a untarle un poco de chocolate a los Waffles y comienzo a picar un poco de fresas y bananas para decorar el plato, ya estando todo listo se lo pongo en frente de el y comienza a mirar todo con adoración.

Comienzo a partir pedacitos del waffle y el los saborea gustosos haciendo sonidos raros con la boca.

Cuando termina casi todo el desayuno me trata de decir que esta muy lleno y sólo me río por su carita llena de chocolate.

Después de limpiarlo le digo que voy hacer unas galletas para más tarde que le de hambre, el asiente gustoso mientras lo llevo de regreso a su habitación, en el transcurso me comienza a decir que su color favorito es el azul igual que su papá, que tiene casi 3 años y que su segundo nombre es Maxi, me imagino a de ser Maximiliano pero el no lo puede pronunciar bien, aunque me sorprende mucho que algunas palabras las puede decir bien y a su edad eso es raro.

Al llegar a su habitación lo acomodo en la cama y reviso su pañal pero aún sigue limpio, le paso sus juguetes para que se entretenga mientras arreglo su habitación, recojo toda su ropa sucia, levanto todos los juguetes y arreglo lo más que puedo en el momento.

-Liam, voy a lavar esta ropa y a preparar esas ricas galletas para mas tardes, te voy a dejar solito un ratito y cuando regrese veremos una película de carritos, ¿te parece?- digo dulcemente.

-Ta ben, pedo no demodes. ¿Ya?- dice rascando su cabecita mientras me mira dudoso.

Sonrió por su acción y aceptó.

Busco en mi habitación el mapa que me dieron y trato de dar con la lavandería la encuentró después de dar algunas vueltas, encuentro 5 lavadoras, colocó en una la ropa blanca de el y la ropa de color en otra lavadora, pongo detergente  hipoalergenico y 30 minutos de enjuague.

Me voy a la cocina y comienzo a preparar la cena para Liam y las galletas que le prometí.

Al terminar de preparar la masa y ubicarlas en el horno 20 minutos, me dirigo nuevamente a la lavanderia, comienzo a secar la ropa y regreso a la cocina.

Preparo el almuerzo y sacó las galletas cuando suena el horno, el olor de estás se encierra en toda la cocina asi que las decoro con dulces M&M's que encuentro.

Ubico las galleas en un recipiente para llevarlo a la habitación de Liam y que sólo el las pueda probar, no me confió a dejarlas aquí, aunque no haya visto nadie en casi todo el día no puedo asegurar que no vayan a venir a la cocina.

La comida la dejo enfriando hasta que llegue la hora de comer y poder calentarla para Liam.

La ropa la dobló y la vuelvo a dejar en la canasta para regresarla a la habitación.

Subo a la habitación de Liam y lo encuentro pintando en hojas.

-Liam, listo para ver una película?- digo soriendo.

-¡¡Shi!!- dijo alzando sus bracitos contento.

Dejo en la mesita las galletas.

Prendo la TV y comenzamos a ver "Cars" acomodados en la cama.

Al pasar las horas le doy el almuerzo que consiste en un caldo de pollo y un poco de arroz con verduras.

Batallo un poco a la hora de que se coma las verduras pero con cara amarga lo termina haciendo por mi.

Todo el día fue muy normal, cambie el pañal de Liam 5 veces en todo el día, aunque el se mostró avergonzado trate de explicarle que yo sólo lo quería limpiar.

Cuando ya tenía sueño trate de cantarle una cancion que me cantaba mi mamá de pequeña.

Cuando siento su respiración calmada lo arropo bien con la manta y me retiro a mi habitación en silencio.

Después de una ducha larga me acuesto en la suave cama y trato de dormir sin cuestionar todo lo que pasó en estas semanas tan caóticas.

                     《■■■■■■■■■■■■》

Llevo una semana y media en esta casa y la única alegría en este lugar es Liam.

He tenido mucho sueños acalorados con el hombre de fuego.
Ese será su nuevo apodo, recordé fragmentos de lo sucedido esa noche, la forma que me besaba, la manera en que me tocaba, todo fue tan perfecto.

Siempre se vienen a mi mente esos ojos azules tan penetrantes, la manera como me miraba, en muchas ocasiones terminó muy mojada y eso no es bueno...

《Para tu salud metal si que no es bueno, pero si más que sea le hubieses pedido el número no estarías sólo soñando con el, te lo estarías devorando....》

¡¡Hummm!!! Sabes bien que nunca haría eso y si nos hubiésemos presentado con la suerte que tengo me lo hubiese encontrado hasta en la sopa.

《Concuerdo de que tienes una suerte...》

En fin....

Hable del problema de la comida y Renata me proporcionó una tarjeta de  crédito para todo lo referente a la comida o vestimenta de Liam.

Cuando Renata me dijo que tenía que ocuparme de todo lo de Liam, lo dijo literalmente.

Tengo que lavar su ropa, limpiar su cuarto, alimentarlo, verificar todo, absolutamente todo. No me quejo pero me parece muy raro todo esto, hasta el día de hoy conozco al papá o la mamá de Liam, aunque tengo entendido que el Señor de la casa regresa en tres o dos dia y eso me tiene algo inquieta.

En esta semana e tratado de adaptar mi horario lo mas posible para no dejar mucho tiempo sólo a Liam.
He tratado de explicarle mi ausencia en las mañana cuando tengo clase y lo a sabido comprender aunque aveces me pide que no lo deje sólo y me llena de ternura que tengo que faltar para quedarme con el, pero sólo a ocurrido dos veces.

En ocasiones e escuchado a las empleadas sin que se dieran cuenta hablar del Señor de la casa, de lo bien que huele su cuarto o su ropa, de las fantasías que suelen tener con el y muchas cosas más que pueden llegar hacer perturbadoras.

Al principio no encontraba a nadie, pero después de cuatro días cai en cuenta por Liam que no muy lejos de la casa había un invernadero muy hermoso y en ese lugar pasaban un tiempo las empleadas o en sus habitaciones o por último aunque estuviera prohibido el paso al cuarto piso ellas iban a ese lugar, después de escuchar las cosas que se imaginaban ellas, no quería ni imaginarme lo que hacían en ese lugar.

Con la inquietud en mi pecho acuesto a Liam, prometiendo mañana hacer otro postre de gelatina parecido al que hice hoy del cual todavía  ahí 2 trozos en la refrigerado.

Lo veo acomodarse con una pequeña sonrisa en su rostro mientras me retiro con cuidado a mi habitación.

Me despojó de toda mi ropa y adentro a la ducha para dormir mejor.

Me acuesto con sólo ropa interior por la calor que hace últimamente en mi cuarto.

Voten y comenten♡

Auf Wiedersehen♡